Un Sinvergüenza En Redención

Los nervios de Milena estaban a flor de piel, cada segundo que pasaba se ponía más y más aprensiva, realmente necesita este trabajo, pero ver a las mujeres irse así la dejó un poco angustiada y también un poco desmotivada, “si no funciona, es Está bien hoy, será mañana, lo que no puedo hacer es rendirme”, pensó Milena mientras intentaba mantener la calma.

Como 10 minutos después finalmente fue el turno de Milena, muy nerviosa, entró a la sala de entrevistas y luego se sentó frente al entrevistador y esperó a que él hablara primero y así lo hizo.

—Hola señorita Milena Santos, soy Rony y le voy a hacer unas preguntas, ¿vale?

—Está bien, señor Ron, puede empezar – respondió Milena seriamente mientras se acomodaba en la silla.

Sin decir una palabra, Ron hizo un gesto pidiendo los documentos de Milena, ella se los entregó y observó el comportamiento del hombre.

Fue extraño, pero ambos se miraron de una manera muy profunda, cualquiera que los viera de lejos podría pensar que estaban coqueteando, pero en realidad Milena quería entender qué pasaba allí, por lo que los demás candidatos prácticamente salieron corriendo, y Ron quería sondear a esa hermosa joven, realmente necesita encontrarle una esposa a David, no solo porque él se lo pidió, sino porque David realmente necesita compañía femenina, quién sabe, tal vez se convierta en un hombre menos amargado.

Después de fingir estar analizando el CV de Milena, le hizo varias preguntas sobre el trabajo, su experiencia en el área y otras cosas, luego de unos minutos de hablar, Rony tosió levemente y dijo:

—Sé que postulaste para el puesto de secretaria, pero lo que tengo para ofrecerte hoy va mucho más allá de eso, también hay un contrato matrimonial, ¿estás soltera?

Al escuchar esas palabras, Milena no supo qué decir y solo pudo asentir positivamente, por lo que Ron sonrió y comenzó a explicarle cómo funciona todo.

—Bueno, el contrato dura 5 años, es como un matrimonio falso, donde puede haber besos y declaraciones de amor en público, pero en casa duermes en camas separadas y solo serás un empleado del hogar, el costo es un millón de dólares, además del salario de la secretaria", dijo Ron mientras sacaba un montón de papeles del cajón.

Aunque lo encontró muy extraño e incluso bizarro, Milena pronto se unió a la diversión.

—Entiendo, háblame de valores-habló de repente, casi haciendo caer a Ron de su silla, seguramente pensando que Milena está loca, porque ni siquiera quería saber ningún dato sobre su prometido. Y si fuera un anciano, ¿Milena todavía estaría tan interesada?

—Eres muy apresurada – dijo, haciendo que Milena se sintiera un poco avergonzada, pero al minuto siguiente todo se disipó, al recordar por qué aceptó tal locura.

—Lo soy, las circunstancias lo ameritan.

—Entiendo, bueno, el novio es el señor David Miller y las reglas y valores son estos aquí—Ron dijo el nombre de David en un tono más fuerte, sinceramente Milena tuvo ganas de decir que no era sorda, pero al final ella No dijo nada, de hecho ni siquiera conoce a este hombre.

Sin decir una palabra, Milena tomó los papeles y comenzó a leer las reglas del contrato, le costaba controlar su risa, al ver eso, Ron estaba en agonía y planeaba preguntar qué estaba pasando, pero en ese momento, Milena se acomodó. ella misma en su asiento y dijo:

—Tal vez no leíste esto correctamente, así que te lo leeré.

REGLAS DEL CONTRATO:

*El contratista deberá trabajar en la empresa como secretaria y nadie debe conocer nuestro estatus.

*En casa no somos más que jefe y empleado, quiero que alguien me cuide en todo momento del día, incluso a la hora del baño.

*El contratista siempre debe tratarme bien, especialmente delante de mi padre.

*En mi ausencia, el contratista debe ser grosero con mi padre.

*La contratista debe correr con sus propios gastos, incluido el pago de su estadía, y debe comer siempre poco, quiero esposa y no cerda de matadero.

*El contratista debe acompañarme a los eventos, previa invitación y no está autorizado a reclamar nada, no puede besarme y tampoco serás besado.

*El contratista no está autorizado a hablar de la existencia de este contrato, de lo contrario se considerará incumplimiento de contrato y deberá pagar el 500% del importe ya recibido.

*Tendremos sexo ocasionalmente, siempre a oscuras, sin besos ni palabras cariñosas, es tu obligación satisfacerme.

*El contratista deberá estar siempre a disposición del contratista.

*El contratista podrá solicitar la cancelación del contrato tan pronto como lo considere necesario.

*Si hay adulterio, el contratista perderá todo el dinero ganado y además quedará expuesto ante la sociedad.

Después de escuchar atentamente las palabras de Milena, Ron dejó escapar un gran suspiro y finalmente encontró el error y se apresuró a intentar solucionarlo.

—Dije que se quedarían en habitaciones separadas, porque conozco a mi jefe y a él no le gustan mucho estas cosas – dijo las últimas palabras prácticamente en un susurro, pues sabía muy bien que a pesar de que David no estaba , estaba observando todo desde su oficina, por lo que no podía permitirse el lujo de enojar a su jefe.

David ciertamente no lo escuchó, pero Milena sí, en ese momento la joven dejó escapar un largo suspiro y dijo:

—Ya estaba en agonía solo de pensar que tendría que acostarme con tu jefe, según las reglas y tus palabras, entendí todo, este David debe ser gay y necesita una esposa con velo para camuflar su verdadero yo – dijo Milena sonriendo, Pero el pobre Ron estaba a punto de llorar, imaginando que el final está cerca, a David no le gustará escuchar eso.

“¿Es mejor si me pongo frente a un auto ahora o espero a que me arrojen desde el piso cincuenta?”, reflexionó Ron mentalmente mientras miraba a esa mujer estúpida frente a él, David Miller no es un tipo muy agradable.