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Sahun

No podía ser cierto, yo viví desde niño las peores humillaciones por la familia Wesley y.. No, nunca creeré en ello.

Luego de entregarle el informe completamente perfecto a Alaia, ella se desipidio diciendo que iría a entregarlo en la universidad prometiendo que volvería antes de ir a casa.

Cuando por fin se marchó, llame a Fran pidiendo que trajera de inmediato la lista de los deberes que todos mis primos hacían en las empresas Wesley, pues si Alaia tenía razón en sus palabras, había juzgado completamente mal al abuelo.

No basto más que media hora para tener frente a mi los informes de mis primos y vaya sorpresa me llevé.

- Brandon esta en administración trabajando para los ejecutivos que iniciaron nuevos este año.- contó Fran mientras yo veía con incredulidad lo que me decía. - Victor ascendió hace solo unos meses y tomo el lugar como director de juntas mientras que Marcus solo es su ayudante, Dente, Paul y Loy aun están a la espera de que el abuelo Wesley los tome enserio y por ello solo tienen cargos menores mientras que tu.. Has tenido siempre el control total de la empresa más poderosa y mas importante, la cual fue fundada por la bisabuela Wesley. - añadió y dejé caer la hoja mientras agarraba con ambas manos mi rostro.- ¿A que se debe esta investigación?

- Debemos iniciar todo de nuevo Fran, no puedo hacer quebrar a las empresas Wesley. - Contesté sintiendo una opresión en mi pecho.

- Pero Sahun.. Si hacemos eso ahora.. ¿Que pasará con la competencia? La cual debo de recordarte también es tu posesión mas valiosa. - contestó y lo vi.

- Tendremos que unir ambas empresas o simplemente dejar que mi empresa desaparezca.

- Pero..

- Fran, mi abuelo siempre me ha tenido por sobre todos mis primos y no puedo defraudarlo, habla con los funcionarios y asles saber de este cambio, no quiero que ninguno intente algo o los destruiré con mis propias manos importandome nada el acuerdo anterior. - Respondí y él asintió para luego ponerse de pie y caminar a la puerta.

- Una cosa más.- dijo deteniéndose y lo vi. - ¿Tuvo tu esposa algo que ver en esto? - preguntó y lo vi con seriedad sin responder a su pregunta. - lo sabía. - sonrió.- Tenía que ser ella quien te haga entrar en razón.

- Deja de decir estupideces.

- Quieras o no admitirlo te has enamorado de ella ¿o porque otra razón estarías dando tantas vueltas?

- Mi abuelo quiere que le de un bisnieto para mantenerme como presidente pero Alaia se niega a tener un hijo, ¿que debo hacer entonces?

- Vas a lastimar a esa mujer y luego te vas a arrepentir. - me advirtió y Sonreí.

- ¿Alguna vez me he arrepentido de algo? - pregunté y él nego para luego salir sin agregar más.

Lo siento Alaia, pero debo de ser cruel en esta ocasión, creeme que si tu estuvieras en mi lugar.. arias exactamente lo mismo.

...

...

Un nuevo fin de semana llegaba y mi esposa no colaboraba mucho, pues este último tiempo se ha mantenido mas alejada de mi y hasta he llegado a pensar en que ya descubrió mis intenciones.

¿Debo de darme por vencido o seguir insistiendo?

- Alaia..

- ¿Que? - respondió volteandose a verme.

- Dime de una vez que tanto ocultas.

- Ya te lo he dicho, es una sorpresa para agradar a el abuelo y no tienes que ver con ello. - respondió y la vi con mis ojos entrecerrados para luego suspirar en rendición.

- Bien, la semana que entra tendremos más trabajo de lo habitual y por ello no podré acompañarte con el nuevo Proyecto ¿podras con el? - pregunté y ella asintió sin problema. - Quiero que resuelvas todo con mayor discreción, pues el abuelo no debe enterarse que hemos iniciado nuevamente la construcción.

- ¿Porque la iniciamos de nuevo? Todo iba bien. - preguntó y me mantuve en silencio. *¿que dirías si te dijera que trate de destruir la empresa de mi familia? ¿Seria una buena persona a tus ojos?

- Simplemente creo que el lugar no es el indicado pero no hay de que preocuparse, los gastos correrán por mi cuenta y si el abuelo llega a darse cuenta.. Diremos que el encargado anterior hizo todo mal. - respondí y ella me vio por un momento para luego asentir.

