Capitulo 11.

Nos giramos hacia la proveniente voz que estaba detrás de nosotras.

Julius, el joven mago que Alexandro Silva había propuesto como mi tutor, estaba ahora delante de Annie y mio.

Nos daba una mirada de desconfianza mientras se acercaba a paso lento.

--Hablaban de un... ¿Alex?

Trago grueso, nadie podía enterarse de la existencia de el, o que me visitaba. Estaba completamente prohibido que extraños, o familiares hicieran visitas a menos que fuera en vacaciones. Las cuales empezarían en unos días.

--Nosotras no...

--¿Se referían al líder Silva?--Pregunta Julius.

Me apresuro a negar rapidamente.

--No, no hablábamos del líder Silva. Le comentaba a mi amiga sobre... Un conocido de mi familia.

Julius da un suspiro que parece ser de alivio.

--Por un momento pense que el líder Silva la acosaba, señorita Vermillion.

--Oh no, para nada haha.

Los tres nos reímos incomodamente por un momento, Julius se disculpa y termina desapareciendo entre los pasillos.

--Estuvo cerca...

(...)

--La siguiente actividad será en grupos, señorita Vermillion, conmigo.

Después de dar por terminada mi conversación con Annie vine a las actividades del clud.

Hay cosas que no se pueden evitar, pero es mejor si no nos toman tanto tiempo.

Tomó asiento junto a Alexandro, mientras que este mueve el libro que está sobre la mesa para tener buena visión los dos.

Como líder es el encargado de escoger con que personas trabajaras, pero era lo suficientemente justo como para turnar a todos con todos, este día me tocó con el.

--¿Me responderá?-- Alexandro aparta la vista del libro.

--¿Sobre que?-- Respondo.

--El cuento que le recomendé, ¿Qué le pareció?

Apartó la vista de los relatos y me fijo en las grandes estanterías.

--Interesante, sólo tengo esa palabra para describirlo.-- Concluyó.

--Usted tiene muy pocas palabras

cuando se trata de mi.

Alexandro me mira fijamente durante un momento.

Rápidamente vuelvo mi vista hacia el libro.

--Concentre en la actividad, líder Silva.

Durante el resto de hora compartimos diferentes opiniones entre todos, integrarme con este grupo de personas no fue realmente difícil. Aún asi me gustaría que Annie estuviera aquí.

Continuó con mis clases hasta que se hace tarde, al volver a la habitación mi compañera no está en su cama, tomó un baño y cuando regresó al cuarto me sorprende encontrar un sobre en mi cómoda.

Tomó lo que supongo es un carta y la abro rapidamente.

Espero verla pronto, una semana, árbol del mundo, cuando el sol se oculte.

^^^Alex.^^^

Leo la carta una y otra vez, después de meses sin ninguna interacción con el, por fin tengo noticias.

Al llegar Annie le muestro la nota, la lee igual de emocionada que yo.

--¿Porqué en el árbol del mundo? ¿No es peligroso si lo ven dentro de la Academia?

El árbol del mundo es, como su nombre lo indica, un árbol y al mismo tiempo el más grande que ha existido según la historia del imperio. Su tronco cincuenta veces más grande que el de uno normal. Sus grandes ramas cubiertas de hojas cubren gran parte de la Academia llenando la de sombra.

Pero lo que hace que sea interesante no es su gran tamaño, el árbol del mundo se dice fue la primer semilla que crecio en esta tierra, y aparte de eso está completamente lleno de maná.

No me he acercado a su tronco desde que entre a la Academia, pero he observado sus exorbitantes ramas y sentir la energía mágica que viaja a través de ellas.

--En el anochecer no hay nadie...

--Pero hay guardias en los pasillos, es peligroso si sales del toque de queda, sera un problema si te descrubren.-- Me recuerda Annie.

--Iré, si Alex quiere que lo vea en ese lugar debe tener un motivo. No me arriesgaria por nada.

Annie se resigna, termino de hacer mi tarea para luego ir a la cama.

(...)

(...)

(...)

--¡Leo!

Corro hacia mi hermano que me espera con los brazos abiertos, me recibe con una gran sonrisa.

--Te extrañe, Historia.

--Yo a ti mucho más, hermano.

De camino al centro de la capital le cuento a Leo los acontecimientos en estos meses de estudio, exceptuando a Alex.

Me comenta lo que ha pasado en el Ducado. Nuestros padres viajarán mañana a la capital para quedarse conmigo durante los cuatro días de vacaciones que nos dieron.

Bajamos del carruaje y nos dirigimos a una cafeteria, a petición mía Leo acepto acompañarme, ese lugar era uno de los más mencionados en la novela y donde Ive llevaba a Zahara en sus citas.

Saludamos a unos cuantos nobles que suponía eran conocidos, al ver la cafetería me separe de Leonard por correr un poco rápido.

Cuando quise abrir la puerta del local, otra mano se posó sobre la mía que ya estaba en la perilla.

Junto a mi estaba una mujer con el porte más elegante y una belleza como ninguna otra.

Ella también me miraba, la admire solo por unos segundos cuando fui apartada bruscamente. Mi visión fue cubierta por una figura alta, el cuerpo de mi hermano me monopolizava de la vista de la mujer.

--Leonard Vermillion...-- Pude escuchar una risa proveniente de ella.

Mi hermano me tomó de la mano y entro a la cafetería casi atropellando a la mujer.

Tomamos una mesa y ordene rapidamente, mi hermano se tenso en su silla cuando la chica paso junto a nosotros y tomó asiento en la mesa que estaba a a mi derecha.

Si Leo estaba incómodo o molesto en menos de cinco minutos se puso peor, Alexandro Silva entro al local y tomó asiento junto a la mujer.

Charlaban alegremente mientras que Leonard arqueaba una ceja o ponía los ojos en blanco cada cinco segundos.

--Hermano... La mujer...

--La bruja de los Silva.

--¿B-Bruja?

--¿No reconoces a la hija mayor de la casa Silva?

Deje a un lado mi bebida por un momento.

Hija mayor de la casa Silva.

Sólo conozco una.

Iris Silva, hermana mayor de Alexandro.

Y también la Némesis de Leonard.

--¿Desde cuando Alexandro Silva es tan pequeño?

Ignoro completamente a mi hermano, miro disimuladamente a la mujer.

Ella sonrie calidamente a su hermano, pero dicha sonrisa desaparece cuando visualiza a Leonard.

Y el no duda en corresponderle.

Puedo sentir la tensión entre ellos y el como se insultan atraves de sus miradas.

Mi mirada viaja a Alexandro que al notarme me da una sonrisa.

Rápidamente pongo mi mano en mi rostro tratando de cubrirme, no quiero alarmar más a Leonard y que piense que soy cercana a los Silva.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***