Capítulo 6: Adiós

Espere mucho tiempo a que Lady Mary terminará sus asuntos, ni me moví de mi silla para no desconcentrarla, pero mis esfuerzos se vieron perdidos cuando alguien toco la puerta y entro sin esperar que le dieran el visto bueno, era esa mujer parecía furiosa, me pare rápidamente y me puse a la defensiva; esta comencé a gritas,

- ¡Es verdad! ¡Vas a quitarme al Señor Cheng, para dárselo a esta niña!

Lady Mary también se alteró; y comenzó a decir,

- ¡El señor Cheng me pidió una chica nueva! ¡Parece que se aburrió de ti!

- ¡¿Qué se aburrió de mí?! No será que tú les ofreciste una virgen y por eso él me dejo.

Me alejé lentamente de la mesa, esas dos mujeres pareciera que en cualquier momento se irían a los golpes, sus miradas furiosas y sus gestos no denotaba nada bueno, comencé a pensar como salir de la habitación sin que se dieran cuenta, pero cuando di un paso en falso, la mirada de Emma se posó en mí, ella se acercó a mí y puso su mano dejada de mi barbilla y atrajo mi cara hacia ella, no me resistí, ya que sería provocarla y demostrarle que le tenía miedo, solo puse mi expresión fría y la dejé continuar, cuando tenía mi cara muy cerca de la de ella me dijo,

- Niña, desde que te vi, lo sube, serías un problema para mí, lo que no esperaba era que tan pronto Mary aproveche para usarte en mi contra, no seas demasiado feliz todavía.

Le dio otra mirada a Lady Mary mientras todavía sostenía mi barbilla, por último me dio una mira, soltó mi cara, dio media vuelta y se fue cerrando la puerta de un golpe, miré a Lady Mary y me di cuanta que una pequeña sonrisa de victoria se asomaba a sus labios, al parecer era verdad lo que Emma dijo, ella me estaba usando para darle pelea, pero si ese es el caso tampoco ahí mucho que yo pueda hacer, a final de cuentas mi vida depende de esta mujer, así que si ella quiere que yo sea su arma, seré el más afilado cuchillo,

- Es hora de irnos, dijo Lady Mary, estas palabras me sacaron de mis pensamientos.

Ella tomó su pequeño bolso y se dirigió a la puerta, la abrió y lo la seguí, pasamos por el salón hacia la puerta principal al salir estaba en auto esperando, el chófer estaba dentro y el hombre que nos acompañó ayer estaba esperando fuera, cuando nos vio, procedió abrirnos la puerta detrás, Lady Mary entró y yo le seguí, la puerta del auto fue cerrada por el hombre, y luego él subió en el accidente del copiloto justo como ayer, todos dentro el chófer arranco y comenzamos a rodar con dirección al hospital a buscar los restos de mi difunta abuela.

Llegamos al hospital rápidamente, el viaje fue tan corto, que me sorprendió, ya que ayer fue como una eternidad el camino, cuando el auto paro intente salir, pero Lady Mary puso una mano en mi hombro y me dijo,

- Tongtong se encargará de eso, solo nos quedaremos esperándolo aquí, y luego iremos al templo.

Asentí con la cabeza, a final de cuentas no sabía que procedimiento debía hacer para qué me entregan las cenizas de la abuela, ya que todo fue arreglado por otras personas, entonces el hombre se llama Tongtong en todo este tiempo es la primera vez que escucho su nombre, esperamos por un largo rato, hasta que salió con una pequeña urna en la mano, al ver la pequeña urna, la última morada de mi abuela en este mundo me dolió el corazón, pero las lágrimas no quisieron aliviar mi dolor.

El hombre entró en el auto y me pasó la urna, luego arrancamos camino al templo, el monje le hará sus oraciones para que el alma de mi abuela pueda pasar al otro lado, que triste es la vida, los que mueren no saben el dolor que dejan a los que se quedan aquí, y lo difícil que es vivir solo con el dolor de la perdida, no sé si soy solo yo o en el mundo ahí más personas que vivan más en dolor que en amor.

Cuando llegamos al Templo budista de Longshan en el Distrito Wanhua, el monje nos estaba esperando, para hacer la ceremonia de despedida, Lady Mary le dio al monje la ofrenda entregue las cenizas, prendida vela e incienso y estuvimos un largo tiempo hasta que se hicieron los ritos necesarios, al terminar, el monje me devolvió las cenizas, íbamos de salida cuando Lady Mary me preguntó,

- ¿Las llevarás contigo o la quieres dejar en algún lugar?

Me detuve a pensarlo un momento, aunque sean solo las cenizas de la abuela, no quieren que estén sean testigos de la vida que voy a vivir, así que dije,

- Quiero llevarlas cenizas al cementerio del monte Wuzhi.

- Está bien.

Nos dirigimos al auto donde los dos hombres que nos acompañaban nos esperaban, subimos y comenzamos el largo camino hacia el cementerio del monte Wuzhi, mientras íbamos en el camino muchas cosas pasaron por mi cabeza, nadie dijo nada en todo el camino, cuando llegamos, con un gesto de la mano, me dijo Lady Mary que fuera sola, me desmonte del auto, y subí los escalones hacia donde estaba la tumba de mis padres.

Cada escalón y cada paso que daba hacia la tumba de mis padres, era un paso más que me alejaba de ellos, cuando estaba justo frente a sus tumban descuidadas por el paso del tiempo, me dio vergüenza no llevarles ni siquiera Flores, me arrodille antes la tumba, coloque la urna de la abuela encima de tumba de mis padres y me recosté sobre ella, quería en ese momento dejar todo mi ser con ellos, toda mi inocencia, los buenos recuerdos, las esperanzas, ilusiones y los sueños, lo dejaría todo en este lugar.

Por fin las lágrimas comenzaron a salir y el dolor que oprimía mi corazón comenzó aliviarse, es un adiós muy doloroso, un adiós a mi vida, a mi familia, a mis sentimientos, a mi inocencia, a mis lágrimas.

Pase unos minutos inmóvil dejando salir todo lo que me dolía, me levanté, y miré por última vez esa tumba donde también se quedaría ni anterior vida, me despedí para siempre de todo con una sola palabra,

- Adiós.

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