Lo mato.

Damián.

He buscado por cielo, mar y tierra, a mi gotita de amor han pasado cinco meses desde la última vez que la vi, no les he contado a mis padres por qué quiero entregárselas en sus manos, a mí se me perdió y dos malditas veces soy un inepto, como la perdí dos veces soy un idiota, tengo a mi gente revisando a Roma de punta a punta dónde estará mi niña.

Estos días he estado un poco desubicado, no he tenido cabeza para los negocios, se avecina algo grande y yo ando fuera de foco, nos descansaré hasta que la encuentre,

Tengo a varios hombres preguntando en cada lugar, casa, negocio, debo encontrarla, esto me tiene mal, gracias a esto no he podido rendir al cien porciento.

Recibo un mensaje de mi infiltrado y Chanchi junto con Ferrete quieren la cabeza de mi gotita, primero hago barbacoa con esos desgraciados que les hizo mi chiquita, los voy a Matar.

Hago un par de llamadas mientras estoy en mi despacho, debo trabajar, mis hombres buscaran a mi gotita.

Sigo concentrado en mi trabajo y me tocan mi puerta.

Damián: Adelante.

Sirvienta: disculpa, señor, pero el señor Richard lo busca.

Damián: Dígale que pase por favor.

Por la puerta de mi despacho entra Richard, un socio conocido por la familia, nos saludamos y empezamos a hablar de negocios de varias exportaciones y de un cargamento que fue robado, aunque se recuperó, los responsables están escondidos como estás.

Richard; Bueno Damián, también debemos ver lo de la reunión con los grandes, hay que estar muy alertas, ya he mandado a mi familia a nuestra otra mansión, ya que sabes que son a los primeros que atacan, a nuestro punto más vulnerable, ¿ya tomaste medidas? Aunque a tu madre la cuida tu papá, menos mal no tienes a quien más cuidar.

Dice Richard y pienso en mi pequeña, a lo mejor y es bueno que no aparezca todavía, así estará a salvo.

Richard: El que sí la tiene difícil es Dominick.

Damián; Si lo dices por sus hermanos están más que protegidos, sabes cómo es.

Richard: No lo digo por él, lo digo por una pequeña que tiene en su casa.

Dice este y mis alertas se encienden.

Damián: De qué pequeña estás hablando Richard.

Digo algo ansioso a lo que esté, toma un poco de whisky y habla.

Richard: Hace algún tiempo fuimos a la mansión de Dominick y subí a buscar un baño y me perdí, pero de repente escuché una risa muy bonita.

Me acomodo para escuchar bien a Richard y me tomo mi whisky de un trago esperando su relato.

Richard: abrí la puerta y Vi a un ángel, la cosita más bonita que pudiesen haber visto mis ojos, pensé que era hermana de él, pero no es su novia, según averigüé.

Damián: ¿Novia dices? Dominick no es de novias, como se llama, no lo sabes.

Richard: esa pequeña le hace honor a su nombre, es un ángel, se llama Ángela.

Me levanto de golpe y golpeó la mesa de la rabia, me engaño, me vio la cara.

Damián: Maldito bastardo, ahora mismo iré por mi niña...

Richard: Tú también caíste ante el ángel, pues te informo que también me interesa y mucho.

Me sobresalto y lo agarro por la camisa mientras lo levanto.

Damián: No, tú no nadie es digno de mi niña, te quiero de ella.

Dije para salir de allí, organice un grupo de hombres y me dispuse a irme, pero mi teléfono sonó, quien Demonios me llama carajo.

Contesté y era mi padre quien me necesitaba en New York lo más rápido posible, el rescate de mi niña debía esperar, fui con mi padre y luego me dirigí hacia el hangar donde abordé mi jet y me dirigí a resolver el problema que me dijo mi padre, pero juro con mi vida que le romperé la cara a ese bastardo y recuperaré a mi ángel.

Llegó al lugar donde de solucionar el problema y el problema es una rata traicionera que nos robó.

