Capitulo 9

"¿A quien más aparte de los tres le dijiste acerca de esto?", suspiró avergonzado Alan.

"Bueno, llamé a la señora de inmediato y ella estaba feliz y también me dijo que quería que compensara a la misterio dama que curó a su hijo con una cantidad considerable. Así que coloqué el dinero en la mesita de noche, y por lo visto ya no está, supongo que se lo llevó sin dudar", concluyó Sam.

Sentado en la cama con tantos pensamientos complicados, Alan no pudo digerir todo lo que escuchó. En un instante, destellos de labios rosados, piel de leche y cuerpo suave se precipitaron en su mente. Su cabeza palpitaba de dolor

Al examinar su reacción Yoseth, pudo ver que le dolía la cabeza, así que le dio agua y la medicina para la resaca.

Alan trago la medicina y murmuró: "Pensé que era un sueño. Me acosté con alguien que no conozco y se fue así como si nada"

Alan frunció el ceño nuevamente y murmuró etsa vez para si mismo, "Es la segunda vez que sucede lo mismo"

Palmeando su hombro, Yoseth dijo en broma: "Bueno, la buena noticia es que tú, mi amigo, ya has tenido s6xo. Bienvenido al club. Oh, deberíamos celebrarlo"

"Llamaré al resto para que se preparen para celebrar este día tan importante", bromeó también Diego.

"No es divertido ésto", se quejó Alam.

"Alan, solo queríamos subirte los ánimos", refutó Yoseth.

Mientras los tres amigos hablaban Sam recibió una llamada, una llamada de la Madre de Alan.

"Si ya despertó Señora"

Todos en la habitación se quedaron en silencio, al mismo tiempo la cara de Sam se tornó rígido y dijo, "Si señora se lo haré saber, iremos más tarde"

Después de colgar, Sam miro preocupado a Alan.

"¿Que te dijo mi Madre"

"La señora dijo que deberías venir a casa con la dama para poder presentársela", dijo Sam.

"Tonterías, no tengo la cabeza ahora para presentaciones, Ahora estoy cansado, necesito descansar"

"Pero la Señora"

"No te preocupes por ella, así que Sam borra mi agenda para hoy, incluido las reuniones, posponlas todas y busca a la mujer con la que pasé la noche ayer", ordenó Alan.

"En todo caso yo también debo irme, hasta luego, Alan. Tengo una cirugía hoy, Diego por favor, descansa un poco también". Yoseth dijo y se fue a su habitación para prepararse para ir directamente al hospital.

Yoseth está acargo de la cirugía que se necesita hacer hoy a la madre de Verónica. Entonces, después de enviar por su ropa, fue a refrescarse y ordenó el desayuno. Después de un tiempo, salió del hotel.

Unas horas después

Yoseth que estaba revisando el resultado de la prueba de un paciente atentamente es interrumpido cuando alguien llamó a su puerta.

"Adelante", dijo sin apartar los ojos del documento que estaba sosteniendo.

"Doctor, alguien está aquí para verlo", informó la enfermera.

"¿La persona tiene una cita?" Preguntó aún leyendo el informe en sus manos.

"No, pero me dijo que le informara que ella tiene el dinero para la operación de su mamá”, respondió la enfermera.

"Hágala pasar", ordeno Yoseth. Después de que la enfermera se fue, entró Verónica.

"Buenas tardes, doctor", Verónica saludó cortésmente.

Ahora, levantando la vista de lo que estaba haciendo, Y asintió en respuesta.

"Buenas tardes... Por favor tome asiento".

Caminando hacia la silla frente a él, Veronica se sentó.

"Pagué la cirugía de mi madre y quería saber cuándo se realizará la cirugía", expresó su propósito de llegar a su oficina. No quería perder el tiempo innecesariamente, ya que también podía ver que él estaba ocupado.

"Esa es una buena noticia. Informaré al hospital para que se puedan hacer los arreglos de inmediato para que podamos comenzar de inmediato, si está de acuerdo, por supuesto", dijo Yoseth mirando a Verónica

"Sí, muchas gracias", Veronica estuvo de acuerdo.

"Está bien, déjame informarle al director. Puedes esperar en la sala de tu madre hasta que vengan algunas enfermeras a llevar a tu madre al quirófano. No tomará tiempo".

Poniéndose de pie, Veronica nuevamente agradeció con una gran sonrisa, "Gracias doctor".

De alguna manera esa hermosa sonrisa en el rostro de Verónica, dejo atónito a Yoseth, era un tipo de sentimiento que no puede describir ahora.

"Ujum... bueno ya puede irse"

"Si, ya no lo molestaré", Verónica dijo y salió.

Yoseth por otro lado, llamó inmediatamente al director para informarle sobre la cirugía y les pidió que hicieran los arreglos necesarios para la cirugía.

Caminando de un lado a otro en la habitación del hospital, Veronica esperaba pacientemente a las enfermeras como le había dicho Yoseth. Se estaba poniendo nerviosa a medida que pasaba cada segundo. ¿Su madre estará mejor después de la cirugía? ¿Cuántos años vivirá ella?

Las preguntas seguían plagando su mente y estaba empezando a sentirse asustada.

"Oye, ¿no te sientes mareada al caminar así? Me estás mareando a mi". Una vocecita dulce sacó a Verónica de sus pensamiento.

