NovelToon NovelToon
Entre Cadenas Y Videojuegos

Entre Cadenas Y Videojuegos

Status: En proceso
Genre:Amor-odio / Apoyo mutuo / Polos opuestos enfrentados / Donde hubo fuego cenizas quedan / Tú no me amas
Popularitas:642
Nilai: 5
nombre de autor: ariana mejia

Jamás imaginé que la pantalla de mi móvil pudiera cambiar mi vida y mucho menos destruirla.

NovelToon tiene autorización de ariana mejia para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Enferma, rota y atrapada

Los días se volvieron una rutina de hospital, medicamentos, análisis y citas médicas. Todo había comenzado con esos dolores en el vientre que ignoré durante meses, los retrasos, el cansancio constante, y la ansiedad que me ahogaba desde hace tiempo. Pero cuando me desmayé en casa, no hubo manera de seguir ocultándolo. Si yo llegaba a notar desde la primera vez que tenía la regla normal y hasta ahora decidí ir al médico, solo porque me encontraba peor.

Después de varios estudios, la doctora fue directa conmigo.

—Isabella, tienes síndrome de ovario poliquístico, SOP —me dijo, y luego agregó algo que me desconcertó—. Pero además, presenta insuficiencia de prolactina. Es una condición poco común. Vas a necesitar un tratamiento especial, y uno de los medicamentos que necesitas es caro y no cubre el seguro. Los medicamentos son demasiado caros e imposible de encontrarlos.

Sentí cómo se me caía el mundo encima.

—¿Cuánto cuesta? —pregunté, con un hilo de voz.

Me dio la cifra y sentí el estómago apretarse. Imposible para mí, imposible para mi mamá, y sin alta médica aún del hospital, ni siquiera podía volver a trabajar medio turno. Porque me dieron incapacidad de 3 meses, me puse a pensar como podría pagar esa cantidad.

Pasé la tarde llorando en el cuarto, sin querer hablar con nadie. Le conté a Mariana, que de inmediato fue a verme, y también a Elías, aunque traté de minimizarlo.

“Solo es SOP, nada grave”, le escribí.

Pero Elías me llamó de inmediato.

—¿Por qué no me dijiste nada antes, amor? ¿Desde cuándo estás mal? ¿Por qué ocultaste esos dolores?

—No quería preocuparte, solo me pongo mal cuando llega el periodo—respondí.

Su tono cambió.

—Mira, amor, tú sabes que te amo, pero… tienes que cuidarte, ¿sí? No quiero que te pase nada. ¿Y cómo vas a viajar así? —preguntó, serio—. Mejor te alivias primero y después vemos lo del viaje.

Por dentro, me tranquilizó su reacción, pero también sentí miedo de que esta fuera otra excusa para controlarme. Aun así, preferí no pensar en eso.

Horas después, para mi sorpresa, recibí otro mensaje de María, la mamá de Elías.

“Hija, me contó Elías lo que tienes. ¿Qué medicina necesitas? Yo puedo ayudarte con eso. ¿Ya se pagó tu alta del hospital?”

Me quedé en shock.

“No, señora, gracias. Es muy caro, no quiero molestarla. No es su responsabilidad pagar todo eso.”

Pero ella insistió.

“Te lo voy a conseguir. Porque eres la novia de mi hijo y te necesito bien. Tú eres importante para él, y para mí también. Y te lo digo desde ya: tú y yo somos familia, y a la familia se le apoya. Porque te quiero a ti como la futura señora Gonzalez y la madre de mis futuros nietos”

Lloré.

Lloré porque en medio de tanto caos, alguien me ofrecía ayuda, aunque no supiera si debía aceptarla. Me sentí agradecida, pero al mismo tiempo atrapada. Porque ahora, si María me ayudaba, me iba a sentir en deuda con ella… y postergar el viaje iba a ser imposible.

Aún así, no tenía opción.

Mi mamá, que seguía molesta conmigo por todo lo de Elías, me lo dejó claro.

—Yo no puedo pagarte ese medicamento, Isabella. Y tú no puedes viajar así. Ni este año ni el que sigue. Primero te curas.

Ese mismo día, María me mandó una transferencia con parte del dinero y me envió fotos del ticket para poder recoger el dinero, pero antes de hacerlo me pidió foto de mi identificación oficial, para poder mandar el dinero, tenía que contestar que soy la nuera de la señora y que soy estudiante, el dinero tenía que recogerlo en banco azteca. Sentí un nudo en el estómago.

Le conté a Elías.

“Te lo dije, corazón. Mi mamá te quiere. Ya no hay pretextos. Cuando estés bien, aquí te esperamos. Pero quiero que sea pronto. Para que nada en este mundo nos separe a tí y a mí.”

Pasé los días siguientes entre exámenes, estudios y más citas. El tratamiento me hacía sentir débil, con náuseas y dolor de cabeza. Mariana no se despegó de mí. Me ayudó a organizar los papeles médicos y, aunque yo no se lo decía, agradecía su presencia más de lo que imaginaba. La píldora anticonceptiva me hacía debilatarme más.

—Nenita… —me dijo una tarde mientras me pintaba las uñas—, ¿ya pensaste qué vas a hacer con todo esto? ¿Con Elías, su mamá, tu viaje?

No supe qué responder.

Solo bajé la mirada.

—No puedo dejarlo —susurré.

Ella me tomó la mano.

—Tampoco puedes dejarte destruir.

Y aunque no contesté, en mi pecho sentí una grieta hacerse más grande.

Esa noche, acostada, con el cuerpo cansado y el celular lleno de mensajes de Elías y su mamá, entendí que ya no se trataba solo de amor o de una relación a distancia. Ahora estaba enferma, vulnerable y atada a gente que, en el fondo, no sabía si de verdad me quería bien… o solo me quería a su manera. Porque ahora sentía que les debía algo o que estaba en deuda con ellos y no podía terminar con Elías.

Y no sabía cómo salir de ahí.

1
astxrism_8
¡Excelente, no te detengas!
Codigo cereza
Me engancha muchísimo😍
Rakka
me ha atrapado por completo, no podía dejar de leer!
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play