Tormenta

Leonora va a caballo con Mariana quien le informo que varios niños están enfermos, sus síntomas pueden ser el inicio de una epidemia, así que se alistó para salir con ellos.

El conde Felps ya estaba en el lugar donde se aislaron los niños.

-Conde no debe estar aquí, es peligroso hasta no saber que les causa la fiebre, los médicos se harán cargo, ellos ya vienen, están preparando sus cosas y las medicinas.

-Soy el señor de estas tierras, debo estar al pendiente, no necesito su permiso.

-Si, pero si le pasa algo, estas tierras se quedaran sin conde, así que salga de aquí, si siente algún síntoma no dude en venir conmigo.

-Está bien no los interrumpo, espero noticias.

Los médicos entran y no poniéndole mucha atención al conde, por qué no lo conocen y no viste con su escudo, parece un guardia más.

Leonora revisa a cada niño junto con Mariana, afortunadamente solo son principios de sarampión, gracias al conde que llegó mucho antes ordenó que los niños fueran apartados, así es menos probable que se contagien los demás, sus molestias son curadas con magia, pero la enfermedad no es mortal, por lo tanto, sus cuerpos se curarán poco a poco, la medicina es para reducir sus síntomas.

El conde espera en la casa que le asignaron, revisa mientras los informes del pueblo, este año por la guerra no han producido mucho, él ordena traer víveres y semilla para las nuevas cosechas, también aprovecha para salir a supervisar el estado de los campos y las viviendas.

En su camino se encuentra a los médicos que salieron a las casas en busca de otras personas enfermas, Mariana va con ellos y se separan para poder abarcar más, la casa que le tocó a ella está mas lejos.

-Mejor hubiera pedido un caballo. 🥺

Ella al voltear ve que un jinete va todo galope y hace que se detenga.

-Estás loca, que te pasa 😠

-Perdón caballero, podrías llevarme a las casas más adelante, soy la doctora Mariana, no contemple que estábamos lejos, por favor 😁

-Caballero? Pero pero. Haaa bien, dame la mano.

Mariana sube y ambos montan el caballo, las casas están más hacia el bosque, el conde no le dice quien es y Mariana piensa que es un guardia, muy guapo por cierto.

-Debiste pedir un caballo, el bosque es grande esas dos casas están alejadas porque ellos pescan en la presa a eso se dedican, a mitad del camino está una cabaña de caza, ahí podemos descansar si te cansas.

-No, estoy acostumbrada a montar, pero podrá ir un poco más rápido, si va así de lento llegaré mañana.

-Bien, vamos más rápido.

Leonora termina de atender a todos, al ir con el conde le informan que salió a supervisar los campos y se tardará.

-Espero que no mucho, el cielo está completamente gris, lloverá muy pronto.

-Él conoce muy bien el territorio, no se preocupe.

-Parece un niño presumido.

-Si lo es o bueno lo era, le afecto mucho la muerte de sus padres, su madre fue secuestrada como muchas damas del reino, para amenazar a los nobles, él era más joven y por años su madre estuvo en él palacio, cuando su padre fue por ella, también lo cerraron en los calabozos, al estallar la guerra el joven amo se tuvo que esconder, precisamente por estos bosques, al saber que el Emperador de Lyra logro derrotar al reino el fue a rescatar a sus padres, solo que no llego a tiempo, en esa región lo conocen muy bien la gente lo protegió, jamás dejaron que lo atraparán.

-Es triste su historia, como la de muchos por la guerra, espero que sea un buen Conde.

-Lo es mi señora, es joven, aun así sabe hacer su trabajo.

-Pasaré la noche aquí, mañana regresaré al Condado, me podrá preparar una habitación para mi guardia y para mí

-Si mi señora, de inmediato.

En el bosque un caballo venía a todo galope de regreso, pero a la lluvia sorprendió y se le complica ver el camino.

-Caballero por favor más despacio, el caballo puede resbalar.

-Debemos llegar a la cabaña de caza, te tardaste mucho.

-No me tarde, tú te fuiste a pescar con los niños, afortunadamente ninguno está enfermo.

-😒, bajate ya llegamos, solo que no sé si haya ropa para ti.

-Que? No me quedare aquí contigo.

-No hay otro lugar, que no vez que se cae el cielo, no podemos seguir cabalgando, ahora entra.

Mariana entra a la cabaña, va toda mojada, el conde busca ropa, pero no hay de mujer así que le da de hombre.

-El baño está al fondo, el agua se calienta con magia así que debe estar tibia, date prisa para que yo también me bañe.

--Si está bien, me dare prisa.

Con pena entra al baño, se da un baño rapido y se cambia, al salir el caballero entra para bañarse, ella está nerviosa jamás ha estado con un hombre a solas.

