El Protagonista Se Enamoro De Mi

Llego a mi habitación y lo primero que hago es soltar una carcajada, el príncipe es todo un caso, es la primera vez que lo veo fuera de su actitud habitual y eso de alguna forma me causó satisfacción.

No puedo evitar que mis pensamientos viajen a mi vida pasada, siento una opresión en el pecho al recordar a mi tía, deseo que ella encuentre la felicidad y pueda realizarse como persona, ella es la persona que yo más amo en el mundo, bueno, aunque ahora no estoy en ese mundo, pero la sigo amando, desde que mi madre murió ella adoptó el papel de madre sin dudarlo aun acuesta de su propia felicidad, ya que se enfocó tanto en mi bienestar que se olvidó de ella misma, ahora le agradezco al cielo el haber comprado un seguro de vida pues así al menos me aseguró de que ella no sufre a falta de dinero de algo me habrá servido ser esclavo del trabajo

Así que no voy a desperdiciar mi vida en esta novela, voy ser yo quien decida que hacer

- tengo que apresurarme a terminar esta misión y empezar a trabajar en las mejoras que quiero hacer en el reino, con llevar una relación cordial con el príncipe es suficiente, no hay necesidad de ser amigos - se sienta en la cama - creo que debo enfocarme en otros aspectos de mi vida, casarme, tener una bonita familia y una linda esposa

- como que una esposa? - doy un brinco en la cama del susto

- que hace usted aquí? - hablo todavía un poco asustado

- vine a buscarte para la misión - dice con mala cara

- y acaso usted no conoce lo que es la privacidad o el respeto? Solo por educación debe de tocar antes de entrar y esperar mi permiso - digo con el ceño fruncido

- eso no aplica en mí - habla como si no importara de verdad

- claro, entonces yo también puedo entrar a su habitación sin pedir permiso porque las formalidades no aplican en mi caso, no? - le respondo sarcásticamente

- exactamente, entre nosotros ya hay cierta confianza - se sienta a mi lado con la mayor confianza

- pues yo no sé quien le ofreció tanta confianza? - lo miro mal

- tu trasero - sonríe

- no digas estupideces príncipe idiota - lo golpeó con la primera almohada que encuentro

Siento mi cara arder mientras lo golpeó, pero él solo ríe a carcajadas para luego abrazarme y dejarse caer en la cama conmigo encima de él evitando así que lo siga golpeando

- suéltame - me mueve como poseso, pero aun así no me suelta

- ya, calma - suelta una leve risa que puedo escuchar claramente, ya que tengo la cara sobre su pecho

- no te hagas el chistoso y suéltame

Después de un rato de intentar hacer que me suelte termine cansado así que deje de forcejear y me acosté sobre él sin problemas igual ambos somos hombres

- ves que no había necesidad de pelear - acaricia mi espalda - ahora dime a que te referías cuando hablabas de esposa

- no seas chismoso - me acomodo mejor sobre él sin importar si le parezco pesado

- porque no me quieres contar? - quita su mano de mi espalda

- porque no somos cercanos y tampoco amigos y esas cosas solo se lo cuentas a un amigo - le coloco la mano sobre mi espalda otra vez a lo que él suelta una pequeña risa

- no me consideras cercano a pesar de que casi morimos juntos, y que estás sobre mí en estos momentos - dice dándome un pequeño apretón en la cintura

- eso no tiene nada que ver - cierro los ojos - que perfume usas?

- perfume?

- huele bien, me gusta, es como un olor cítrico pero suave - aspiro

te gusta mi olor? - lo miro y veo una sonrisa en su rostro

- sí, es muy no sé cómo describirlo - lo miro - cuál es el que usas? Me recomiendas al perfumista por favor

- yo no-

TOC TOC

- joven Brown - como si fuera un resorte me levanto de encima del príncipe

- pase - digo de manera automática

- joven, le recuerdo que debemos de reunirnos para hablar de la misión - dice James asomándose en la puerta

- lo había olvidado gracias - sonrió y sin saber por qué me siento avergonzado

- no era necesario que le avisaras - dice el príncipe levantándose de la cama serio

Veo los ojos de James abrirse como platos y mirarme sorprendido sin saber por qué me siento avergonzado

- se está haciendo tarde, vamos - salgo de la habitación dejando a tras a aquel par