Cuando Te Perdí

Pablo ofreció llevar a Milagros hasta su casa y una vez ella entró a su casa él salió para la suya

Al llegar a la casa donde vive con Camila entra dando un portazo y haciendola asustar a ella que salto del sofá por el golpe

– que sucede por qué entras así? – pregunta confundida Camila

– ya se toda la verdad, Milagros volvió, como pudiste ? – pregunta enojado

– de que hablas ? no te estoy entendiendo – pregunta ella aún más confundida

– ya se toda la verdad Camila no intentes verme la cara de idiota, como pudiste ser capaz de amenazarla para que me dejara? – le grita él – vos sabías que yo la amaba, me viste caer en depresión, por qué lo hiciste ?

– de que rayos estás hablando? yo jamás la amenace a ella, ni siquiera estuve enterada de que se fue hasta que tú me dijiste – dice ella defendiendose

– eres una maldita mentirosa, pero sabes qué? tu farsa se acabó, pagarás por lo que le has hecho a Milagros – gritó enojado Pablo

– Ella te está mintiendo Pablo, yo no le he hecho nada – responde con lágrimas Camila

– Ella ya me ha dicho la verdad del porque se fue, de lo que le has dicho para que me dejara, jamás te lo perdonaré, hare de tu vida una miseria, sufrirás por todo lo que ella ha sufrido y por cada lágrima que le has hecho derramar – contesto furioso Pablo agarrándola del brazo con fuerza

– Pablo escúchame, te juro que es todo mentira, ella se fue sola porque quiso, yo jamás le he dicho y hecho nada para que te dejara, debes creerme Pablo, jamás te mentiría, yo te amo, toda mi vida te amé y jamás haría nada que te perjudicaría – le rogaba Camila para que él le creyera

– CÁLLATE – le grita dándole una bofetada y haciéndola caer al piso – eres una maldita hipócrita, ella estaba embarazada Camila y lo perdió por tú culpa. Por qué ? por qué lo has hecho? – le dice mirándola con desprecio

– Pablo ... – dice llorando pero Pablo la interrumpe

– Pagarás por haberme arruinado la vida – le dice saliendo de la casa y dejándola en el piso en un mar de lágrimas

Camila se quedó en el piso hecha un ovillo llorando a mares por todo lo que le ha dicho Pablo

Comenzó a toser y a toser sin parar mientras despedía sangre por la boca, ella tomó su teléfono y solo marco el número 1 y cayó inconsciente

La persona del otro lado del teléfono al recibir su llamada salió de prisa hasta la casa de Camila, si ella lo estaba llamando es porque era grave

Cuando Fabián llegó a la casa de Camila golpeó un par de veces y al no recibir respuesta entró a la casa encontrándose a Camila tirada en el piso inconsciente y con mucha sangre al rededor de su cara, la tomó en brazos y la acostó sobre el sofá, fue al baño a buscar el botiquín de primeros auxilios y mojó un pedazo de algodón con alcohol y se lo paso por la nariz a Camila hasta que está reaccionó

– que ocurrió Cam? – pregunta preocupado Fabián y es en ese momento que nota la marca en la cara de ella – que es ese golpe en la mejilla? fue Pablo? él te levantó la mano? – preguntó enojado

– Milagros volvió – dice ella comenzando a llorar de nuevo recordando la discusión que tuvo con Pablo – ella le dijo muchas mentiras a Pablo, le dijo que yo la amenace para que se vaya y lo dejara y que por mi culpa perdió al bebé y él le creyó Fabi, él le creyó – dice abrazándolo mientras llora

– Camila en tu estado no puedes pasar nervios, debes estar tranquila y si él te levanto la mano una vez te lo va a volver a hacer – dice él preocupado – debes pensar en ti y en el bebé, ven conmigo, en mi casa estarás a salvó

– no Fabián no puedo solo irme y dejar todo así, tengo que hacerle ver a él que ella le mintió – le dice ella decidida

– Cam temo por ti y por el bebé – dice preocupado

– él no me lastimaría Fabi, hoy fue un impulso, no lo volverá a ser, estoy segura – dice ella confiada

– bueno cualquier cosa me llamas y yo vengo enseguida por ti de acuerdo? – le dice él despidiéndose de ella

Fabián salió de la casa y Camila volvió a quedar sola comenzando a llorar de vuelta por todo lo que había pasado

Ese día lo esperó todo el día y Pablo nunca llegó a la casa, de tanto esperar Camila se terminó quedando dormida en el sofá

Al día siguiente Camila se despierta sobresaltada y ve que aún está en el sofá, se levanta y sube corriendo las escaleras con la esperanza de ver a Pablo en la habitación, pero al entrar esta está vacía

Una tristeza profunda la invadió se sentó en la cama y se puso a pensar en todo lo que le estaba pasando, parecía a propósito, primero el cáncer y ahora Pablo, pero no podía solo echarse a llorar, hoy tenía turno con la obstetra y debía presentarse, así que entró al baño, se ducho, se maquillo el golpe de la cara y salió para la clínica

