No compatible.

David fue llevado al hospital, el mejor de la ciudad y al que siempre se iba.

Lorena llegó, asustada, llorando, nerviosa, pero lo que llamó la atención se Danna y Rosalinda, fue la negativa a que David siguiera en ese hospital.

Intentó de todas las maneras posibles llevarlo a otro, pero como fue Danna quien lo ingresó, nadie más podía hacer ningún movimiento que ella no autorizara.

__Me voy a llevar a David, tú no tienes ningún derecho de tenerlo aquí, ¿lo quieres matar acaso?.

Lorena se tronaba los dedos y la frente le brillaba debido al sudor frío que empapaba gran parte de su cuerpo.

__Pareciera que lo quieres es a David muerto, es un riesgo moverlo, tiene perforado el estómago ¡perforado!, y en lugar de pedir que hagan todo por salvarlo, llegas aquí gritando y exigiendo para llevarlo a quien sabe donde.__Le respondió Danna.

Rosalinda tenía algunas sospechas, pero prefirió creer que Lorena no sería capaz de llegar a tanto. Se conocían desde niñas, se contaban todo, hasta que conoció a Carlos, aun así Rosalinda le dio una oportunidad y siguieron siendo cercanas, lo que ella aprovechó para hacer todo lo que hicieron tratando de quedarse con todo lo que Rosalinda tenía.

__Vete de aquí Lorena, ve en busca del neandertal de tu marido, sabes, es injusto que ese animal ande libre, después de todo él es un ladrón, un asesino y un vulgar estafador.__Le dijo Rosalinda apretando sus dientes para no gritarle.

__Todos esos adjetivos son para tu brillante esposo, solo agrégale cobarde.

Rosalinda era muy sensible a Omar, odiaba profundamente que se hablara de él, sobre todo si se trataba de ensuciar su nombre, ella más que nadie en el mundo sabía lo que Omar era, un excelente ser humano.

Quiso propinarle una golpisa a Lorena, pero su padre lo impidió.

__¿Puedes dejar de ser estúpida, al menos ahora que David lucha por su vida?, busca mejor, un lugar donde esconder a la rata de tu marido, por qué si hasta hoy sigue vivo, es solo por la consideración de mi hija, pero de ninguna manera se lo merece, anda, ve con él y sé su perra como siempre.__Rosalinda vociferó.

El señor Ignacio tenía una mirada sombría y terrorífica, de por sí el mundo lo conocía por ser uno de los más sangrientos y fatales de la historia aún siendo viejo, todavía infundía miedo. Y fijó su tétrica mirada en Lorena.

Lorena no soportó la presión y se fue, así como llegó, sin siquiera detenerse a preguntar por la salud de su hijo.

Un doctor con la bata llena de sangre salió hasta la sala de espera.

__¡Familiares de David Castillejos!, vengan conmigo!.

Danna no quiso ir, quizá el incidente la obligó a cumplir con su papel de esposa y su sentido común la hizo usar su estado civil para ingresar a David en el hospital, pero tenía demasiados sentimientos que estaban tan desordenados como su cabello.

__¿Puedes ir tu mamá?, yo no me siento muy bien.

Rosalinda fue tras el doctor, al igual que don Ignacio.

__Lamento informarle que el joven, recibió una herida bastante grave, necesita una transfusión sanguínea y la autorización para realizar la extracción de parte de su hígado que se está viendo comprometido.

Rosalinda sintió pena por David, su madre vino y se fue sin preguntar por él. ¿Cómo se supone que iba a donarle sangre?.

Estaba en una situación complicada.

__No puede ser mamá, no contesta, se la tragó la tierra.

__Llama a su casa, yo iré hasta la oficina a ver si la vieron.

__Debe ser rápido...

Entonces Danna recordó a su terrible cuñada.

La mocosa malcriada que tanto odiaba.

__Mamá, llama a Carina, tiene que venir.

Carina era la menor de los hijos de Lorena, una niña rica pesada y odiosa al punto de ser expulsada de casi todas las escuelas a las que iba, solo en España encontró su lugar.

__Hola, ¿quién eres?.

__Hola Carina, soy Danna.

Un silencio profundo invadió la línea.

__¿Dime?.

__David está en el hospital, grave, necesita una transfusión sanguínea con urgencia y necesita que sea un donante compatible.

Carina sintió que el mundo caía a sus pies, amaba a sus dos hermanos, no había nada que ella no hiciera por ellos.

__Salgo en el primer vuelo de esta noche, pero no le digas a mi madre.

Eso tomó por sorpresa a Danna, Carina y Lorena eran muy unidas.

Mientras David luchaba por seguir vivo, Emilio recibió la llamada de Carina, habían pasado unos días antes de llegar a Turkía, Carina escuchó toda la historia y decidió apoyar a su hermano por encima de sus padres.

Tanto Jade como Emilio decidieron volver.

En el hospital Danna entró sigilosamente en donde tenían a David, verlo fue devastador.

