En Medio De Todo

P.v. Íker

El trabajo se me ha acumulado, estoy en tres diseños, ninguno tiene que ver con el otro.

He terminado los bosquejos, estoy seguro que los concluire en el tiempo estipulado.

Los proyectos son: Moto doble propósito, de carreras y motocross, tractocamión y un auto especial para empresarios, debó diseñar el blindaje, armas y tecnología, sin dudas es mi proyecto favorito, pero he descuidado mucho a Marla, he cancelado en demasiadas ocasiones y el poco tiempo que me queda lo utilizo para dormir.

Lo único bueno fue, que lo realizo en el área de diseño, en mi empresa lo cual me facilita todo.

Claro debo de firmar un contrato de confidencialidad para que no tenga problema.

* * *

Trabaja en los últimos detalles de su coche, lo interrumpe un toque en la puerta.

--Adelante, pase.

Sabe que es su secretaria, una linda joven con cabello negro, buen cuerpo. Su lindo rostro lo esconde, con unos enormes lentes.

-- ¿Qué tiene para mí Vicky?

Cuestiona sin apartar la mirada de su computadora, revisa lo que ya ha diseñando; una cámara de visión nocturna adaptada netamente al parabrisas, ventanillas y medallon.

Monitor sensores de aparcamiento, flujo vial. Diversos compartimentos para guardar documentos, armas, alimentos.

En este diseño debe presentar varias opciones.

Un carraspeo le recuerda que, su asistente sigue ahí.

Disculpe CEO, tiene una visita del dueño del auto, lo esta esperando en la sala de juntas, pide unos minutos de su tiempo.

-- Dile que en unos momentos voy, ofrécele algo de tomar.

La asistente sale cumplir con lo que le ordenaron.

Íker va al vestidor aculto, arregla su corbata, acomoda su pelo, se dirige a su silla, a su paso descuelga su saco poniéndoselo.

Con un paso firme sale directo al lugar donde será su reunión.

El eco de sus pisadas llama la atención, su cliente se encuentra acompañado de una despampanante rubia que conoce bien.

Observa a las las dos personas, intentando descifrar porqué están ahí.

La chica corre hacia él y lo besa inesperadamente, él se aparta con sutileza.

--Jazmín ¿Qué haces? Se sonroja, apenada.

-- Por mí no te preocupes.

-Afirma Nikels, el dueño de la ensambladora de autos_. Ella es la dueña en realidad, como sabes por ser la hija del senador Curtis, nadie puede saber qué es la propietaria.

Toman asiento.

-- Verás amor, sabes seré tu coodiseñadora, de hecho solo me encargaré de el diseño de la pintura exterior. No intervendré en nada más. Por cierto mi papá pide verte este fin de semana, te manda decir que esta vez no hay excusa, no puedes seguir dando largas cariño. _Se pone de pie y lo abraza por espalda diciéndole al oído_. Basta de juguetear bebé sabes que eres mío, que tienes un compromiso. _Lo suelta y regresa nuevamente a su asiento al lado de Nikels_. El sábado a las 4 comemos con mis papás. Por cierto los tuyos ya están avisados y confirmaron su asistencia.

El diseño exterior del auto ya está aprobado en cuanto lo termines el ensamblaje lo pintaré.

Nos retiramos cariño sabemos que tienes mucho trabajo.

Se pone de pie el señor Nikels estrecha su mano y los deja solos.

La rubia se pone frente a él, rodea con sus brazos el cuello besándolo con pasión, al sentir que no es correspondida lo suelta.

-- Disculpa, sé que estás en el trabajo, nos vemos el sábado.

Le manda un beso al aire, con un andar muy sexy se retira.

Íker se sienta, frustrado remueve su pelo.

Regresa en su oficina termina de dar los últimos toques a su diseño y sale rápidamente.

Transita distraído por las calles, por inercia llega hasta el edificio de Marla.

Baja rápidamente corriendo, sube hasta su oficina, cruza entre los escritorios al estar frente a su novia la abraza con mucha fuerza dándole un beso a la frente mientras le acaricia el pelo.

-- ¡Te he extrañado mucho! Discúlpame, tengo demasiado trabajo.

-- No te preocupes. Te entiendo.

-- ¡Vámonos!

Con excesiva dulsura besa su mano, llevándola con él, a su paso toma su bolso y salen.

-- Adiós tortolos, no te preocupes Marley nosotros nos encargamos.

Los tres socios ríen, siguen con sus labores . Aún falta un par de horas para terminar la jornada.

Se apresura hasta su auto y le abre la puerta al sentarse le da un beso cargado de pasión, lujuria y miedo a la vez.

Marla le pregunta asustada:

-- ¿Pasa algo?

No nada contesta cierra la puerta y rodea el auto para subir el.

Comienza el recorrido en silencio de vez en cuando le toma la mano y lo besa con suavidad.

Su corazón palpita como un caballo desbocado, suspirós salen de el con regularidad sus manos sudorosas lo ponen más en evidencia.

Se cruza de brazos, gira su cuerpo para observarlo con más calma, en silencio.