Al llegar se dirigió a maternidad y dio aviso a la secretaria de que ella ya estaba y se sentó a esperar a que la llamarán

Unos minutos después la doctora la llamó y ella entró al consultorio

– buenos días señora Olivera, dígame cómo puedo ayudarla – dice la doctora Yasemin

– buenos días doctora, vera, el lunes me enteré que estoy embarazada – dice Camila

– ok quieres saber de cuántas semanas estás ? – pregunta la doctora

– si doctora y además debo decirle algo más – dice Camila suspirando – ayer me enteré que tengo cáncer pulmonar, mi médico me dijo que después del segundo trimestre del embarazo tenía que comenzar con las quimioterapias y a los 7 meses de embarazo hacer una cesárea para poder operarme el tumor de los pulmones, dígame doctora que me recomienda usted porque yo estoy demasiado asustada – dice Camila con mucha angustia

– bueno eso que me dices es una gran complicación, pero hablaré con tu médico y trataremos de llevar el embarazo y el cáncer con cuidado sin dañarte a ti ni al bebé – dice la doctora – ahora acuéstate en la camilla ahí y levanta tu blusa

Camila se acostó e hizo lo que la doctora le dijo, la doctora le puso un gel frío y comenzó a pasar el ecografo por su vientre

– bien Camila, efectivamente estás embarazada de 7 semanas – le dice la doctora – ves ese punto de ahí ? ese es tu bebé y eso que estás escuchando es su corazón

Camila lloraba al ver la pantalla y sentir los latidos del corazón de su bebé, no podía creer que el momento más hermoso de su vida todo se le este desmoronando

La doctora le recetó unas pastillas y le indicó los cuidados que debe tener de ahora en adelante y después se despidieron

Camila salió de la clínica, condujo hasta una farmacia para comprar las pastillas que la doctora le había recetado y volvió a su casa

Al llegar no había rastros de que Pablo haya ido, miró el teléfono y tampoco había llamadas o mensajes de él así que suspiró de tristeza y se acostó en el sofá

Cerca del medio día se levantó a preparar el almuerzo, ella aún tenía la esperanza de que Pablo llegara a almorzar con ella

Una vez listo preparó la mesa y se sentó a esperar a que Pablo llegara, pero él jamás llegó

Camila lo esperó hasta las 2 de la tarde y al ver que ya no iba a llegar tiró toda la comida a la basura y se acostó en el sofá a llorar

Lloró por bastante tiempo hasta que el cansancio la venció y se terminó durmiendo

Se despertó sobresaltada y ya era de noche, mira el teléfono y marcaban las 21hs, se levantó y fue a la habitación a ver si Pablo había llegado, pero nuevamente está estaba vacía, tomó su teléfono y lo llamó pero éste le cortaba las llamadas, se acostó en la cama y abrazo la almohada con tristeza y nuevamente se quedó dormida

A la mañana siguiente, sin ánimos se levantó y bajó a desayunar, aunque no tenía hambre debía comer por el bebé pero lo poco que ingirió lo vomitó

Llamó nuevamente a Pablo, pero este le seguía rechazando las llamadas

– lo siento bebé, se que sientes todas mis emociones, pero es inevitable, tu padre me falló una vez más – decía Camila acariciando su vientre plano

Camila se sentía deprimida, la única buena noticia y por la cual debía estar feliz se veía opacada por las otras dos, el cáncer y el rechazo de Pablo

Ese día Camila se la paso encerrada aún con la esperanza de que Pablo fuera aunque sea a buscar ropa pero él jamás llegó

Ella sabía que debía permanecer tranquila por el embarazo, pero la depresión por todo lo que estaba pasando le estaba jugando malo

Sin contar que durante todo el fin de semana estuvo con mucha fiebre aunque trataba de bajarla con duchas de agua tibias a las pocas horas le volvía a levantar, el domingo a la tarde no le quedó de otra que llamar a Fabián

– Camila ni bien te levanté fiebre debes llamarme, no puedes permanecer con la fiebre mucho tiempo porque puede ser malo para el bebé – la reprendió Fabián

– lo siento, es que no quiero estar tomando medicamentos justamente por él – le contesta ella

– si, pero en tu caso es peligroso, debes llamarme de inmediato – le vuelve a decir él

– de acuerdo, la próxima vez te llamaré, lo prometo – le dice ella

– Pablo no ha vuelto? – preguntó él

– no, lo he esperado todos estos días pero sigue sin venir y sin contestarme las llamadas – le responde ella con tristeza

– sabes que cuentas conmigo para lo que sea ok ? – le recuerda él

– lo sé Fabi, muchas gracias por estar siempre – le agradece ella – y pensar que cuando me dijiste que estudiarías medicina, yo te bromeaba diciendo que serías mi médico y mírame ahora, realmente eres mi médico – recuerda ella

– aunque no era como lo imaginaba, pero igual me da mucho gusto ser yo tu médico y tu apoyo en este momento – le responde él

Después de un rato conversando Fabián se despidió de ella y se fue y Camila se acostó a dormir, ya se sentía mejor después de la inyección que él le había puesto para bajar la fiebre .....