¡¡Estoy Harta!!

Volvía a alimentar a los niños ,aún estaba sola y la enfermera la miraba preocupada .

—¿Usted no tiene intenciones de dar a estas bendiciones en adopción o si??.— tal vez el tener dos bebés sola y ver lo que hizo la chica le contagiara la desesperación aún conociendo a sus pequeños.

—Mi hija jamás daría en adopción a un hijo suyo.

Aunque no tuviera lo que comer , sacaría adelante a sus hijos a cualquier precio.

Y si por acaso se le ocurriera lo contrario yo mismo me encargaría de quitárselos y criarlos.

Son los valores que le enseñé, respeto, confianza y sobre todo ,no perdonar las traiciones.— intervenía doña Alma provocando el asombro de Eli.

— Mamá...— estaba emocionada con esas palabras de su progenitora.

— Yo me encargo de mis nietos.

Tengo que mal criarlos,para eso son los abuelos.— se disponía a colaborarle en lo que fuera.

— Entonces las dejo.

Tienes una familia hermosa,no necesitas de ningún hombre para salir adelante.— sentía que tenía todo el apoyo de sus padres.

— Gracias enfermera.— le agradecía la ayuda recibida mientras estaba sola,incluso sus palabras.

— Llamame y vengo enseguida ,si me necesitas claro.— después se retiró para dejarlas a voluntad.

— Mamá..— aún no creía que estaba allí.

— Me dijo la otra enfermera que ya les diste de mamar y sigues haciéndolo.

Eso es bueno Eli,no tendrás que levantarte a preparar biberones en medio de la noche.

Los niños crecen mejor con la leche de su mamá.

¿A ver como te llamas tu??.— buscaba los nombres de sus nietos en las pulseras.

— No les puse nombres aún , solo bebé 1 y dos.— Eli sentía alivio de tenerla allí a su lado.

— ¿Porque Eli?,¡pobres angelitos!.— le reclamaba.

— Siempre hablamos de los nombres de mis hijos ,jugando.

 ¿Lo recuerdas??.— habían hecho un pacto de elegirlo juntas cuando llegara el momento.

— ¿Eustaquio??..¡¡ ni pensar!!..— era uno de los nombres con los cuales bromeaba más todo el tiempo.

— Jajaja jajaja no mamá, pero siempre quise que me ayudaras con eso.— se abrazaron sellando la paz entre ellas.

— Dime la verdad Eli,sabes quien es el papá ,¿¿no??.

Quiero que tengas la confianza de decírmelo.

No soy tu papá, te conozco.— le acomodaba el cabello y besaba a sus nietos.

— Lo sé, pero no quería dar explicaciones, no es Daniel,no te preocupes. — sabía que eso sería algo que le molestaría demasiado.

— ¡¡Gracias a Dios!!.— hacia una señal de la cruz en agradecimiento.

— Se llama Osman Yilmaz, era mi antiguo jefe.— no quería esconderle más nada.

— ¿¿Tu jefe Eli??.

Pero es un hombre casado con familia, además un poco mayor me parece. — recordaba que trabajaba para un turco.

— No ...,ese es don Abdul mamá, Osman creo que es su sobrino.

El vino a hacerse cargo de todo, cuando su tío se regresó a su país.

Y bueno ,yo no sabía quién era.

Lo conocí en el vuelo de regreso de España.

Me robé uno de sus asientos en primera clase del avión.

Estaba totalmente ebria.— sonreía recordando el momento.

— ¿En el avión Eli?, ¡¡que descaro por dios!!.— pensaba que había tenido sexo en pleno vuelo.

— No hice esos angelitos en un avión a la vista de todos, no soy tan libertina como para buscar platea.— le aclaraba a su madre que habia entendido todo mal.

— Casi me da algo.— se tomaba el pecho doña Alma imaginándose a su hija deshinibida por el alcohol.

— Jajaja jajaja, ¿recuerdas a Adriana??.

La chica con la que vivía, la que vino a verme con su novia.— le preguntaba.

— Si claro,en algun momento le comenté a tu papá que me parecía que estaba enamorada de ti.— esa era su percepción al ver como la trataba.

— Sí...bueno quizas si lo estuvo en algún momento, pero jamás se me insinuó, solo me cuidaba, estaba muy herida con la traición de Gustavo.

Siempre me recalcaba que no debía entregarme demasiado, que los hombres no valoran a las mujeres pegajosas.

Un año después ahi estaba nuevamente entregando mi corazón a alguien más.

A ella tampoco le agradaba Daniel y me fui a vivir con el.

Nos distanciamos ,pero cuando rompi con el ,le pedí ayuda .

Me ayudó a encontrar un lugar donde vivir.

También queria que me divirtiera y me olvidara de esa otra decepción.

Asi que me invitó a acompañarla a su trabajo

Ella prepara tragos en una disco muy requisitada y Melissa su novia pone la música en ese lugar.

