Una oportunidad

Seguimos besándonos ya no puedo aguantar más, así que la alzó y la llevo a mi auto no me importa quién nos vea, ella es mía y yo seré de ella en el auto nos seguimos besando, ella se sienta en mis piernas, mis manos viajan por todo su cuerpo. Nunca pensé que ella fuera así de impulsiva siempre muestra una cara de tener todo bajo control. Pero me encanta no me importa que los otros autos nos escuchen ella es mía en este momento y estamos haciendo el amor.

Cuando al fin llegamos al clímax ella cae en mi pecho y su respiración es rápida al igual que la mía. Minutos después cuando mi respiración y la de ella están más calmadas hablo.

- Gatita me sorprendes cada día.

- MMM yo también, nunca había hecho esto pero la verdad, quería vengarme de ti cuando te vi con esa, pero mírame sucumbí ante tus encantos otra vez, esto se ha vuelto un mal hábito.

- Y yo a los tuyos, creeme desde que estoy con tigo no he estado con nadie más.

- Entonces que hacías con ella.

- Quería dejar de pensar en ti, no estoy acostumbrado a eso.

- A qué no estás acostumbrado, si se puede saber.

- A pensar en una sola mujer, a desearla solo a ella a querer estar con ella no importaba la hora. En eso te has convertido para mí, en esa mujer te quiero conmigo.

- Y yo como se que no me estás utilizando como un juguete, y luego me vas a botar como basura, Alexander conozco a los de tu clase.

- Por favor dame una oportunidad, se que es difícil para ti pero te lo pido y si he sido un hombre mujeriego pero estar a tu lado me ha hecho cambiar. - No puede ser que yo Alexander este rogándole a una mujer una oportunidad cuando se enteren los chicos no me van a dejar en paz.

Llegamos a la casa y ella no a contestado si me va a dar una oportunidad, la llevo alzada y la acuesto en mi cama.

- Me vas a responder gatita.

- Y si te digo que no

- No sales de esta casa NUNCA.

- No me grites, que yo no soy como tus empleados a mi me respetas estamos de acuerdo, segundo deja los celos con Mateo, es mi jefe y mi amigo lo quiero mucho y él a mi, tres en mi trabajo no te metas, yo seguiré haciendo lo mío porque tengo que pagar una deuda.

- Eso no es problema deja de pensar en la deuda.

- No dejaré de pensar en ella hasta que pague el último centavo estamos, próxima ves que te vea con alguien olvídate de mi y puede que tus huevos no estén a salvo.

- Eso dolió pero significa que si me das una oportunidad.

- Si. - Me abalanzó sobre ella la beso profundamente, no la quiero dejar ir.

- Tengo una condición también, te vas a venir a vivir conmigo. - Ahora si me llevo el que me trajo.

- Eso no está en discusión. - Me dice muy seria pero se como chantajearla.

- Es eso o que renuncies al trabajo con Mateo tu miras a ver. - Se muy bien lo que va a hacer, se vendrá a vivir con migo, ella no soporta la idea de estar lejos de las cocinas es su pasión.

- Está bien, está ves ganaste tú. - Punto a mí favor no siempre puede ganar ella.

Esa noche hicimos el amor toda la noche, al día siguiente ella trabajaba así que la lleve a la casa de Mateo y luego a su trabajo de hay salí a mi oficina.

- Pero mira a quien tenemos acá. - Maicol me saluda desde la puerta.

- Buenos días Maicol, primero se saluda hasta donde yo se.

- Pero hoy estás diferente Alex, tienes un brillo en los ojos como si estuvieras enamorado.

- Ahora resultaste psicoanalista o psicólogo debes de cambiar de profesión entonces.

- Puede ser que ambas, o puede que tenga una vida secreta y tenga dos trabajos y no lo sepas, pero a qué debo el honor o a quién se debe tu radiante ser el día de hoy.

- Solo a una persona. - Le respondo.

- O no me digas que al demonio ya le llegó su ángel.

- A quién le llegó un ángel - Entro Jeison preguntando.

- Pues al demonio que ves sentado, no lo ves más radiante y menos malhumorado.

- No parece que le hubiera llegado un ángel , si no que cupido hubiera acabado con sus flechas, este pendejo está enamorado. - Mis dos mejores amigos se ríen de mi.

- Y si es así que - Les respondo en tono serio, muy en el fondo se que estoy loco por Juanita.

- Pues ya era hora, por qué tú menopausia ya nos tenía cansados, al menos ya tienes con quien desquitarte y nos dejas un rato en paz. - Dice Maicol.

- Con ella no me desquitare, así que esa idea bórrala de tu mente.

- Ya se a quien debemos ese gran honor su nombre es Juanita y se apellida Parker - Dice Jeison.

- Si, a la misma me dió una oportunidad de estar con ella, así que no pienso desaprovecharla.

- Umm si ella tiene el don de calmar a este demonio, de que más será capaz. - Inquiere Jeison.

Después de una larga charla con ellos y de ponerme al tanto con mis negocios me voy a recoger a mi hermosa mujer, si es mi mujer y vive con migo hacemos el amor todos los días y nos amamos. Podría ser amor lo que siento por ella, no nada que ver.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***