¡¡Estoy Harta!!

El hermano de Elizandra apareció en seguida, al saber que estaba en la casa de sus padres.

Era la consentida y siempre la apoyaban en todo.

Sentía impotencia e indignación al saber que Eli ,estaba embarazada y sola .

Tampoco le agradaba Daniel,pero pretendía patotearlo pensando que era el papá.

—No te pongas como pavo real para defender a tu hermana y golpear a quien no tiene la culpa.

¡Gracias a Dios no es el papá!!, pero a tu queridisima hermana,se le ocurrió vengarse con el primero que encontró.

No sabe quien le hizo el milagro , solo que es español,¿que les parece??

Y la mala soy yo.— agregaba la mamá de Elizandra levantándose de la mesa enojada mas que nada ,con el embarazo de su hija adulta e irresponsable.

—No le hagas caso,siempre está enojada ,hasta con nosotros.

Así que son dos.

Uno para cada uno de nosotros, los vamos a consentir.— le decía su hermano intentando que no se sintiera mal.

— Aún no se si me los quedo...— estaba desbordada con la mala actitud de su madre.

—Nos quieres ver enojados, claro que los vas a tener y te vamos a ayudar en todo.

Para eso tienes a tu hermano mayor.

Nos dijo papá que estas trabajando desde un teléfono, ¿ como es eso?.— le parecía novedoso.

— Vendo cosas para un call center desde que perdi el empleo en el bazar , seguros de todo tipo,líneas telefónicas , incluso ofrezco préstamos.

Me dan una lista de números telefónicos de posibles clientes y los llamo,es básicamente eso.

Si permanecen más de dos minutos en línea me pagan ,si vendo algo gano una comisión ,si no vendo nada, me pagan medio salario mínimo.

Se que no es el mejor trabajo del mundo ,pero fue lo que conseguí .

¿No saben de algún empleo que pueda tomar mientras el embarazo me lo permita??.— preguntaba preocupada con esa situación de dependencia de sus padres a la que regresaba.

Tenía muchas cosas que comprar para los bebés .

— Es que la mayoría son de limpieza, pero no estás en condiciones con dos bebés ahí.— le aclaraba su hermano.

— ¡No vas a lavar pisos.!!.

Es un trabajo digno lo se,pero no para ti .— le advertía su padre.

— Bueno hay un lugar en el puesto de gasolina a la noche .— le ofrecia Enrique su hermano.

— ¿Una mujer embarazada en un puesto de gasolina ?,estas loco.— le rezongaba su padre.

— Es tranquilo a la noche y es para la tienda de conveniencia.

De doce de la noche a seis de la mañana.— miraba a su hermana esperando que decidiría.

—Iré a ver el trabajo.—no tenía alternativas, necesitaba hacer algo más.

—Eli ,no lo hagas sigue con tus llamadas.— le pedía su padre.

—No puedo papá, mamá tiene razón. Debo ser responsable de mis fallas y estos niños son consecuencia de no pensar las cosas mejor y de no cuidarme.— aunque le doliera lo que le decía, estaba en su derecho a reclamarselo.

— Si te toman en ese trabajo,te llevo y voy por ti,no voy a dejar que andes sola por la calle.—se disponía a colaborar con su hija.

— Gracias papá. —

La mesa fue colocada para el almuerzo.

Doña Alma, les sirvió la comida a todos ,menos a Elizandra.

Estaba claro que no le pondría las cosas fáciles y su padre le entregaba su propio plato sirviéndose más.

Sin dudas la quería demasiado para juzgarla.

A pesar de todo, era su niña y ella retribuía ese cariño agradecida con todo el cariño que le brindaba.

Su hermano la llevó al puesto de combustible mas tarde y se quedó con el empleo.

Empezaría la próxima semana.

Estaba contento,por ella,tenia su tienda en frente .

Ofrecia productos agrícolas que se vendían por toda la región .

No tenía un lugar para su hermana, los vapores no serían buenos para los bebés si decidía hacerle uno.

Además las ventas estaban lentas y los saldos pendientes de los productores acumulados.

Elizandra sabia como funcionaba su negocio ,de adolescente había ido más de una vez a cubrir alguna licencia para poder comprarse una bicicleta y después su moto.

Su padre le trajo más tarde un jugo de frutas y la invitaba a seguirlo.

— Tu madre me amenazó.

No quiere que ande cargandote.— se disculpaba, sabía cómo se ponía densa cuando quería.

— Tomaré un ómnibus o lo que sea, tu no te preocupes.— no quería complicarle la vida.

— No es necesario ven.— abrió el garaje.

— Esto es...—

— El Volkswagen escarabajo año 78 de tu abuelo.

Tendríamos que llevarlo a una oficina que lo revisen,pero creo que no tendrás problemas, se paro el vehículo funcionando.

Sabes que solo tu hermano lo usaba,pero ahora tiene una camioneta nueva y esta ahí olvidado.— era como la reliquia de la familia.