El bastardo está amarrado y ya sé con quién pagaré toda la rabia que tengo.

Damián: Dime asqueroso, dime quién te mando.

El imbécil se niega a habla, pero voy sacando sus uñas poco a poco con unas pinzas, sus gritos estremecen el lugar.

Damián: Te vuelvo a preguntar maldito, para quien Demonios trabajas.

La rata asquerosa me dijo que no hablaría, que no diría una palabra.

Sonreí de manera macabra, y le hice una consulta dental, poco a poco sus dientes salían y su dolor era descomunal.

Hombre: Basta, basta, por favor hablaré.

El desgraciado cantó y además tiene información sobre un secuestro que planea Bianchi y Ferreti, en contra de Dominick al parecer tienen un infiltrado en casa de él, debo avisarle cuánto antes o matarán a mi chiquita.

Salgo como demonio de allí y tomo mi celular, pero por más que llamo a Dominick no contesta, maldición llamo a su casa y me lo niegan no puedo dejar recado por qué no se puede confiar en nadie, llamo a mi padre y le digo que en la reunión de mañana hablamos tomo término de hacer algunos negocios allí y en la madrugada salgo para Italia, son horas de vuelo que aprovecho para pensar que la voy a ver qué la voy a abrazar mi chiquita mi gotita de amor, juro que seré su sombra y nadie la volverá a dañar

Aterrizamos en Italia y bajé del avión directo a las camionetas blindadas.

Adrián chófer: Hacia donde señor.

Damián: A la casa de Dominick.

Veinte minutos después llegó a la mansión y los guardias me dejan pasar, pues, me conocen, pensé que me prohibirían el paso.

Bajo de la camioneta y está mi pequeña abrazada a ese maldito y lo está besando, lo voy a asesinar mal nacido hijo de puta.

Ella voltea y se sorprende, está hermosa, tiene un vestido floreado muy lindo y su hermoso cabello suelto, ella se suelta de los brazos de Dominick y corre hacia mí y se prende de mi cuello, le doy muchas vueltas y le lleno sus cachetitos de besos, Dominick viene como un demonio hacia mí y mientras ella tiene su carita en mi espalda, le hago señas a Dominick para que no haga nada que espante a mi Ángel. Él entiende y se calma.

Ángela; Damián te extrañé mucho como te fue encontraste a tu amor.

Dice mi niña con su carita tierna y dulce.

Damián: Si pequeña encontré al gran amor de mi vida.

Le digo con una enorme sonrisa a mi ángel hasta que ella vuelve, ha hablar.

Ángela: Yo también, mira, te presento al amor de mi vida, él se llama Dominick y lo amo mucho, verdad osito.

Dominick le asiente y le sonríe todo embobado.

Lo mato, ahora sí lo voy a matar.

Damián: Ya conozco a este hombre mi pequeña, ahora cuéntame como está tu osito pochito y tu oso Dami.

Ángela: lo siento Damián, pero unos ladrones se lo robaron cierto amor solo a él a pochito no ni a Dom el oso que me regaló mi amor.

Miro a Dominick con mi mejor cara de odio y le digo a ella.

Damián: Oh, qué conveniente, no hermano.

Dije haciendo énfasis en la última palabra, le pedí a gotita de amor que fuera a su cuarto a jugar, que yo iría después de venir de la reunión y hablaría con ella, mi niña me abrazó, beso a Dominick y se fue, pero cuando me iba a acercar a él se devolvió corriendo, lo volvió a besar y le dijo.

Ángela:te amo mucho, no tardes.

Le hizo un hermoso puchero y se fue, cuando estuvimos solos me acerque y le parto la cara, le grité que era un maldito mentiroso, él me devolvió los golpes, y me decía que dejara en paz a su bebé que era de él.

Tuvieron que separarnos y como la reunión ya iba a empezar decidimos irnos, luego arreglaríamos cuentas...

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