Días después y todos trabajan en un mismo ambiente, los niños disfrutaban de ver a su madre y tía muy seguida, en casi una semana solo viajaron dos veces y a lugares muy cercas.
Matilda seguía sin perdonar a Frederick, aunque él insistiera en que jamás la usaría, que había renunciado a todo por ella, seguía sintiendo rabia por su madre, como lo aceptaba después de ver que no era del agrado de esa mujer, pensaba en su futuro y el ambiente que tendrían sus hijos por ella o en su matrimonio tener que ver a esa chica solo porque la señora la quiere como si hija, su hermano no tocaba ese tema, su abuela le pidió que la dejara que sea ella quien decida que hacer sobre su relación, aunque ya el chico no le quedaba paciencia, necesitaba hacer algo rápido para obtener de ella y el perdón que tanto quería.
_Pueden ir a casa, señoritas, no viajaré por los momentos._
Hablo Matteo a las chicas.
_Muchas gracias, señor, permiso._
Roberta salió a toda marcha, dejando a Andrómeda sola con él, ambos se dieron una mirada de pocos segundos.
_Que tenga feliz día, Señor O... Santos._
Matteo sonrió y se acercó a ella.
_Me sigues diciendo Ogro y te castigo..._
Andrómeda no demostró miedo, todo lo contrario sonrió a solo centímetros de su cara.
_No estaría mal saber que tanto puede hacer el ogro._
La tomo por el cuello y se acercó lentamente a sus labios, aunque ella también hizo lo mismo para acercarse más y besarlo, un beso que se salía de control, que despertó lo que Andrómeda tenía meses sin encender, sus manos ya viajaban a sus ropas para quitarlas, pero el sonido del celular de Matteo los interrumpió.
_Ya entendí que es mejor no despertar el Ogro, no volverá a pasar._
Andrómeda arregló su ropa rápida y salió, caliente como una sopa recién echa, pero arrepentida por pasarse con su jefe, sabía que no era correcto.
Buscaba a Roberta como loca, aunque al verla con Arturo se detuvo, sabía las ganas que le tenía a ese hombre, así que mejor se fue a casa a esperarla.
_Tienes algo en el cabello._
_Gracias, tú tienes algo en la mejilla._
Arturo se acercó a Roberta pasando su mano por el cabello, actuando romántico, ella muy descarada se acercó y beso su mejilla derecha muy cerca de los labios, dejándolo sorprendido, pensó ser coqueto, pero ella le ganaba en esas cosas.
_¿Te invito un café?_
_Mejor una copa._
Respondió Roberta con una sonrisa, saco una tarjeta de su bolsillo y se la dio.
_Te espero a las ocho._
Le guiñó el ojo y se fue, dejando a un Arturo muy contento, quien no perdió tiempo en ir a contarle a su amigo, aunque sabía que no estaba de acuerdo en ligar con los empleados.
Roberta salió y se encontró con Frederick observando a Matilda con una cara de enamorado, se acercó a él y sonrió por la maldad que se le atravesó en mente.
_Por qué no dejas ese hombre tierno a un lado y sacas el animal que tienes dentro, la subes a tu hombro, la llevas a un hotel y le enseñas lo mucho que la amas a las malas, créeme, puede que le guste y te perdone rápido._
Frederick se quedó viendo a Roberta como si de una broma se tratara, pero al verla sería, se dio cuenta de que hablaba en serio, ella se fue dejándolo ahí pensando en si ese plan le podía funcionar, recordando las veces que él usaba métodos sexuales duros y a ella le gustaba, justo estaba por hacer lo que Roberta le dijo, cuando apareció Matteo.
_Frederick, lleva a Matilda a casa de las chicas, voy a necesitar el auto que ella carga._
Matteo se fue sin decir nada más, haciendo que él sonriera feliz, lo mejor que le pudo pasar, se encargaría de llevarla a un lugar donde estarían sin interrupciones.
