La Sombra Del Mal

______ ¡¡¡¡AHHHHHH!!!!

Cecilia soltó un fuerte grito de dolor, sus ojos se iban cerrando lentamente. Estaba demasiado débil para aguantar otros latigazos.

Sostuvo con fuerza las cadenas que amarraban sus manos. Apretó los dientes, soportando el dolor.

Gotas de sangre escurrieron por su espalda, hasta caer al sucio piso. La herida causada era brutal.

Su piel se abrió en dos, mientras que el fuego hizo su trabajo, causando quemaduras. El olor a sangre se extendió rápidamente por el sótano, satisfaciendo los apetitos de los espectadores.

El Conde disfrutaba de ese momento; era un placer inigualable. Ver el dolor en el rostro de la chica.

Era como en los viejos tiempos, cuando torturaba y abusaba de las chicas. Además, Cecilia se lo merecía, por haberse atrevido a herirlo.

Nadie se había atrevido a tanto...

_____ ¡Dale otro latigazo, pero esta vez más fuerte!

______ Quiero escuchar sus gritos. Anhelo verla sufrir aún más. ____ Ordenó el Conde, pasando su lengua por sus labios.

Emma levantó el látigo otra vez; la maldad se podía ver reflejada en sus ojos. Al igual que el Conde y todos los presentes disfrutaba del dolor de la chica.

Cuando estaba a punto de darle otro latigazo a Cecilia, una daga atravesó la mano de Emma, obligándola a soltar el látigo.

Todo sucede tan inesperadamente que deja a todos impactados. Los presentes quedaron atónitos.

El sótano era un sitio pequeño. Que estaba bien resguardado por varios hombres entrenados. Era casi imposible que alguien hubiera entrado sin ser detectado por los hombres del Conde.

_______ ¡Ahhhh! ____ La asesina soltó un gemido de dolor.

Sacó la daga afilada de su mano, y la arrojó al piso. Gotas de sangre comenzaron a caer al suelo. Sostuvo su muñeca con su otra mano, evitando que saliera más sangre de la herida.

_______ ¡Busquen por todas partes! ____ El Conde, sorprendido del ataque sorpresa, le ordenó a todos los hombres.

Con las armas en sus manos, empezaron a buscar al sujeto que había herido a Emma de la mano.

Sin embargo, no importa cuanto busquen, no había nadie ahí. El orgullo de asesina la hace desear vengarse de la persona que se atrevió a lastimarla.

Antonio vendó la herida con un trozo de tela, y aunque el dolor era insoportable, sacó su arma dispuesta a matar a Cecilia. Era evidente que la sombra iba a rescatar a la chica, no obstante, solo la rescataría muerta.

_______ ¡Quién eres! ¡No saldrás con vida de aquí! _____ El Conde levantó la voz con fuerza.

Sintiendo miedo... Había presenciado lo que la sombra hice, y era evidente que se movía sin ser detectado por los demás hombres.

Como respuesta, el asesino mató a uno de los dos hombres a lado derecho del Conde. Todos se quedaron sorprendidos con la rapidez con la que el asesino ejecutaba.

Emma y Antonio retrocedieron un poco. Los dos asesinos intercambiaron miradas, quitando el seguro de sus armas.

Al mismo tiempo le apuntaron a Cecilia, era la única manera para evitar un ataque directo de la sombra. Por sus mentes pasó la idea de que era una alma, ya que, no podía ser vista por ninguno de ellos.

Sin embargo, sería una teoría muy tonta. Un espíritu, no haría lo que hace la sombra. Así que ambos asesinos pensaron en que ese sujeto era un asesino muy bien entrenado.

______ Quieres jugar, juguemos… Por cada hombre que mates, esta mujer recibirá una bala. Llevas uno, una bala, ¿en dónde la quieres?

Entre la oscuridad salió un hombre vestido de negro. Cubriendo su rostro con una máscara. Los dos asesinos sonrieron complacidos de ver a su rival dar la cara.

La sombra bajó sus armas, ya que, no quería poner en riesgo la vida de Cecilia. El Conde al ver que tenía entre sus manos al sujeto que le había causado tantos problemas, sonrió felizmente.

______ Antes de matarte quiero ver tu rostro.

______ Ven quitamela. ____ La voz del hombre le sonó bastante familiar.

______ ¡No, no, no! ¡Esto no puede ser verdad!

El Conde retrocede, dándose una clara idea del hombre delante de él.

_____ ¡Matenlo! ____ le ordenó Emma a Antonio, el hombre le apuntó a la sombra, dispuesto a terminar con todo eso de una vez.

Sin embargo, una daga se colocó en el cuello de Emma, la chica detrás de ella, no era otra que Lilit...

Después de quedarse en la habitación del Conde, miró al asistente volver a entrar a la recámara, el chico llevaba una maleta pequeño donde iba a echar todo el dinero en efectivo que tenía escondido el Conde.

Cuando se distraigo, Lilit aprovecho ese momento para someterlo. Aunque, era hombre, y sus fuerzas no se podían comparar con las de ella, no tuvo piedad con él.

Así, como no había tenido con Melissa y con los otros dos hombres. Era sobrevivir y salvar a su hermana. Luego de torturarlo, el chico le confesó donde tenían a Cecilia, y cuales eran las entradas escondidas por donde podía pasar.

Al ser quien consiguió la casa para el juego, el chico sabía todo sobre ella. Escondites, entradas secretas a cualquier sitio de la mansión.

Al obtener toda esa información, Lilit eliminó al chico, no podía ponerse en riesgo. Luego guardó todo el dinero en la maleta junto a los papeles que les tomó foto, también se llevó el celular del chico.

Los guardó en un sitio donde nadie más que ella los pudiera encontrar. Enseguida, se apresuró a ir al Sótano, entrando por una de las entradas secretas.

Al ver la distracción de todos, se acercó silenciosamente a Emma. Colocando una daga afilada en su cuello.

Nadie se esperaba eso, Emma, Antonio y todos los presentes cometieron varios errores. Parecían principiantes a lado de la sombra y Lilit.

_______ Baja el arma idiota, o te juro que le cortó el pescuezo a esta asesina. ____ Antonio bajó el arma, sin embargo, eso enfureció al Conde.

No importa quien muera, mientras no sea él... Este juego ya no me estaba gustando. El hombre tomó una pistola de uno de sus hombres y le dispara a la sombra.