Katty Velásquez, la nerd menos querida de la prepa, se transforma de una fea oruga en una hermosa mariposa, después de 10 largos años se encuentra con su amor platónico de quien solo Tiene recuerdos nada agradables, para su mala suerte su padre arregló un matrimonio con el.
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Sopresa Daniel.
{Perspectiva de Daniel}
Me encontraba bebiendo con un grupo de chicas sexys de lo mas guay, cuando de pronto la puerta del salón se abrió y una figura perfecta y reluciente, más que cualquier gema valiosa hizo su aparición deslumbrándonos a todos.
La multitud giró a ver como si se tratara de alguna eminencia, clavando su mirada en aquella señorita de piernas largas y brillantes, que caminaba con pasos relucientes, todos admiraban su belleza, ya que resultaba hechizante, era perfecta, una bomba sexy, el vestido que llevaba acentuaba aún más sus curvas, deleitándonos con su cuerpo candente.
¡Espera!... Un segundo.....¿Qué hace Jheyson con tremendo mujerón?
Hasta el momento había ignorado a mi hermano ya que toda mi atención fue puesta para el ángel de rostro perfecto, que brillaba más que el sol.
Sus pasos se dirigen hacia mi y puedo sentir la tensión en todo mi cuerpo...
Al tenerla más cerca su rostro se amplía ante mis ojos.
¿Qué no es la misma mujer con la que choqué en el aeropuerto?.
Su rostro quedó impregnado en mi cerebro, que no la pude olvidar en todo este tiempo. La estuve buscando como aguja en un pajar, sin éxito alguno y no puedo creer que la tenga justo en frente de mi.
Ordené a las chicas de mi entorno que se retiren, con un gesto impaciente.
"Lárguense".
No iba permitir que arruinen el momento. Estas curvaron el labio y se perdieron. Me alisé el dobladillo de mi camisa y me presenté como todo un caballero.
"Hermosa la noche en que los dioses enviaron a un ángel como usted, un honor para mis ojos contemplar a una hermosura como usted".
Tomé su mano tan blanca y delicada como seda y la besé. En respuesta esa encantadora mujer sólo sonrió.
"Hola Daniel" Saludo mi hermano, pero lo ignoré, mi centro de atención es sólo esa diosa, debo de tenerla en mi cama como sea.
"¿Cómo conociste a este encanto?" le pregunté.
"¿Qué.....no me reconoces cariño?" Respondió ella, relamiéndose los labios seductoramente, sin dejar de sonreir.
'¿Por que esa voz es idéntica a la de la fea?'.
"No comprendo". Respondí con una sonrisa despreocupada. Pero debo aceptar que su pregunta me turbó un poco, la mujer exquisita me confundió un poco.
Una sonrisa amplia, exquisita y divertida se formó en sus sexys labios, se acercó a mi rostro, pasó su mano con delicadeza por mi mejía sin dejar de verme con sus hermosos ojos desafiantes, enviándome miles de descargas eléctricas, poniéndose sumamente nervioso.
"Soy "LA FEA". ¿No es así como tu me llamas?". Dijo ella con frialdad. La cálida sonrisa desapareció en una pestañada.
Mi cuerpo se tensó en ese instante, un frío recorrió mi espalda y mi rostro decayó. Pero me recompuse al minuto siguiente, seguro que esto se trata de una broma.
"No juegues conmigo encanto, estoy soltero". Respondí lo más seductor posible.
"No es un juego" Jheyson que mantuvo perfil bajo en toda la charla, abrió la boca y afirmó con seriedad.
Luego la diosa sacó su tarjeta de identificación mientras sonreia, para luego mostrármela.
AMANDA KATTY VELÁSQUEZ SANDOVAL. Junto a un hermosa fotografía.
Mi cabeza empezó a dar vueltas, abrumándome en ese instante, mis ojos no querían despegarse de esa tarjeta de identificación ¿Qué demonios está pasando?.
Volví mi mirada incrédula hacia aquella mujer que decía ser Amanda, pero no encontré a esa fea. Eran dos personas totalmente diferentes.
No podía creerlo. Por más que quise mantener la compostura, la revelación fue como un rayo sacudiendome sin previo aviso.
"Imposible". Pasé mi mano por mi nuca, intentando procesar la bomba de noticia.
"Si no me crees es tu problema, si nos disculpas Jey Jey y yo vamos a divertirnos".
Pasó por mi lado ignorándome por completo.
{Perspectiva de Katty}
Ese idiota se quedó parado como un tonto, mientras nos veía alejarnos. Su rostro estaba tan igual como lo imaginé, lleno de sorpresa e impotencia.
Al parecer demoraría mucho en que su cerebro vuelva a conectar.
Empezó a sonar una música romántica y Jey me invitó a bailar.
"Sería un honor capullito Si me concedes está pieza"
"Por que no".
Me tomó de la cintura y comenzamos a movernos al compás de la melodía.
"Le diste una gran lección a Daniel" Susurró a mis oídos.
"Se lo merece, jamás debe marginar a una mujer por su apariencia".
"Eres muy valiente capullito". Susurró aún mas cerca y me pegó a su cuerpo. En ese instante sentí mi cuerpo estremecerse por su cercanía al borde de beber su perfume.
{Perspectiva de Daniel}
Mis ojos estaban ardiendo de rabia, no hay duda que Jheyson me lo estuvo ocultando, es por eso que siempre la protegía. Al verlos tan juntos y disfrutando de un buen baile, hace que mi corazón se siente molesto, esa escena es torturante.
"Me siento un verdadero idiota burlado"
Le arrebaté una botella de vino a un camarero y me tomé varios sorbos, me sentía como si estaría atravesando un gran desierto, esto parecía un gran sueño de mal gusto.
Después de beberme 3 botellas de vino, ya no soporté verlos tan felices, platicando entre risas como dos buenos amantes.
Salí del lugar casi cayéndome, me quité el saco y lo tiré a la basura antes de subirme a un taxi.
{Perspectiva de Jheyson}.
Mi hermano estaba totalmente afectado, vi como no dejaba de beber sin dejar de vernos con rencor.
Salió disparado del lugar.
"Hola cariño, ¿Quién es esta hermosa mujer?". Irrumpió mi madre, quien antes estaba ocupada con grupo de empresarios.
Con una sonrisa empezó a escudriñar a capullito. Haciéndome ojitos.
"Suegra soy yo. Amanda.".
Mi madre pegó el grito al cielo emocionándose hasta los pelos.
"Hay no. ¿En serio? pero estas super hermosa. En serio te desconocí hija. Siempre debes de arreglarte así.".
Exclamó mi madre sin dejar de tocar su rostro para asegurarse de que era realidad. Mi madre de seguro pensaba que el maquillaje hace milagros. Sin saber en verdad que ella siempre fue hermosa.
"Está bien suegra". Respondió mi capullito sin dejar de sonreírle.
"¿Y donde está Daniel? hace un rato lo vi, pero ahora no lo veo" Agregó mi madre sin dejar de recorrer el lugar con su mirada. Luego volvió a ver a Amanda y esbozó una sonrisa cómplice. "Hija, ¿Daniel te vió? que dijo. De seguro se le cayó la baba".
"Hemm".
Capullito no sabía qué decir asi que me apresuré en contestar.
"Claro madre, se emocionó".
"Que bien, esto es fabuloso, bueno les dejo disfrutar mis amigas me están llamando".
Después de que mi madre se retirara, comimos unos bocadillos y nos retiramos ya que capullito se sentía un poco cansada.