Siento que esto lo pagaré muy caro en el futuro pero de igual manera me arriesgaré, no quiero perder esta oportunidad, no quiero que el abuelo se sienta avergonzado de mi.

Al estacionar el carro en la entrada de la casa, me desabrocho el cinturón y me giro a ella para luego besarla con ternura, una que no se de donde demonios me ha salido. Sin duda alguna ella corresponde a mi beso y pasa sus brazos alrededor de mi cuello profundizando aun más el beso.

- Siento que ya va agradandote más el besarme. - comenté con una sonrisa y ella al igual sonrió.

- Una buena experiencia puede servirme en el futuro y por ello te lo agradezco. - respondió para luego bajar del carro dejándome con una enorme molestia.

Bajé al igual que ella y rápidamente caminé en su dirección para luego tomarla de su mano y detener su andar.

- ¿Estas insinuando que aprendes a besar conmigo para luego compartirlo con alguien más? - pregunté molesto y ella sonrió.

- Solo serán 3 años de matrimonio, lo suficiente para aprender de ti y entregarle así mismo a alguien más, a alguien que me ame.

- Yo te amo.- respondí rápidamente y ella se sorprendió al igual que yo. *¡Maldita sea! Ahora no puedo retractarme y eso me enfurece. - Que te quede bien en claro que no me prestaré para que aprendas conmigo algo que luego le quieras dar a otro, yo no seré tu instructor.

- Entonces ya no me beses, buscaré en el futuro alguien que lo haga.- respondió soltándose de mi agarre y caminando en dirección a la casa.

- ¿Ya se te olvido quien fue el que te salvó? - hable logrando que se detuviera allí mismo.- ¿No estabas agradecida conmigo por liberarte de las manos de Robert? - añadí.- ¿Donde quedo esa sumisa que daría todo por su salvador?

- Tu dijiste que no te debía nada.

- Y tu dijiste que harías lo que fuera por mi.

- ¿Que es lo que quieres? - preguntó mientras caminaba nuevamente a mi. - ¿Que tengo que hacer para pagar mi deuda con usted, amo?

- Quiero que me ames, Alaia. - respondí tomándola de su cintura. - Quiero tu corazón para mi, así como tu tienes el mío. - y dejando a un lado las tontas cursilerías, la tome de su nuca y acerqué su rostro al mío besándola con intensidad, con una que podría llegar a provocar como mínimo un pequeño deseo en su cuerpo, uno que aclame por mi y conseguir con ello que me deje entrar en su interior y depositar una semillita que crezca poco a poco en su interior y de a mi abuelo la seguridad que quiere y a mi el puesto con el que he soñado toda la vida.

- Vaya, ustedes si que estan con las hormonas alocadas.- la voz de mi madre apareció deshaciendo este momento entre nosotros y maldije para mis adentros.

- Señora, no.. Nosotros solo.. - la voz le temblaba y yo Sonreí envolviendo sus hombros con mi brazo para luego guiarla donde mi madre se encontraba.

- Hola madre. - la saludé dejando luego un beso en su frente. - Ya sabes como son los matrimonios al principio, una vez que pruebas ya no puedes soltarlo. - añadí viendo luego el sonrojo en el rostro de Alaia.

Mi madre río ante mis palabras mientras Caminábamos en dirección a la casa, antes de entrar.. Mi madre nos detiene a ambos y me mira con seriedad.

- Antes de entrar yo.. Tengo que decirte esto.- Dijo viéndome para luego suspirar. - Sahun, Linda Key esta aquí y dice que no se marchará hasta poder hablar contigo a solas, ella quiere que le des una explicación del porque te casaste sin avisarle de nada.

- ¿Porque tendría que avisarle? No es nadie en mi vida.- respondí con mi ceño fruncido.

- Tu abuelo había decidido casarte con ella y por ello estuvo preparando todo para su boda y pues..

- No fue culpa mía, jamas dije que aceptaba ese matrimonio.- respondí con molestia y mire a Alaia. - ¿Aun deseas quedarte? Porque no tengo ningún problema en conducir nuevamente para volver a casa.

- No no, ya llegamos hasta aquí y no nos iremos. - respondió y suspire con molestia para luego asentir.

La verdad es que pese a todo.. No quería que aquella mujer le causara problemas a mi esposa, aunque no sea un verdadero matrimonio he prometido cuidar de ella y eso incluye de cualquier mujer que quiera lastimarla.

- Entremos entonces. - dijo mi madre y asentimos para luego seguirla.