-Él es un caballero guapo, talvez vez si yo y él, asi mi padre no podrá obligarme a un matrimonio 😅 un sacrificio no sería, jaja estoy loca, mejor pongo té.

El conde también se baña rápido y espera que la tormenta pase rápido.

-Maldición, no creo que deje de llover hasta mañana, eso me pasa por buena gente.

-Caballero, no le he preguntado su nombre, quiere un poco de té, la señora en agradecimiento me regaló galletas.

-Me llamo Rafael, tu eres Mariana.

-Sí, estaré en este condado por un tiempo, se dice que el conde es presumido y arrogante, eso es verdad?

-Cof cof cof, quien te dijo eso.

-Mi señora cuando salimos del Ducado Castell.

-Tu señora se equivoca, él no es así, bueno un poco.

Rafael busca entre las cosas vino, el té de ahí casi no le gusta.

-Quieres hace frío, un poco de vino no te vería mal.

-Si, pero solo un poco no bebo mucho.

Después de un rato, Mariana le contaba su vida a aquel caballero, ella creía que él era un guardia del condado, sin título sin fortuna y alguien que podría ayudarla para que su padre no la obligara a casarse.

-Tú puedes ayudarme, solo tienes que cooperar un poquito 😂😂

-De que hablas, es mejor dormir dijimos que solo una copa y ya llevamos cuatro botellas, estoy mareado.

-Donde dormiremos, solo hay una cama 😏

-Tú en la cama yo en el sillón, pasar la noche aquí juntos ya es demasiado, si se dan cuenta estarás en problemas.

-No me importa, así mi padre no me casará con alguien que no me gusta, tú me gustas eres guapo, tienes novia.

-No, no tengo prometida, debo arreglar unos asuntos primero.

-Entonces podemos dormir en la misma cama, te juro que no te haré nada, que no quieras.

-jaja no juegues con eso, no soy un caballero del todo.

Mariana se levanta del piso, pero todo le da vueltas, intenta llegar a la cama y se cae, Rafael la va a levantarla ella solo tiene puesta una bata que encontró en él baño, el solo una camisa ligera y sus pantalones, dejando ver un poco de su pecho, al levantar a Mariana ella logra tocarlo y no lo suelta

-No hagas eso.

-Si yo quiero puedo hacerlo, está lloviendo y no puedes irte.

Ella lo jala para besarlo y él por un momento corresponde su beso, por se separan él solo ve sus ojos negros, su cabello y sus labios, el sabor del vino en su aliento, así como tenerla cerca hace que su cuerpo reaccione ante ella, Mariana también lo ve, acaricia su cabello y también siente él aliento a vino, su cuerpo también reacciona ante él, lo que causa que ambos vuelvan a juntar sus labios está vez con un beso más apasionado, ella quitando su camisa y él acariciando su cuerpo, solo la bata le impide tocar su piel.

-No, no podemos, no es correcto, tú eres...

-Si lo soy, pero no te pido que te hagas responsable yo quiero.

-Me estás utilizando, 😅😂 eso es nuevo para mí.

-Tú también puedes utilizarme, solo por esta noche, mañana no diré nada, está noche jamás paso y no te molestaré.

-Eso dicen todas, duerme, no pasará nada entre nosotros, eres joven y no sabes las consecuencias de esto.

-Si lo sé, estoy mareada, pero soy consciente de lo que hago.

Mariana sigue, desatando la camisa de Rafael el siente sus manos en su pecho en su espalda, ella vuelve a besarlo y siente que si cordura se pierde.

-Que hago si te arrepientes mañana, por qué estoy a punto de perder la cordura eres muy bonita.

-Solo déjate llevar y no te contengas, tienes mi permiso para hacerme lo que quieras.

-Dios, eres eres...

Rafael la toma entre sus brazos, sigue besando sus labios y termina por quitarle la bata, acaricia cada rincón de su cuerpo, ambos terminan entregándose a la pasión, entre la tormenta esa noche Mariana se siente la mujer más deseada, Rafael hace que tiemble cada parte de su cuerpo, en un inicio duele, pero también logra sentir un gran placer.

En el pueblo, Leonora ni se imagina dónde están esos dos

-Leonora, a dónde mandaste a mi hermana

-Fue a unas casas cerca de la presa, pero llegó un mensaje que la tormenta la sorprendió y se quedara en la cabaña de caza.

-Sola?

-Si, dice que no nos preocupemos.

El mayordomo de Rafael recibe la misma carta y le pide que no diga que él está con la joven para no dañar su reputación, le explica que se la encontró en el camino y no pudo dejarla sola.

-Haaa señor, no puede engañarme, no lo creo capaz de estar con una mujer hermosa y que no pase nada, espero que la doctora no se enamore de él, mi señor no sabe que es amar, o tal vez conozca al amor de su vida.

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