— Gracias papá, pero no puedo pagar el arreglo.— se lamentaba corriendo la lona que lo cubría para recordarlo mejor.

— Te lo doy andando aunque duerma con el perro.— le comunicaba.

— Gracias papi..¿ mi moto??.— también la veía allí guardada en el garaje.

— Si a veces salgo a andar en ella para que no se estrague.

Hay muchas cosas tuyas allí,la bicicleta que compraste con tu primer salario,los patines ,el monopatín, etc.— estaba todo acomodado y bien conservado.

— Papá ..¿será que mamá se molesta si ofrezco todas esas cosas?.

Tal vez si las vendo puedo pagar el arreglo del auto.—se le ocurría una idea.

— Solo si vendes la moto también, no te quiero ver en ella embarazada.— le advertía.

— La vendo ,te lo prometo.

Voy a sacarle fotos. —empezó a hacerlo y a ofrecer sus cosas en una página de compra y venta de la ciudad.

Enseguida las llamadas empezaron y los compradores vinieron a recoger las adquisiciones.

Lo más demorado fue la moto.

Habían muchos interesados y pocos con el dinero en la mano.

Su padre se llevaba el fusca de tiro con la camioneta de Enrique cuando apareció un comprador para ella.

Había sido su compañero de escuela y su primer novio.

A la mamá de Elizandra le agradaba bastante y siempre había estado enojada con ella desde que rompieron.

Por supuesto que al verlo allí ,vino a saludarlo y lo invito a comer un pedazo de pastel recién horneado.

— ¡¡Que rico!!, hace mucho que no comía uno.

¿Te vas a quedar por la ciudad Eli?.— le preguntaba.

— Solo hasta que nazcan mis hijos.— eso lo sorprendió.

— No sabía que te habías casado.— no le gustaba lo que escuchaba.

— ¿Quieres otro pedazo??.— le ofrecia doña Alma.

— Se lo agradezco pero no, recien almorcé.

¿Cuanto quieres por la moto Eli?.

Sería un buen regalo para mi hijo ya que insiste en tener una.

Si la va a romper,es mejor que no sea nueva.— le explicaba.

—Está andando, quiero 15 mil.— Eli estaba tirando abajo el precio para venderla rápido.

— Podrías haceme una rebaja de amigos.— le pedía.

—¡Claro que te hará una rebaja!,¿ no es así Eli??.— se metía su madre nuevamente.

— Lo siento no hay rebajas,esta andando y el precio es la mitad de el valor de una nueva.

Esta enterita y tiene poco uso.— no bajaría mas el precio aunque su madre se lo ordenara.

— Eli bajale el precio..— insistía la señora cuando el timbre sonó.

Era otro interesado ,así que los dejo y se concentró en mostrarle la moto.

Cuando Gustavo percibió que se la vendería a alguien más ,ofreció 16 mil .

— 17 mil.—dijo el otro enseguida.

— 18.— a Eli ya le estaba agradando la disputa.

— 18 500 ,no tengo más.— se atajaba el nuevo interesado.

— 20 y es mía .—afirmó enseguida Gustavo, con miedo de perder el negocio por regatear.

— 20 500,si tiene es suya.— aprovechaba la ocasión Eli.

Preferia vendérsela al otro,solo por molestar a su mamá.

— Lo siento no tengo mas.— se disculpaba.

El vendedor se fue y nuevamente tenía que negociar con su antiguo ex.

— Me llevo la moto, eres buena vendedora.

20 ,¿no??...aquí los tienes.

¿Me ayudas a cargarla??.— le pedía colaboración para subirla a su vehículo y marcharse.

— Lo siento estoy embarazada, los papeles están debajo del asiento, aquí tienes las llaves.— se las entregaba.

Después se metió a la casa dejandolo con su mamá en el patio.

Don Miguel regresaba con su hijo y lo ayudó con la moto.

— ¿Ya la viste??.— le preguntaba por Elizandra .

— Si vine apenas vi la publicación..

—Ya esta en la oficina el auto, papá me tengo que ir .— se despedía Enrique marchansose a abrir su negocio.

Gustavo era mecánico y se encargaría de reparar el Volkswagen.

—¿Cuando estará pronto??.— preguntaba don Miguel.

— Voy a poner toda mi atención en el,lo prometo.

Si esta todo como creo, en máximo dos días mas o menos ,ya estará circulando.— le explicaba al papá de Eli.

— Gracias,lamento muchísimo lo

de tu divorcio.— sabía la disputa que había sido.

— Yo no.

No se puede mantener un matrimonio solo por los hijos.

Nunca fue por amor.

Lo llamo cuando esté pronto para levantarlo.—terminaba de atar la moto.

Se dieron la mano y se marchó..

Veía a su hija en su habitación, feliz contando todo el dinero que había hecho con las ventas en línea.

Mucho más de lo que esperaba conseguir.

Eso era bueno después del arreglo del auto, le daría para comprar algunas cosas para sus bebés que venían en camino.