Capítulo 04. Franco no se puede sacar de la cabeza a Ivana.

Un día domingo por la tarde los chicos se reunieron para jugar fútbol en una pequeña canchita de fútbol todos jugaban incluso Daniel al terminar de jugar se sentaron a refrescarse.

Daniel: que tal te fue ese día con la Kovalenko.

Franco: pues menos mal, que entro a un edificio de ellos, luego salió junto a otra chica muy parecida a ella, subieron a un auto y se fueron juntas, supongo que debe ser su familia.

Daniel: si, tal vez era su hermana Diana.

Franco: ¡hermana! Creí que era hija única.

Daniel: Pues que yo sepa no mis padres hacen negocio con ella y su padre.

Franco: esa niña tiene unos ojos muy hermosos.

Daniel: acaso ella te cautivo.

Franco: no, no solo que la verdad no se hermano, no me gusta, sentirme como me siento al estar a su lado.

Daniel: no entiendo nada, explícame, acaso sientes algo por ella.

Franco: la verdad no, no, pero sabes hay algo en ella que no me permite sacarla de mis pensamientos.

Daniel: Franco, tuuu estas enamorada acaso de ella.

Franco: no, no, como podría enamorarme de una persona que recién conocemos además, ni siquiera se realmente como es, quién de su posición se fijaría en alguien como yo, no, no hermano esa posibilidad esta bien lejos.

Daniel: entonces, si te gusta?

Franco: no solo estoy confundido, porque no la puedo sacar de mi cabeza, pero de gustarme no, yo ya no tengo espacio para el amor, no eso conmigo no va, estoy enfocado en el grupo y en mis estudios, sabes esta vez me inscribiré en el concurso de chef.

Daniel: siempre te animas.

Franco: si, si existiera la posibilidad de ganar sería muy bueno ya que necesito ese dinero para los chicos.

Daniel: y para ti, Franco, piensas en ellos y tu.

Franco: yo no importo, ya mi vida esta hecha seguiré trabajando, para ellos, yo algún día seguiré con los estudios.

Daniel: como te va en la universidad, tienes buenos alumnos.

Franco: si, el director fue muy amable en considerarme para que yo dé las clases de cocina, también me ayuda ese dinero, solo que pronto vendrá uno graduado, y pues tiene más valor que yo así que debo buscar otro trabajo de medio tiempo.

Daniel: hermano, porque no permites qué le diga a papá que te ayude tu me ayudaste mucho a mi.

Franco: no, no Daniel, yo saldré solo, solo debo tener paciencia.

Daniel: bien no te insisto más.

Franco: ya es tarde debo ir a trabajar, nos vemos.

Daniel: nos vemos hermano cuídate.

Franco: gracias hermano, chicos nos vemos en la casa.

Chicos: de acuerdo.

En el camino, Franco caminaba pensando en Ivana, el se preguntaba si era amor lo que sentía por ella mientras los padres de Ivana la inscribieron en natación y empezaría al día siguiente, ese día sería solo para ir de compras. Al día siguiente todos a clase luego de clases Ivana asistió a la clase de natación, al mismo lugar en donde Daniel práctica natación para un concurso que pronto se realizaría, solo que con diferente entrenador.

Los días pasaban muy de prisa, un día llego Ivana a buscar al nuevo entrenador qué le otorgaron ya que vieron el potencial qué tiene para natación, este también la entrenaría para el concurso, al llegar vio a un muchacho de espalda.

Ivana: hola disculpa, estoy buscando al señor Hurtado.

Al voltear, Daniel le quedo mirando, no podía creer que ella esté delante de él, realmente es hermosa, pensó, Ivana le dijo.

Ivana: disculpa, no me presente, soy Ivana.

Daniel: Kovalenko, lo sé.

Ivana: si claro, estoy buscando al señor Hurtado.

Daniel: no te acuerdas de mi, mi nombre es Daniel, te vi en la casa hogar, cuando fuiste con Franco y los chicos.

Ivana: Oh ya recuerdo, tu fuiste quien nos trajo a la ciudad, lo siento ese día me porte muy mal.

Daniel: pues quien no después de lo que dijo Franco.

Ivana: si verdad, que gusto volver a verte Daniel.

Daniel: el señor Hurtado no tarda en venir lo llamaron a oficina, al parecer, cosas del concurso.

Ivana: tu también vas a concursar.

Daniel: porque dices también, acaso tu concursaras.

Ivana: si así es, es por ese motivo que me enviaron con el señor Hurtado.

Daniel: que bien, debes de ser buena en natación, porque el señor Hurtado, es muy estricto.

Ivana: espero serlo, yo nado desde los tres años.

Daniel: vaya entonces eres mejor que yo, yo empecé desde los 13 años.

Ivana: como están los chicos.

Daniel: ellos están bien en sus estudios y trabajos.

Señor Hurtado: haber chicos que bueno que ya se conocieron, soy el señor Hurtado, usted señorita Kovalenko a camerino a vestirse y usted señor Ruiz al agua, vamos, vamos no hay tiempo que perder.

Daniel le señaló la dirección del camerino a Ivana y se lanzó al agua, Ivana logró entenderlo, fue al camerino y regreso

Señor hurtado: bien señorita Kovalenko, al agua demuestre, el porque esta aquí.

Sin que el señor Hurtado terminase de hablar ya Ivana estaba en el agua, cronometrado su reloj el señor Hurtado quedo sorprendido con la habilidad y rapidez de Ivana en el agua, le hizo recordar sus tiempos de adolescente, esa actitud y fuerza. Daniel se quedó aun más asombrado.

Señor Hurtado: excelente, señorita Kovalenko, has participado en otras ocasiones en concursos.

Ivana: si señor.

Señor Hurtado: bien este será un concurso muy reñido, tu estarás en la categoría femenina y el señor Ruiz estará en el de masculino, así que vamos al agua a seguir practicando, ya.

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