Diana es la hija de un famoso diseñador de moda, ella vive en una lujosa mansión en Italia. Al cumplir los 16 su padre muere de cáncer.
Ella pasa a vivir sólo con su madre, quién no la quiere, pero Diana no se va dejar ni de ella ni de nadie. Su padre la enseño a ser una persona fuerte y valiente, aunque esa fortaleza y esa valentía la llevarán a meterse en la venganza de dos magnates. Y a estar "ENTRÉ DOS MAGNATES".
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Promesa
1 semana después.
P: hija, ya no me queda mucho tiempo, quiero pedirte algo antes de morir.
-- Pídeme lo que sea papá, seré obediente.
P: te conozco perfectamente, pero aún así quiero que me prometas que nunca te vas a dejar humillar por nadie.
-- Te lo prometo padre.
P: promete que vas a ser una gran diseñadora, que serás mejor que yo.
-- No creo poder ser mejor que tú pero te prometo que lo intentaré.
No había un costal para golpear así que no pude evitar que las las lágrimas.
M: promete que llegarás virgen al matrimonio.
-- ¿Queeeeeeeeeee?. _
-- Papá la enfermedad te está afectando demasiado.
M: por favor hija, promete.
-- Papá yo quiero disfrutar mi vida, muchas chicas dicen que hacer el amor es algo delicioso y quiero experimentarlo joven.
P: hija. _ Sonó como un regaño.
-- Papá.
P: tu madre es una promiscua yo no quiero que tú seas como ella.
-- Ya vez ella disfrutó su vida sexual y a mi no me quieres dejar disfrutarla. _ Me hice la ofendida.
P: Diana Greco. _ Ahora si lo hice enojar.
-- Papá, ¿acaso mi mamá fue la primera mujer de tu vida?, seguro que por tu cama ya habían pasado unas 20 antes que ella.
P: hija no me juzgues.
-- Papá, ningún hombre llega virgen al matrimonio, ellos no merecen que las mujeres lleguemos así.
P: te diré algo que leí en un libro, "si se quiere aprender a manejar son preferibles los autos usados, pero si se escoge un automóvil para toda la vida hasta el más idiota elige uno nuevo".
-- No entiendo de que hablas.
P: un hombre busca placer con mujeres promiscuas, las seduce y se acuesta con ellas pero nunca pensando que podrán formar una familia, sin embargo cuando busca a la madre de sus hijos quiere una buena mujer, alguien sin experiencia, un diamante difícil de conseguir. tu esposo se va a sentir afortunado si sabe que es el primero.
-- ¿Y eso a mí que?
P: por favor hija, tu eres lo más preciado para mí, lo único que quiero es que el hombre que sea tu esposo te valore, te cuide y se sienta dichoso de haber encontrado una mujer como tú.
-- ¿Y si no me casó?, ¿piensas que voy a morir virgen?
P: estoy seguro de que te vas a casar, eres una niña hermosa y de grande seguro que lo serás más.
Seguí negandome a esa petición pero el insistió tanto y estaba tan mal que al final lo prometí. Crucé los dedos detrás de mi espalda pero el me obligó a poner mis manos enfrente y prometerlo otra vez, todas y cada una de las promesas que le hice a lo largo de 16 años las cumplí y está no sería la excepción aunque sigo pensando que es una estupidez conservarme para un hombre que quizás no me valore.
Después de hacerle esas promesas, me dió una cajita.
P: diseñe esto para tí, elegí algo discreto para que nadie intenté robarlo, este es mi último regalo, te amo hija. _ Me puso un collar con un pequeño diamante, me dió un beso en la frente y después cerró los ojos, supe de inmediato lo que había pasado.
Me dejó sola en este mundo. Quería llorar y no me contuve, el es mi padre, el hombre que siempre será el dueño de mi corazón.
