En Los Brazos Del Magnate

*Narra Isabella*

A la mañana siguiente me despierto, hago todas mis necesidades como todos los días pero esta vez estoy muy triste y desanimada, aún no puedo creer que perdí mi virginidad de una manera tan vil, puede ser que algunas personas no le dan importancia a eso pero para mi si lo era, quería hacerlo con una persona a la cual realmente amara, pero no así, no con un desconocido que no sé ni como se llama (llora).

Me limpio las lágrimas y bajo a desayunar con mis padres.

Anabella (madre): Isabella Montero me puedes decir por qué no llegaste anoche a la casa?. (enojada).

Me quedo mirando a mi madre, quisiera decirle todo lo que me paso pero no puedo; no puedo decirle "ah mami pase la noche con un desconocido el cual no sé ni como se llama, ni su apellido y para empeorar las cosas no le vi ni la cara". No quiero mentirle a mis padres pero no puedo decirles la verdad, tengo vergüenza de mi misma, no puedo decirles, no aún.

Isabella: lo siento mamá, anoche me fui a dormir para la casa de Mady porque estaba un poco pasada de copas. - (tratando de poner una sonrisa pero lo que me sale es una mueca).

Cesar: cariño no seas tan duro con nuestra princesa, decidió quedarse en la cada de una de sus amigas porque no podía venir tomada, ya sabes que las calles están muy peligrosas y más a esas horas, míralo por la parte buena amor. (lo dice con cara comprensiva).

Anabella: Mmm bueno mirándolo por ese lado está bien que te hayas quedado, no quisiera que te pasara nada malo mi amor. - (se acerca y me da un beso en la frente).

Hay mamá si supieras todo lo que me está pasando, te dijera que dudo que me pueda pasar algo peor que esto.

Agarro mis cosas para irme al instituto, me despido de mis padres con un beso y me voy. Llegando al instituto me encuentro con mis amigas en la entrada.

Zoe: joder Isabella me tenías muy preocupada. - (abrazándome y un poco asustada).

Mady: a mi igual Isa. - (con cara de reproche).

En estos momentos estoy debatiendo conmigo misma si contarles o mentirles, ellas son mis mejores amigas saben todo de mi, dudo que me juzguen, estaba a punto de decirles pero no, mejor me quedo callada no puedo contar esto hasta que me sienta con fuerzas de hacerlo, no quiero que me tengan lástima, odio cuando pasa eso.

Isabella: si entiendo y lo siento chicas, de verdad lo siento, es solo que llegue muy tarde a casa y me fui directo a la cama por eso no les pude avisar, lo siento. (tratando de poner una mejor cara).

Mady: está bien pero no lo vuelvas hacer eso, sentí mucho miedo cuando no volviste a la mesa anoche, aunque después me despreocupe porque un chico me dijo que te tuviste que ir porque no te sentías bien, pero aun así me tenías con el Jesús en la boca a no saber nada de ti. (preocupada).

Isabella: un chico?. (subiendo una ceja en forma de interrogación).

Mady: si un chico, acaso no fue así? (cara de duda).

Isabella: ah si, si, ya me acordé, le dije a ese chico que te dijera que me iba para que pudieras estar con aquel chico llamado Alex. - (le mentí, no recuerdo a ningún chico que me haya ayudado, me estresa esto de no acordarme de ningún acontecimiento).

Isabella: bueno en fin, pero díganme como pasaron sus noches. - (tratando de poner una sonrisa).

Zoe: bueno nosotros pasamos una noche muy apasionada, primero estuvi... - (tocan el timbre para entrar a las clases).

Zoe: que mal, ya tenemos que ir a clases, les cuento en la hora de comida. (se despide y se va).

Mady: bueno hablamos en la hora de comida amiga, nos vemos. - (me da un beso en la mejilla y se va).

Me fui a mi salón de clases y así pase la mitad del día, yendo y viendo de clase en clase hasta que llegó la hora del almuerzo y las chicas y yo nos encontramos en el comedor.