_Señorita, su hermano me pidió llevarla, tomo su auto..._
Matilda lo ignoro y se subió donde Fred la llevaría, él la observaba por el espejo una y otra vez, mientras ella solo veía su teléfono, estaba tan concentrada, que no se dio cuenta de que iban por otro camino, uno directo a un hotel.
_Llegamos._
Matilda se bajó y frunció el ceño, volteo donde él y luego al frente.
_Esta no es la cosa de las chicas._
_No, será nuestra casa hoy o hasta que entiendas y creas en lo que te digo._
Matilda se burló y fue por un taxi, pero Fred la subió a su espalda antes que ella llegará a levantar su mano, con los gritos de ella llegó a la recepción, para no pasar la pena por ser un Santos, ocultó su cara en la espalda de él, pidió una habitación y la tiro a la cama.
_Que te pasa Rick, no es juego lo que haces._
_No estoy jugando Matilda, de aquí no sales hasta que entiendas que te amo con mi corazón._
Se subió sobre ella y ato sus manos, abrió sus piernas haciendo lo mismo, Matilda repetía muchas veces que la soltara, pero Frederick no le hacía caso, entró al baño y luego busco en la mini nevera hielos.
_Estoy muy molesta Winslow._
Matilda fue ignorada, mientras el rompía toda su ropa hasta quedar en ropa interior, en ese momento Matilda sintió u escalofrío por todo su cuerpo, no sabía si era por miedo o por excitación, nunca había visto a Frederick así, en un estado de seriedad, de concentración, de perverso, se desvistió frente a ella, se acercó y con un hielo, lo paso sobre el cuerpo de Mati desde donde divide sus senos, hasta casi llegar a su intimidad, haciendo que ella apretara sus labios para no gemir.
Dejo el hielo a un lado y opto por él besar ese cuerpo que a él le encantaba, quitó lo poco que le quedaba y solo se enfocó en el, con sus piernas abiertas pasó su dedo por su intimidad, sacando un gemido de ella y gruñidos de él, introdujo uno y otro, hasta escuchar su voz ronca en suplicos que entrara en Ella.
_No, si aún sigues molesta._
_Aaah, P.or fa.vor._
Sus piernas temblaban y su intimidad dolía de deseo, Fred la desató y cumplió su petición, sus unas arañaban la espalda de él, sus gemidos y gruñidos se escuchaban en toda la habitación, hasta quedar sin energía, Fred abrazo a Mati y ninguno hablo hasta quedar dormidos.
Un par de horas después, el celular de Fred sonaba repetidas veces, Mati se hizo la dormida, mientras que Fred se levantó con cuidado, fue al baño para devolver la llamada.
📲_¿Tan ocupado estabas? Cuándo piensas regresar?
Hablo la madre de Fred molesta.
📲_ Yo no pienso regresar, no sin mi novia._
📲_ Piensa bien las cosas..._
📲_ No tengo nada que pensar, amo a Matilda Santos y ella es la mujer que quiero para esposa, renuncie todo por ella, ya no me llames si es para tus locuras._
Fred corto la llamada y se quedó un momento pensando, Matilda había escuchado todo lo que él había dicho y se sintió aliviada de que la amara, pero culpable de que renunciará a todo por ella.
Se quedó acostada hasta que el regreso con ella, al sentirlo ella se dio vuelta para abrazarlo, Fred sonrió y beso su frente.
_Mati..._
_Te amo... Duerme._
Hablo Mati con sus ojos cerrados.
_No quiero._
Besando su cuello y tocando su cuerpo para completar una reconciliación, mientras que Roberta no estaba feliz de recibir un mensaje de Arturo para decirle que no podrían verse, por asuntos de trabajo.
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Updated 43 Episodes
Comments
Marysim R de Monasterios 🇻🇪
HECHA😜🇻🇪
2025-03-05
0
LULÚ y BETY Cardozo
amo a Matilda y fred amor del bueno y único
2024-03-18
10
Yanet Cristina Vilugron Salazar
Ese es amor del bueno 😍😍😍
2024-01-30
7