Sueño

Hoy es el día en que tendré mi última cita donde el médico me dirá si el tratamiento funcionó o tenemos que seguir con algún otro.

Me vestí con un vestido negro de gasa sin mangas y mis botas negras, era como despedirme de lo que tanto dolor me provocó, aunque aún no se si ya estoy bien, se que estaré bien, estos días me siento feliz no se si es por qué Lie se ha encargado de hacerme olvidar que estoy enferma.

Al bajar las escaleras mi mejor amiga y mis padres estaban charlando sobre el largo proceso que lleve en estos meses y como mi carácter había cambiado, ya no era la chica dulce que era antes me sentía vacía, mis ganas de seguir a veces se vienen abajo y mi deseo de amar también, aunque ayer Lie me pido que fuera su novia no me sentía muy emocionada, sabía que solo era un juego, una aventura pasajera de la cual me aferró para olvidar mi dolor.

- Te vez hermosa amiga, decía Erica.

- Gracias pero creo que mi look es algo oscuro.

- Te ves bella, decía mamá.

Nos subimos al auto, miraba por la ventana y recordaba la última conversación con el, cómo me pedía estar aquí conmigo.

Pero no estoy lista para que me mire así, tan vacía y sin ilusiones, aunque soy positiva frente a todos, mi corazón duda y mi alma enferma de miedo a saber que no habrán más días para mí.

Llegamos al hospital baje sonriendo no quería que notarán mi sufrimiento.

- ¿Estás lista?, decía mi amiga Erica.

- Lista, dije sonriendo.

Subimos al elevador y llegué a la sala de espera del médico. Mi madre hablaba con la ayudante del doctor.

- En un minuto pasas, dijo mi madre.

- Todo saldrá bien, decía mi padre.

- Creo que era el único que podía mirar como me siento por dentro, cómo estoy aterrada.

- Solo puede pasar la señorita, decía la ayudante del doctor.

- Buen día doctor, dije sonriendo.

- Hola Jido, ¿cómo estás?

- bien

- Si te ves muy bien, bueno déjame decirte que estuvimos mis colegas y yo mirando tu caso y hay algo extraño.

Sentí que mi corazón se detenía.

- Estoy enferma aún

- No es solo que al hacerte una resonancia, hay partes de tu cerebro que se encuentran muertas, no se mira actividad y no sabemos a qué se debe, queremos saber si te gustaría ser parte de un estudio clínico para ayudar a personas con perdida de la memoria.

- Pero yo no perdí la memoria

- Si pero tu cerebro nos dice otra cosa, salvaremos vidas.

- ¿vidas?, y la mía, que hay de mi vida.

- Podrás tener una vida normal.

- Normal.

- ¿A qué te refieres con normal?, ¡mírame doctor estoy muerta en vida!.

- Pronto recuperarás tu peso.

- Solo dígame si estaré bien .

- Estás bien

- Entonces no me interesa

- podrías salvar vidas.

- ¡dije que no!, grite y salí del consultorio molesta.

- ¿qué pasó cariño?

- ¡Estoy sana pero quieren que sea un conejillo de indias!, decía enojada.

- Tranquila amiga, por favor.

- ¡Solo quiero salir de aquí!, grite

- Pero ¿estás bien?.

- mí cerebro no está bien, una parte de el está muerto .

- ¿Cómo no entiendo?, decía mi padre.

- El doctor se acercaba a el y hablaba con el en privado.

- Ya tranquila, decía Erica

- ¡Solo quiero salir de aquí!

Baje corriendo las escaleras, había algo que no entendía de todo lo que me estaba sucediendo.

Al bajar las escaleras mire a un hombre con una rosa roja en la mano.

Se parecía a el, me acerque con miedo.

- Lie, ¿eres tú?, dije mientras el estaba de espalda.

El me miró asombrado.

- Jido, ¿eres tú?

- Si, dije sonriendo.

- Yo quería estar aquí para ti.

- Te dije que no quería que me miras así.

- Te vez hermosa.

- Estoy horri...

El colocó su dedo en mis labios.

- Me encanta tu look gótico.

Sentía que mi corazón se paralizó al sentir sus dedos.

- ¿qué tal te fue?, por qué veo que tus padres y tu amiga nos miran asombrados.

- Dicen que una parte de mi cerebro está muerta pero yo me siento bien.

- ¿Y entonces por qué estabas corriendo?

- Por qué tenía que salir de ese lugar el doctor quiere estudiar mi cerebro.

- ¿Y tú qué quieres?

- Quiero vivir, enamorarme, comer sin vomitar, reír a carcajadas, ser feliz.

- ser feliz es complicado.

- Ya lo sé Lie, ni en tus historias el amor siempre triunfa.

- Aún no termino mi libro, tu y yo podemos hacer que ellos sean felices.

- ¿Y yo por qué?

- Por qué tú eres la protagonista de mi historia.

- ¡Yo!, estás diciendo idioteces

- Crees que vendría desde lejos para decir idioteces. Cambiemos la historia, déjame hacerte feliz.

- ¿Y como harás eso?.

- Déjame estar contigo aquí ahora.

- ya estás aquí

- si, pero enamórate de mi como yo lo estoy de ti.

Miraba a Lie sorprendida, habían muchas cosas que no entendía, que no lograba entender que decía.

- Déjame Jido, quiero enseñarte que podemos cambiar el final de cada historia, que podemos vivir nuestro propio cuento de hadas, que puedo hacerte feliz como Jido hizo feliz a Lynec.

- Ella murió Lie.

- Pero puedo escribir un final diferente, el final que tú y yo deseamos tener, el final de nuestras vidas.

- ¿Cuál vida Lie?, solo somos dos personas desconocidas que tuvieron conección.

- Si una conección que ya se volvió un sentimiento.

- ¿Un sentimiento?

- Yo siento algo por ti, siento una necesidad de estar contigo, deseo tenerte en mi vida, quiero hacerte parte de mis logros, de mis sueños, quiero poder abrazarte y decirte que eres tan bella, que me vuelves loco, que me encanta que me ignores y que me llames.

- Estoy soñando verdad.

- Si Jido bienvenida a mi mundo, el mundo de los sueños.

- ¿Qué es esto?

- Soy el amor que tienes en tu corazón.

- ¡No entiendo quieres volverme loca!.

- Sueña conmigo, vive conmigo, quédate aquí.

- ¡Basta!, grité

Desperté sudando y mirando la oscuridad de mi habitación.

Más populares

Comments

Rocio Raymundo

Rocio Raymundo

solo era sus sueños de ella

2024-04-10

0

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play