Zoe: oigan chicas como le seguía diciendo antes, cuando Lucas y yo nos fuimos del club decidimos ir a un hotel a pasar una noche cálida, y pues cuando llegamos comenzamos a hablar, me dijo que su nombre completo era Lucas Rossi, que era de Italia, que era empleado de una empresa grande y bueno en fin, una cosa llegó a la otra y termine entregándome a él, fue todo muy lindo él me trato como toda una princesa, nadie me había tratado así antes, aunque lastimosamente toda la magia acabó al día siguiente cuando el muy estúpido me dejo en la habitación del hotel sola. - (enojada).

Mady: ay amiga mía, que experiencia la tuya.

Zoe: si ya lo sé, la peor, aunque no fue tan mala, por un lado. (poniendo cara pícara).

Isabella: y tu Mady como la pasaste?. (con cara triste y desanimada).

Zoe: isa que te pasa porque estás así de triste. - (preocupada).

Mady: es cierto, te noto triste. - (preocupada).

Isabella: no pasa nada chicas, de verdad. (tratando de poner una sonrisa).

Zoe: segura?

Isabella: si muy segura, tranquilas. (les doy una sonrisa).

Mady: está bien pero sabes que puedes contar con nosotras para lo que sea, lo sabes verdad nena. - (agarrándome las manos de manera comprensiva).

Isabella: claro que lo sé, no sé preocupen, pero ahora dime tengo muchas ganas de saber que pasó contigo y con el tal Alex. - (poniendo una sonrisa para disimular). - (Mady no muy convencida nos sigue contando).

Mady: bueno mi noche con Alex fue mágica, nosotros también hablamos de todo un poco, hablamos de nuestras vidas y todo eso, ya luego las cosas cambiaron a otra escena, una escena donde nos complacimos, todo era salvaje y excitante, bueno en resumidas cuentas mi noche fue genial, al otro día me dijo que se tenía que ir porque no vivía en este país, (mira a Zoe) y que casualidad, él también era Italiano.

Isabella: wow mis dos amigas disfrutaron sus noches al máximo jeje. - (sonrisa ladina).

*tocaron el timbre ahí mismo para entrar a clases y así lo hicimos, nos despedimos y cada quien se fue para su salón*

Ya es hora de salida para irnos y yo aprovecho para ir al baño. Cuando estaba terminando de lavarme las manos entra Vanessa.

Vanessa: hola querida cómo estás?. - (con cierto doble sentido).

Isabella: no es algo que te incumbe. - (secándome las manos).

Vanessa: (ignora lo que le digo y me dice al oido). - te gusto mi sorpresa Isabelita. (con una sonrisa en la cara).

No entiendo lo que me está diciendo Vanessa.

Isabella: no entiendo, que sorpresa Vanessa. (yo sigo incrédula y Vanessa sigue con una sonrisa de malicia).

En ese momento me llega a la mente todo lo de anoche.

Isabella: tuuu, tú tuviste que ver con algo de lo que me paso anoche, cierto?. (le digo sorprendida y exaltada).

Vanessa: que crees chiquita?. - (con una sonrisa me lo dice).

Isabella: eres una desgraciada Vanessa, como me pudiste hacer eso, por que ?. (llorando).

Vanessa: simple, por rencor, les tengo odio a ti y a las estúpidas de tus amigas que siempre me hacen quedar mal (exaltada y luego se calma y se arregla el pelo), pero míralo por el lado bueno isabelita, mi plan desde un principio era el día de tu cumpleaños ponerte afrodisíaco y luego llevarte a una habitación de hotel para que te entregaras a un viejo, pero lástima que no me salió así, al imbécil al que le pagué te dejo en una habitación equivocada y para tu mala suerte no sé con quién pasaste la noche querida (riéndose como desquiciada).

Isabella: sabes que?, púdrete Vanessa, vete a la mierda, eres una porquería de persona, ojalá la vida te cobre muy caro lo que me hiciste. (me voy llorando mientras la oigo reír).

Salí del instituto, llegue a mi casa y de una vez subí a mi cuarto, no me despedí de mis amigas porque no me sentía bien para hacerlo, estoy muy triste y frustrada, me duele el no saber con quién pase la noche.