El avance del auto es detenido por el cruce del tren. El peso de los vagones hacen crujir las vías que rechinan incipientes.

-- ¿Me vas a decir qué sucede?

-- Nada. Solo estoy ansioso. Hace muchos días que no nos vemos y me siento mal.

Contesta sin mirarla a los ojos, sabe que miente, debe calmarse, respirar lento, sonríe y vuelve a besar su mano.

El último vagón del tren se aleja silbando, continúa su viaje.

Llegan un edificio y se estacionan le abre la puerta.

La toma de la mano, dirigiéndose al ascensor, en silencio, marcando el piso 10 al abrirse la puerta van al departamento 1008 que está en el fondo.

Abre con calma y le invita a pasar primero.

-- Este es mi departamento, es hora que lo conozcas. Siempre estoy en el tuyo. Ponte cómoda.

_Le extiende la mano_ Pediré un delivery, tengo hambre.

-- ¿El sanitario?

le indica con el índice.

Hace el pedido por teléfono, antes de que Marla salga acomoda los platos en la isla del comedor, saca unas sodas de lata y toma asiento para esperarla.

Una lágrima traicionera, se escapa de sus bellos ojos.

-- ¡Cálmate Íker! Se dice, mientras la limpia. Destapa la gaseosa y le toma, respirando profundamente, en silencio.

Mala se observa en el espejo acomodando su pelo.

Está nerviosa, todo es muy confuso.

El ruido del timbre la asusta, regresando de sus cavilaciones, abandona el lugar.

Íker recibe la comida y la pone en la mesa.

Al mirarla le dice: -- Ven, comamos.

Destapa la caja de comida y sirve. Abre su lata y comen en silencio.

Marla lo observa con curiosidad.

Al terminar la lleva a la sala de la mano

-- ¡Te he extrañado tanto!

¿Me quieres?

Marla se recarga en su pecho expectante.

-- ¡Mucho!_ Le contesta, lo mira con ternura.

Se unen en un beso, con el paso de los segundos se hace más demandante. Las manos de Íker recorren el delicado cuerpo, pasa por los senos que se le han endurecido.

Se recarga sobre ella, besa su cuello. Se separa, mirándola directamente a los ojos, en espera del permiso de continuar, Marla asiente con la cabeza, su respiracion entrecortada.

Se recarga sobre ella, besando su cuello, su mano se desliza bajo la blusa acariciando con suavidad su piel, estimula su pezón con una mano y con la otra delínea su redondo trasero.

El ruido de los besos y gemidos inunda lugar.

Marla siente un calor que recorre su cuerpo, corta su respiración, nubla su juicio. Sin dudar, se llevar por las caricias que le excitan cada vez más. Con habilidad Íker desliza la su blusa desabrocha su pantalón. Sus dedos carician la piel acalorada, siente como se le ha erizado. Suspira ansioso.

Se levanta con ella, la abraza enrolla las piernas a su cintura. Va a su cama, sin dejar de besarse, la recuesta con suavidad. Retira poco a poco la ropa faltante de su novia, entre besos intensos, él también se desnuda.

Besa cada centímetro de su piel, en el recorrido se le escapan gemidos susurrantes de la melodia escrita solo para ellos. Mordisquea el cuello con suavidad, con la intensidad de un licantropo marcando a su mate. Desiende al valle se sus senos, succiona los pezones, con el dedo pulgar acariciar clítoris, siente el nerviosismo en ella, pero continúa, lo estimula con su boca succionándolo, con cierta timidez cierra las piernas, incorporandose con movimientos lobunos, la jala a la orilla y se arrodilla, decidido a darle placer con su boca

La humedad acumulada se hace notar, el movimiento se intensifica hasta hacerla vibrar, el primer orgasmo de su vida es robado.

Él simplemente saborea el triunfo de su labor.

Se pone de pie nuevamente y sube en ella, succiona sus senos alternadamente, la erección es frotada en la zona húmeda, los dos llegan a la cúspide carnal al mismo tiempo. El líquido blanquecino cae sobre el vientre de Marla, da fe que el placer fue muto.

Con la respiración entrecortada afirma con imperiosa ternura:

--¡Te amo! Marla, eres lo mejor de mi vida.

Un silencio los invade.

Los pensamientos de Marla revolotean en todas direcciones, incrédula, feliz, emocionada por lo que acaba de pasar, pero dudosa de ¿Por qué no la penetró?

--!Te amo¡ Íker.

Responde, su respiración sigue agitada.

Decide no preguntar nada, solo lo abraza y ambos se quedan dormidos sonríendo.

Casi a media noche, Marla se despierta.

Observa al dios griego con el cual compartio tan fantástico momento, su cuerpo desnudo descubierto, la sabana cubre una pequeña parte de su bien dotado amigo, sus mejillas se tiñen de carmesí, Roba un beso suave.

Se levanta con mucho cuidado, aseándose.

Íker esta profundamente dormido consecuencia del cansancio de trabajar tantos días sin descansar.

Le escribe una nota y sale del departamento.

Pide un taxi en camino a su departamento revive las sensaciones vividas al millón, da gracias con una enorme sonrisa de satisfacción.