La intención de proponerle matrimonio a su amante se convirtió en una pesadilla cuando Raymond fue acusado de asesinato. Resultó que su amante y su romance lo habían convertido en el chivo expiatorio.
Justo cuando Raymond estaba a punto de recibir la pena de muerte, un misterioso sistema acude a su rescate. Raymond se ve obligado a cambiar su identidad para evitar a la policía, mientras planea vengarse de quienes destruyeron su vida.
Para cumplir con us deseo de venganza, Raymond, con la ayuda del sistema, se embarca en una misión para ayudar a mujeres hermosas a través de su servicio como hombre pagado. Este viaje lo convierte en un hombre guapo, fuerte y rico, rodeado de muchas mujeres. Pero ¿será esta venganza suficiente para curar las heridas de su corazón?
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Capítulo 8
Dos días después...
[Nombre Real: Raymond Sanjaya
Nombre en clave: Bara
Edad: 27 años
Estatura: 185 cm
Peso: 70 kg
Atractivo: 100
Encanto: 100
Fuerza: 0
Habilidades: 0
Armas: 0
Virilidad: 100
Fondos: 0
Deudas: 1.000.000.000
Nivel: 0]
Raymond suspiró al escuchar la voz del sistema, como si estuviera recordándole que tenía una deuda con él. Era tan charlatán como un prestamista.
Raymond había pedido prestados mil millones al sistema para los gastos de oficina, comprar ropa, un teléfono móvil, un coche y una casa bastante sencilla. Hasta ahora, el hombre había conseguido lucir impecable. Mientras tanto, el millón que tenía lo había gastado en su tratamiento en el hospital.
Después de regresar del hospital, Raymond comenzó a hacer negocios abriendo un servicio. "CUALQUIER SERVICIO ES POSIBLE" era el nombre de su empresa. Los clientes podían alquilar cualquier servicio de Raymond como un hombre de compañía, incluyendo el alquiler de novias, servicios de escolta, detectives o cualquier otra cosa.
Al principio, la situación fue muy tranquila. Pero Raymond nunca pensó en rendirse con su negocio. Así pasaron los días y pronto se vio inundado de clientes, siendo la mayoría mujeres. Muchas de ellas alquilaban a Raymond como su novio ficticio, ya que querían presumir ante sus amigas que podían tener un novio tan atractivo como él.
Incluso casi fue violado por una señora mayor, quizás porque no podía resistir el encanto de Raymond, que era extremadamente guapo. Su atractivo a veces hacía que muchas mujeres perdieran la cabeza.
Parece que tener un aspecto tan impresionante a veces resulta ser un desastre para él. No podía permitir que su virginidad fuera arrebatada a la fuerza por una mujer que no le interesaba en absoluto. Solo deseaba compartir ese momento con una mujer que realmente le atrajera, y por supuesto, sería en un acto consensuado.
Como hoy, se podía ver a Raymond corriendo con todas sus fuerzas mientras era perseguido por cinco mujeres mayores.
"¡Hey, guapo, no corras!" gritó una de las señoras vestida de forma sexy, aunque su vientre se veía abultado.
Raymond corría despavorido por el pasillo del hotel, y rápidamente entró en el ascensor.
Raymond respiró aliviado al escapar finalmente de las garras de aquellas mujeres codiciosas. Casi había perdido su virginidad por culpa de ellas. Se dejó caer en el suelo del ascensor, con la respiración agitada.
...****************...
"Sistema, por favor revisa mi estado," pidió Raymond al llegar a su casa. El hombre caminaba desanimado.
[Listo, Señor.]
[Nombre Real: Raymond Sanjaya
Nombre en clave: Bara
Edad: 27 años
Estatura: 185 cm
Peso: 70 kg
Atractivo: 100
Encanto: 100
Fuerza: 0
Armas: 0
Virilidad: 100
Fondos: 0
Ingresos del servicio: 200.000.000
Deudas: 1.000.000.000
Nivel: 0]
Raymond sonrió levemente al escuchar los resultados de su trabajo tras una semana de haber iniciado su negocio. En una semana había logrado generar 200 millones, un logro nada fácil para él. Al menos era un pequeño consuelo para su rostro, que había sido maltratado tras casi ser violado por cinco mujeres de alrededor de 55 años.
"¿Y cuándo me encontraré con mis objetivos?" preguntó nuevamente a su sistema, con curiosidad.
Raymond no podía esperar para convertirse en un hombre fuerte y poderoso, para poder vengarse de Brandon y Nadia. Brandon no era un rival fácil para él. Por eso, necesitaba poder.
[Ellos vendrán por sí mismos a contratar sus servicios, Señor.]
Al entrar en la casa, Raymond se sentó en el sofá. Bebió un vaso de agua hasta terminarlo, luego se recostó en el respaldo del sofá.
El hombre encendió la televisión, buscando entretenimiento o viendo las noticias. Quizás porque vivía solo, a veces se sentía solitario.
Raymond se quedó atónito al ver las noticias sobre una famosa artista llamada Rebecca, quien había sido galardonada como la mejor artista del año. Rebecca había sido la artista idolatrada por Raymond desde siempre, hasta el punto de que había comprado su póster.
"Buenas noches a todos. No me esperaba recibir un premio de nuevo este año. Quiero agradecer infinitamente a todos mis fans que me han apoyado durante este tiempo. También agradezco a mi hermano y a mi prometido. Siempre están a mi lado."
Eso fue lo que dijo Rebecca en la pantalla de televisión. La mujer estaba en el escenario, sonriendo dulcemente mientras sostenía un trofeo en sus manos. Muchos espectadores allí aplaudían con entusiasmo.
Raymond, al sentirse parte de los fans de Rebecca, también se alegró porque ella había recibido el premio nuevamente este año.
"Mm, si Rebecca quisiera seducirme, seguramente me dejaría llevar, jeje..." bromeó Raymond hacia el sistema mientras se reía.
Cric...
Cric...
Cric...
Sin embargo, no hubo respuesta del sistema, como si Raymond estuviera hablando solo, como un loco.
Raymond suspiró, debería darse cuenta de que el sistema era como un robot. No podría tomarse en broma, y mucho menos ser su confidente. El sistema solo estaba destinado a darle misiones y recompensas.
"Mm, no eres divertido en absoluto," se quejó Raymond mientras disfrutaba de los aperitivos que había sobre la mesa.
Beep...
Beep...
Beep...
Su teléfono comenzó a sonar, resultó que había recibido un mensaje de un cliente.
(¿Eres Bara de la empresa Cualquier Servicio Es Posible? Soy Anita, quiero que actúes como mi novio esta noche. Luego te pagaré 10 millones.)
Raymond respondió rápidamente al mensaje de su cliente.
(Sí, soy Bara. Está bien, ¿dónde nos encontramos?)
Luego, la clienta respondió el mensaje de Raymond.
(En el club nocturno. Casualidad, esta noche hay una reunión. Solo yo no llevo pareja.)
Después de leer la respuesta de una clienta llamada Anita, Raymond se apresuró a agarrar las llaves del coche. Aunque todavía estaba cansado, tenía que esforzarse para conseguir dinero.
