capitulo 5: “padre eh hija"

La tarde del día estaba cayendo, Emma que veía el atardecer desde su habitación, no dejaba de pregúntese muchas cosas.

“aunque estoy dispuesta a ser diferente, jamás pensé que él lo haría también. ¿O será que volver en el tiempo afectó algunas cosas?... Argh, esto es un dolor de cabeza..."

— calma Emma, solo tienes que seguir hasta ser mayor de edad eh irte.

— ¿Con quién estás hablando?— preguntó Ania detrás de la albina.

— A-Ania... ¡No me asustes así!

— últimamente estás extraña...— Ania había entrado a la habitación con una charola de té. Ella se va y sirve un poco a la joven— es tu favorito, té de jengibre con miel.

— gracias...

La criada veía con mucha curiosidad hacia la albina. Así que le pregunta.

— ¿Me dirás lo que tanto te preocupas?

— Ania... Mi padre, él quiere pasar tiempo conmigo. Pero me resulta algo difícil de creer.

— ¿Eh?... ¿Por qué?... Si siempre quisiste que tú padre te diera afecto.

Emma deja la taza y se voltea para seguir viendo el panorama.

“si, eso era lo que siempre deseaba de él, pero desde que he pasado por tanto dolor, se me hace imposible crear un lazo con él. Tal vez tenga el cuerpo de una niña, pero mis pensamientos son otros..."

La albina abre los ojos en par cuando siente que alguien la abraza por detrás. Era Ania tratando de darle consuelo.

— ¿Ania?

— no se porque estás sufriendo tanto, aunque tú padre es muy distante contigo, no ha sido malo, pero creo que él se dio cuenta del grave error que estaba cometiendo en alejarte que quería compensarte. ¿Podrías darle una oportunidad?

Emma se había quedado callada antes las palabras de ella, sin embargo, la albina le da como la razón a Ania, tal vez él se dio cuenta y quiere repararlo, pero... ¿Por qué ahora?... ¿Por qué no fue así en su primera vida? Aún así, Emma podría hacer eso, dale un chance para conocer realmente a su padre.

Horas después pasan, la noche llega y con ello el duque. Al parecer él había terminado de hablar con Isaac sobre algo muy importante pero que para ambos será algo confidencial hasta el momento.

En la entrada, el sirvienta abre la puerta y Alessandro entra con total seriedad, sin embargo, se queda un poco sorprendido al ver a su hija sentada en un escalón de las escaleras.

— Emma... ¿Que haces despierta?

— padre, creo que no es consciente de que es muy temprano para que un niño se vaya a dormir.

— deberías, los niños que duermen más crecen, pero si te quieres quedar enana no te detendré...— Alessandro recapacita sus palabras y dice nuevamente— ve a dormir, Emma, mañana tenemos mucho que practicar...

— ¿Aún estás dispuesto en enseñarme?

— yo nunca rompo mis promesas... Así que sí, lo haré...— Alessandro ve el rostro de Emma y se le ocurre una idea— te ofrezco un trato, sí aprendes a usar la magia, te daré un premio... ¿Te parece mejor la idea?— Alessandro alza su mano en dirección a ella.

Muy sorprendida quedó Emma al oír tales palabras, su padre jamás intentaría darle un premio, pero recuerda las palabras de Ania, así que ve el lado positivo, y con una pequeña sonrisa le responde.

— suena como si estuvieras educando a un perro, padre... Esta bien acepto...— la niña sube su mano y en el momento de que toma la de su padre, este dice igual con una sonrisa.

— no eres un perro, Emma... Eres mi hija.

— ya en serio, ve a dormir...— declaró él.

— no puedo, aún no he cenado...

“realmente no he tenido hambre, y ahora, esto me deja confundida, aún así, trataré de llevarlo de la mejor manera"

— entonces, espérame en el comedor.

— ¿Eh?... ¿Quieres que coma con usted?

— no lo volveré a decir. Me daré un baño y bajaré rápido.

— d-de acuerdo...

Al rato después, Emma esperaba en el comedor, aún intrigada por el cambio de su padre. Cuando él llega, la niña se endereza sobre su asiento, ella se encontraba muy alejada de Alessandro.

— siéntate más cerca, Emma.

“no es nada, me dije mi misma que le daría una oportunidad para conocer a mi padre... Pero sigue resultandome extraño"

Una vez que la niña estaba casi al lado de su padre, los sirvientes comienza a traer la comida. Cuando llega el plato de Emma, ella queda con la boca abierta.

— pa- pa padre... ¡Esto es demasiado!

— tonterías, noté que estás demasiado delgada, necesito que comas, la magia consumen mucha energía...

— es demasiado, no creo poder comer todo...

— solo come hasta que te sientas llena, no estás obligada a dejar el plato vacío.

Sin más palabras en la mesa, ambos comienza a comer. Luego de un rato, Alessandro había pedido un vino para pasar su comida. Cuando ve que Emma había acabado con todo, éste le pregunta entre risa...

— ¿No que no podías?

— supongo que el sabor era muy delicioso... No me di cuenta hasta cuando ya habia acabado...— sin querer, Emma eructa, rápidamente se tapa con la servilleta — lo siento, no fue mi intención... Supongo que me iré a dormir. Buenas noches, padre.

Alessandro mira marchar a Emma, y en un susurro casi imposible de escuchar, este dice...

— buenas noches... Emma.

Este, es quizás un nuevo inicio para ambos, por diversas razones los dos están dispuestos a cambiar, así que su destino sera muy diferente al que estaba prescrito.

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