Al poner los pies en la sala pude ver a Linda Key levantarse con molestia y dirigirse en nuestra dirección.

Pude ver su mano elevada con la intención de abofetearme pero al parecer sus planes fueron frustrados.

Alaia se encontraba frente a mi sosteniendo la muñeca de la mujer y viéndola como si fuera a comérsela en cualquier momento.

- ¡Sueltame! - gritó Linda Key mientras forsejeaba con mi esposa.

- Lo haré, pero si intentas golpear a mi esposo te sacaré de aquí a rastras sin importarme quien intervenga.- respondió mi mujer y sonreí satisfecho, realmente era lo que me esperaba.

- ¡Nuestros problemas no te conciernen! - volvió a gritar y Alaia soltó su mano con brusquedad para luego acercarse a mi rodeando su mano derecha en mi cintura y dejando su mano izquierda en mi pecho.

- ¿Que te hace creer que no? - preguntó viéndola con seriedad. - Este es mi hombre y lo defenderé de ti y de todas las mujeres que quieran apartarlo de mi lado. - añadió y voltee a verla con ternura. * No estoy enamorado de ella, solo me conmovieron sus palabras.*

- ¡Así se habla prima! - gritó Nelie y mi abuelo giró a verla con molestia.

- Pues dejame decirte que tu adorado esposo estaba comprometido conmigo y..

- No creo que él aya estado de acuerdo con ello, de lo contrario no estaría casado conmigo.- la interrumpió Alaia y asentí.

- Linda, ya basta por favor, resolvamos el asunto como adultos que somos.- habló el padre de la mujer y esta muy molesta se giró y camino en dirección a el sofá. - Artur, ¿será posible un poco de privacidad? Este asunto es entre los involucrados y sus padres, no tienen que ver los otros miembros de tu familia. - añadió y mi abuelo asintió viendo a todos retirarse uno por uno.  - La señora Wesley si es tan amable..- añadió viendo a Alaia quien asintió, volteo a verme y dejo un beso en mis labios.

- Me llamas cualquier cosa.- dijo en mi oído y la aferre más a mi.

- Tu te quedas.

- A ella no le incumbe lo que tengamos que hablar. - Dijo Linda y la fulmine con la mirada.

- Es mi esposa y se quedará aquí. - respondí viendo a uno por uno.- Si alguien tiene algo para decir, será frente a ella o de lo contrario tampoco me quedaré.

- Como usted quiera joven amo.- respondió el padre de Linda y caminamos a el sofá junto a el abuelo y mis padres. - Señor Artur, usted sabe el respeto que le tengo y por ello desearía no terminar mal nuestra amistad.

- Tampoco quiero tener que terminar nuestra amistad señor Key.

- Bien, entonces creo que estará de acuerdo conmigo. - Añadió y mi abuelo lo vio con seriedad. - Sabe tanto como yo que los arreglos de la boda ya fueron iniciados y por el enorme gasto que hubo en los arreglos y demás.. Esta boda debe celebrarse.

- Podemos compensar los gastos para que la familia Key no tenga que perder un solo peso.- respondí viendo con seriedad a el sujeto. - pero lamentablemente esa boda no podrá ser.

- Usted no entiende, aquí hay mucho mas en juego que un simple gasto.- contestó él y volvió su mirada a mi abuelo.- Todos nuestros invitados ya fueron informados sobre la boda y nuestra reputación quedaría mal si ahora decimos que la boda se suspenderá.

- ¿Y que quiere que hagamos? - habló esta vez mi padre.- Ni siquiera nosotros estábamos al tanto sobre el matrimonio de nuestro hijo.

- Con más razón.- dijo la madre de Linda.- Nadie de nuestro entorno esta enterado de el matrimonio del joven amo, entonces podemos hacer de cuenta que nunca existió y seguir con lo pactado.

- ¿Esta usted insinuando un divorcio en mi familia? - preguntó con molestia el abuelo.

- Abuelo Wesley, nadie sabe sobre el matrimonio de mi prometido y esa mujer, por ello no sería un problema y fuera de ello... Si ni siquiera ustedes sabían sobre su repentino matrimonio, eso quiere decir que ambos están fingiendo para que nuestra boda no se realice, ellos no están casados verdaderamente. - comentó Linda Key y todo quedo en silencio.

Maldita bruja, no permitiré jamás que te salgas con la tuya, ni tu ni nadie me separará de Alaia.

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