Capítulo 4: Pasos en la oscuridad

Cuando traspase esa puerta lo supe, ya no había vuelta atrás, ya no tenía nada ni a nadie y mi única prioridad era sobrevivir en este nuevo mundo donde con cada paso que daba hacia ese auto que me esperaba, me condenaba a una vida completa de oscuridad.

Lo único que tenía en la mente era, que este dolor y está venganza era lo único que tenía para seguir viviendo, era mi motivo y el motor que me haría superar cualquier dificultad.

Me detuve en la puerta del auto, miré por última vez aquella pequeña casa donde a pesar de todas las limitaciones fui de una manera u otra feliz junto a mi abuela, no me había ido, pero ya la nostalgia se apoderaba de mí, los buenos recuerdos se apoderaron de mi mente y quizás la última sonrisa sincera que tendría en mucho tiempo se posaba entre mis labios; Lady Mary aclaro su garganta lo que significaba que era hora de irse, abrir la puerta trasera y me senté a su lado justo como antes, en el momento que cerré la puerta el auto arranco con dirección a mi nuevo hogar La Casa De Las Flores, el burdel más famoso de Taipéi y el lugar donde debía quedarme por tiempo indefinido.

Al lado de esta mujer que me a ayudado tanto y a la que le debo tanto dinero, una parte de mi piensa que es extraño que ella haga tanto por mi, al final de cuentas soy solo una chica más, ella puede conseguir incluso chicas más bonitas que yo con menos esfuerzo y dinero; pero algo me dice que ella se identifica conmigo por alguna razón, quizás pasos incluso cosas más terrible que las que me han pasado a mi.

Entre más nos acercamos a nuestro destino, más quería abrir la puerta y arrogarme del auto en movimiento, nunca hubiera tenido estos pensamientos de autodestruirme antes de este día, pero no podía hacerlo, los rituales funerarios de la abuela todavía no se han hecho y no he pagado mi deuda, si dejo este mundo no quiero llevarme ninguna carga, así que abandone mis deseos suicidas y solo cerré los ojos y deje que todo siguiera su curso.

De la peor manera he aprendido que existen cosas inevitables en la vida, pruebas que se tienen que experimentar y que esto no tiene nada que ver con si la persona es buena o es mala, pero tiene todo que ver con si la persona es fuerte o es frágil; el auto se detuvo, frente al burdel, Lady Mary salió del auto y yo detrás de ella, le seguía de cerca, entramos al establecimiento por la puerta principal, que daba a un gran salón, un grupo de mujeres jóvenes estaba reunidas ahí.

Parece que nos estaban esperando, desde que entramos no se apartaban los ojos de nosotras, especialmente esa mujeres me miraban a mi, más que Lady Mary; entre esa mujeres destacaba una muy hermosa de figura perfecta y pelo largo, ella comenzó a caminar hacia mi, cuando estaba frente a mi comenzó a mirarme de pie a cabeza, ignoro a Lady Mary que estaba justo delante mío y comenzo hablar,

- ¿ Y que tiene esta de especial? ¿qué nuestra gran Lady Mary ha hecho tanto por ella? ¿Niña dime es Lady Mary tu madre por casualidad?

Me quedé paralizada con esa pregunta como puede Lady Mary ser mi madre era algo no solo ridículo, sino también importante; en el caso de que eso fuera posible como una madre puede llevar a su propia hija hacer el objeto de placer de los hombres. Antes de que abriera la boca para contestar, Lady Mary comenzó hablar,

- Que ridícula te haz vuelto con los años, con tu imaginación deberías ser actriz y no dama de compañía.

- Mary, que te puedo decir nos sorprende que hallas gastado tanto dinero y tiempo por esta chica. No es algo normal en ti, ser tan buena persona.

Todo se quedó en silencio al parecer Lady Mary no hace nada por otros, pero ha hecho mucho por mi, ya era de noche y tenía hambre y sueño y estas mujeres seguían murmurando y hablando bajo entre ellas; me sentía como la atracción de un circo, ya puede ver desde hoy que mi vida aquí no será tranquila.

Aclare mi garganta y comencé hablar;

- Hola, soy Lucy Liu, tengo 18 años y voy a trabajar aquí para pagar mis deudas.

La mujer que me había hablado antes se me volvió acercar, tomo un mechón fe mi cabello y comenzo a jugar con el entre sus dedos, y me dijo,

- Niña te ves muy inocente, eso le gusta a los hombres pero te diré una cosa, el infierno por el que vas a pasar aquí, te convertirá en un monstruo de sangre fría y más si era la pupila de Lady Mary.

Soltó mi pelo con desprecio y todas las demás miraban la escena, incluso Lady Mary no dijo nada en el momento, pero luego,

- Vallan hacer sus cosas aquí no ahí nada que ver, Tina, lleva a Lucy a tu habitación por el momento serán compañeras de cuarto.

- Si Señora. Sígueme.

Seguí a la chica llamada Tina escaleras arriba, era delgada y de piel blanca, pelo corto y grandes ojos y no podía tener más de 22 años,

pasamos por un largo pasillo, tenía muchas puertas, la chica se detuvo en el fondo y abrió la puerta, miro hacia mi y me indico con un dedo que entrará, entre detrás de ella y cerré la puerta al entrar, la habitación era grande, tenía un closet , dos camas, otra puerta que al parecer era el baño, comencé a mira a mi alrededor hasta que me tope con la mirada de la chica que se había sentado en una cama, la cual comenzó a decir,

- Al parecer tienes el favor de Lady Mary pero no te confíes, le caes mal a Emma y esa mujer es muy peligrosa, si te considera su rival te hará la vida un infierno.

- Gracias por abvertirme, tendré cuidado con ella.

Supongo que Emma es esa mujer que me habló en el salón cuando llegue con Lady Mary, tire mi bulto a un lado de la cama vacía y me desplome sobre Ella, olvidé que tenía hambre y cerré los ojos esperando dormir, Tina no volvió a decir nada lo que me ayudo no pensar nada más y ser arrastrada lentamente a un sueño profundo.