Reinaba le silencio y el ruido de el monitor le parecía escalofriante. La palidez de su rostro era casi fantasmal. Y lo más triste era verlo solo.

Cuando ella estaba en Boston, siempre estuvo rodeada de su familia y amigos. Su padre no lo pensó en dar su vida a cambio de que ella viviera más tiempo, en cambio, David estaba solo, su madre salió tras el hombre que casi lo mata, no tenía a nadie más que a ella.

__Lucha por vivir, tienes una vida por delante, aún falta realizar tu sueño más grande...

Besó su frente fría y salió antes de que alguien pudiera verla.

Por la mañana llegó un auto gris, el chirrido de las llantas hizo voltear a más de uno.

Era un auto lujoso, un Mercedes personalizado.

Emilio bajó del auto, junto a Jade y Carina, el frío de la mañana soplaba haciendo que los huesos dolieran.

__Danna, gracias por traerlo aquí, ¿cómo está?. __Danna lo abrazó igual que a Jade, no tenía cabeza para nada, verlos juntos le provocó felicidad, pero a medias.

__Sigue inestable, por la noche tuvo fiebre y eso es peligroso, porque puede ser una infección, ahora están buscando de donde viene... van a quitarle parte del hígado y creo que un riñón.

Carina no sabía que decir o como saludar a Danna, en el pasado ella hizo cosas muy feas para molestar a su cuñada y todo junto a Miranda.

__Hola Danna.__Danna la vio, no se parecía en nada a la presumida chica que ella conocía incluso su voz era distinta.

__Hola.__Se limitó a responder.

Intercambiaron miradas pero nada más.

Ambos hermanos pasaron a hacerse las pruebas para ver quién de los dos le donaría sangre a su hermano.

Pero ninguno era candidato.

El doctor llamó a Danna, con urgencia.

__Señora Villa, es una pena lo que diré pero, entre los dos muchachos y su esposo, no hay compatibilidad alguna.

Danna quedó estática.

Se tambaleó un poco y el doctor le acercó la silla. Como cada vez que se sentía mal, llevó sus manos a la cicatriz que atravesaba su pecho.

__¿Eso que significa?.__Preguntó a pesar de casi saber la respuesta.

__Bueno, es seguro que ellos no comparten genes con su esposo, ellos no son sus hermanos, son familia, pero no son hermanos.

Su boca se abrió en una perfecta o. Le pidió una explicación más extensa.

__Verá, tenemos que hacer un análisis más profundo, de momento no hay posibilidad de que ellos sean donantes.

Salió del cubículo y fue hasta los baños, tratando de procesar esa información.

__Aquí estás, ¿pasa algo cariño?.

__Mamá, David no es hijo de Carlos y tampoco de Lorena.

Y entonces todo cobró sentido.

Carlos nunca abrazaba a David, jamás lo llamaba con palabras amorosas, siempre fue el más ignorado. Recordó en una ocasión cuando vivían en la casa del lago, Carlos llegó con una gran cantidad de papeles para firmar y David aunque cansado tuvo que hacerlo.

Él hacía de todo para agradar a su papá.

Pero no logró hacerlo y la realidad era que el hombre al que tanto amaba no era su padre.

__Pero...¿dices que nada de compatibilidad?, entonces Lorena...

Rosalinda hizo algunas preguntas para sí misma, sacó algunas cuentas, recordó ciertas cosas y todo encajó en su lugar.

David no era más que un escudo para Carlos, una barrera impenetrable.

Rosalinda y Danna eligieron guardar ese secreto, debían primero encontrar algo para distraer a los hermanos de David.

__Vayan a descansar, si hay noticias yo les llamo.__dijo Rosalinda, tenía un enojo feliz hacia Carina, pero hizo de lado el sentimiento.

__No me lo tomes a mal, es solo que no puedo irme y dejar a David solo.__Dijo Carina.

__No está solo, nosotras nos quedaremos...

Emilio notó el nerviosismo en la voz de Danna.

__Cari, ve con Jade, dense un baño y descansen, vuelvan por la tarde para que Danna y Rosalinda puedan irse a descansar.

Jade asintió rápidamente, comprendió que algo estaba pasando, ver a Danna tan nerviosa y a Emilio sacando a su hermana era claras señales de eso.

__Y bien ¿qué está pasando?.

Danna y su madre intercambiaron miradas y tuvieron que hablar.

__El doctor dijo que Carina y tú no son compatibles con David.

Emilio sonrió, con incredulidad.

__Debe haber un error, David es mi hermano.

__No lo es, no hay manera de que lo sea.

El señor Ignacio venía entrando a la sala de espera, no venía solo.

Una mujer de aspecto delicado, cabello castaño, delgada y blanca, con la mitad de la cara envuelta en una cicatriz bastante amplia y con un libro en las manos, acompañaba al hombre mayor.

Rosalinda la vio y de inmediato azotó contra el frío piso blanco.

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