Me volví a encontrar con Osman , bailamos, conversamos,nos divertimos haciendonos bromas , hasta que apareció Daniel con la chica con la que me puso los cuernos en el viaje .

Me acusaba de haberlo abandonado en España con la cuenta del hotel, de los muebles que saqué de departamento, de todo.

Me ayudó a deshacerme de ese tarado mal nacido y una cosa llevo a la otra .

Terminé pasando la noche con Osman en el hotel donde se alojaba.

Después me fui,a mi casa ,pero tuve problemas con mi nueva compañera de habitación.

Me vacío la heladera con la feria de la semana, digamos que tenía dos chicos con los que compartía cama.

Se que piensas que soy pu** y tal vez lo soy.

Pero esa chica me ganó en todos los sentidos.— se atajaba.

— No creo que seas una pu**, solo que no fue eso lo que quise siempre para ti.

Conocí a tu padre y me casé con el.

Lo tuve solo a él como hombre y soy feliz con eso.

¿El tal Osman sabe de los niños y no los quiso?? .— preguntaba.

— No sabe,no se lo dije.

Por favor mamá, entiéndeme.

Me reintegro al trabajo y me dicen que estoy despedida.

Encima doy de cara con el tipo con el que pase la noche y es mi jefe.

Le suplique que no me corriera y me dijo que si le diera trabajo a todas las mujeres con las que duerme ,tendría un harén no empleados.— ¡¡que horror!!, pensaba doña Alma

— De cuarta y después...¿que mas pasó?.— quería escucharla por primera vez sin los reproches.

— Me quedé sin empleo,busque trabajo como loca .

No quería trabajar en un call center, pero no encontraba otra cosa que hacer y el dinero del despido se me estaba terminando.

 Al principio no me fue muy bien en eso de vender en linea ,no como ahora que estoy mas práctica.

No es lo mismo hacerlo cara a cara que por teléfono.

Encima la casera me dice que debo dejar el departamento o pagar los tres meses de arriendo que se debía.— esa era una recomendación que siempre,doña Alma le daba a sus hijos .."no deber comida, ni el arriendo del techo que nos protege."

— ¿Tu no pagaste el arriendo??

No es así como te enseñamos.

Los compromisos se asumen y se pagan.— le advertía preocupada con las deudas que podía tener sin que ellos tuvieran información al respecto.

— Lo pagué mamá, yo pagué mi parte,pero la chica con la que compartía el departamento no.

Se fue dejando esa deuda con la cara más deslavada.

Si se me hacia cuesta arriba pagar medio arriendo,imagina todo.— respiraba aliviada.

— ¿No pensaste en buscarlo cuando supiste del embarazo??.— tal vez podría haberla ayudado.

—¿Crees que un tipo como el asumiría un bebé de una mujer con la que se divirtió una noche??

Imagina si asumiría dos.

No quise ni averiguarlo,así que... aunque Adriana y su novia me ofrecieron ayuda,no la quise.

Por eso regresé.— sentía tristeza en las palabras de Eli.

— Lamento todo esto querida y no haberte apoyado antes ,ni ahora durante el parto.

Pero te prometo que te voy a ayudar a salir adelante con tus hijos.

Si tengo que cuidarlos lo haré,pero pobre tuyo que inventes de darlos en adopción.

No te lo perdonaría nunca.— tenía miedo que eso sucediera por la conversación a medias que escuchó.

— Yo jamás pensé en hacer algo como eso.

Hablábamos de mi vecina de aqui , estaba en esa cama .

Es una pena que una adolescente llegue al extremo de vender a su bebé para comprarse ropa , celular,etc.

Mamá quiero pedirte que no intentes emparejarme con Gustavo.

Aunque sea la última persona del planeta no volvería con el.— se lo advertía.

— No volveré a hacerlo,lo juro,ahora a definir los nombres.

Bebé uno y dos no son demasiado adecuados.— empezaba a pensar algunos nombres para sus hermosos nietos .

— Policarpo. — dijo Eli de repente y se largaron a reirse de su falta de ideas al respecto.

Enrique regresaba,para cuidar se su hermana ,pero al ver que estaban de bien las dos, las dejo a solas.

Mejor iba a atendernder su negocio que había quedado abierto a cargo del puesto de combustible.

Mas tarde regresaba el papá a ver si precisaba algo.

Pensaba que Alma había salido de viaje para no participar de nada de esa nueva etapa de su hija.

Pero ahí estaba ,acunando a uno de sus nietos que lloraba,mientras su mamá se daba una merecida ducha.

— Ya tienen nombres.— le contaba a su marido con una sonrisa sincera.

— Gracias querida,te ves bien de abuela.— la abrazo .

Ambos se sacaban fotos con sus nietos.

Ian y Kan tendrían una familia unida,amorosa que estarían para ellos siempre.