Girando hacia el otro lado, Verónica vio que era el niño con el que compartían la habitación. Era la primera vez que escuchaba hablar al niño.

Sonriendo débilmente, Verónica se disculpó: "Lo siento. Solo estoy preocupado por mi madre".

"¿Tu mamá no está recibiendo un trato como yo?" La niña preguntó dulcemente. Ella tenía curiosidad. Si la señora había estado en este hospital durante tres días, entonces no se suponía que eso significaba que estaba recibiendo tratamiento y no podía irse a casa.

"Sí, lo es, pero ya ves que es diferente", trató de explicar Verónica al niño.

"¿Cómo?" Otra pregunta curiosa fue lanzada por el niño.

"A mi mamá la van a operar en unos minutos y bueno, estoy un poco asustada", dijo temblando.

Mirando Verónica hablaba por un momento, el niño dio unas palmaditas en su cama, invitándola a sentarse. Veronica se sentó a nerviosa cerca de el.

Estirando las manos, el niño dijo: "Mi nombre es Liam. No te preocupes, tu mamá estará bien, este hospital es el mejor de la ciudad, además el apuesto doctor es amigo mío, si quieres te lo presento", aseguró Liam.

Mirando curiosa a Liam, Verónica preguntó: "¿Y quién es este apuesto doctor del que estás hablando?"

"El que vino a ver a tu mamá cuando fue admitida. También fue el que trató al fuerte Liam ya me estoy volviendo más fuerte, es como mi hermano mayor", dijo Liam.

"Oh, ¿te refieres al doctor Gallagher?" Veronica pregunto para asegurarse de saber a quién se refería el niño.

"Sí, el Doctor Yoseth", dijo Liam señalando hacia la puerta.

Yoseth que acababa de entrar miro a ambas personas en la cama con nerviosismo, cuando escuchó por la puerta qué estaban hablando de él no pudo entrar de inmediato.

Ya que él era su tema de discusión

Verónica siguió el dedo señalador de Liam y vio al Yoseth en la puerta. Verlo ahora con su uniforme de cirugía la puso más nerviosa.

"Doctor Yoseth, ¿cómo está? ¿Dónde has estado? Ni siquiera te molestaste en ver cómo estaba tu pequeño paciente esta mañana. Liam está muy decepcionada con el hermano mayor", le preguntó Liam a Yoseth con ojos de cachorro.

Yoseth había estado a cargo del tratamiento de Liam durante tres años más y podía decir que Liam es un niño inteligente, dulce, alegre y muy curioso. Siempre pasa a verlo cada vez que iba al hospital y, a veces, le traía su dulce favorito.

"Lo siento Campeón. El hermano mayor estaba un poco ocupado y tenía un fuerte dolor de cabeza esta mañana. Te compraré un dulce si me perdonas", trató de salir del apuro.

"Oye, eso es sobornar y es muy, muy malo, pero lo aceptaré por esta vez"

"Gracias por tu comprensión, Liam", dijo Yoseth.

Verónica olvidó el mal momento y se rió entre dientes ante esta peculiar escena.

Pronto entraron tres enfermeras con una camilla y sacaron a la Madre de Verón de la habitación.

"Doctor Gallagher, lo estaremos esperando", le recordó una de las enfermeras.

"Si en breve voy", fue la respuesta de Yoseth.

Mirando a Liam, Yoseth dijo: "Liam, tengo una cirugía ahora, volveré más tarde con tus dulces favorito, ¿de acuerdo?"

"Está bien. Asegúrate de tratarla bien, si no, esta linda hermana llorará mucho como otros días", dijo Liam hablando de Verónica, quien había seguido a las enfermeras hacia el quirófano.

Caminando hacia la puerta, Yoseth dijo: "Haré lo mejor que pueda. Ahora descansa bien".

"Está bien. Adiós", saludó Liam.

"Adiós", le devolvió el saludo antes de cerrar la puerta.

*******

Afuera del quirófano, Yoseth le aseguró a Verónica que haría todo lo posible para asegurarse de que la cirugía saliera bien antes de entrar al quirófano para comenzar la operación.

"Está bien, comencemos", dijo tan pronto como entró en la habitación. Todo listo, comenzaron los médicos y enfermeras.

Veronica esperó tres horas impaciente afuera del quirófano, estaba tan preocupada por su Madre que no podía estar tranquila.

Solo cuando Yoseth salió del Quirófano, Verónica se calmó.

"Todo salió bien con la operación", informo Yoseth.

"Muchas gracias por todo, doctor", Verónica agradeció, ahora estaba tan aliviada que lo único que quería era ver a su Madre.

"Señorita Verónica", Yoseth la llamó

"¿Sí doctor?"

"Deberías dejar de llorar y descansar un poco. Te ves terrible, si no quieres asustar a tu madre con esos ojos rojos saltones con bolsas debajo" le aconsejó Yoseth

Verónica miro a Yoseth desconcertada, como es que él supo que ella ha llorado mucho últimamente.

"Liam me dijo que lloras mucho", respondió a sus pensamientos. Asintiendo con comprensión, Verónica le agradeció una vez más y se fue.

Tomando respiraciones profundas, Yoseth cerró los ojos por un momento y después de una breve meditación, marcó un número.

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