UN PADRE PARA MISAEL (6)

Los días siguieron pasando, Cerem estaba un poco más aliviado, porque Payton se estaba esforzando por trabajar sin tanta supervisión, pero otro problema se acercaba a Cerem, era el trabajo de oficina, aún estaba un poco atrasado, estaba estresado y frustrado, con tantos pendientes se le olvidó su teléfono en casa, su secretaria estaba enferma y no habían encontrado un reemplazo.

El teléfono de su secretaria, comenzó a soñar y Cerem iba saliendo para una junta urgente, él ignoró el teléfono y entró a la reunión sin percatarse de que una mujer salió del ascensor, al no ver la secretaria, tocó en su oficina y al no recibir respuesta, decidió entrar, una sonrisa se dibujó en su rostro, el lugar estaba hecho un desastre, había carpetas por todos lados y la laptop de Cerem estaba abierta con una presentación pendiente por terminar, había una libreta con apuntes de las ideas que debían ser plasmadas, así que la mujer primero, archivó y ordenó todo en un segundo, luego tomó la libreta y terminó la presentación, ella era una empresaria experta y todo esto fue pan comido para ella, después comenzó a atender todas las llamadas y a tomar los recados, posteriormente salió dispuesta a buscar un café para Cerem, ella sabía exactamente como le gustaba.

Mientras tanto, en la oficina, a los pocos minutos la puerta se abrió y un Cerem verdaderamente agotado ingresó.

Cerem no podía creer lo que veían sus ojos, todo estaba ordenado, pensó que al fin habían encontrado el reemplazo de su secretaria, así que se sentó en su silla, dispuesto a terminar la presentación, pero para su sorpresa también estaba lista, está presentación era tan importante que él no quiso delegársela a nadie, pero esta persona lo había hecho perfectamente, se podía decir que lo dejó con la boca abierta.

Cerem solo suspiro y se preparó para aprovechar de llegar temprano a su casa y disfrutar de su familia, pero cuando toma su saco para salir, tocan la puerta y él se sorprende al ver a la mujer frente a él

__ Fabiola, ¿Qué haces aquí?

Ella se acercó y le dio un café

__ Vine a disculparme contigo y a que comencemos de nuevo, quiero que seamos amigos y que me asesores en algunas inversiones, acabo de enviudar Cerem y aunque no lo creas yo amé a Flavio a mi manera, pero lo amé, creo que su ausencia me tiene muy sensible, emocionalmente me siento desprotegida y por eso acudí a ti, pero te prometo que no interferiré en tu vida personal, ¿Qué dices? _ preguntó Fabiola extendiendo su mano ante Cerem

Cerem la miró incrédulo y le refuto:

__ Voy a aceptar con una condición, no trates de manipularme, no quiero que hablemos de nuestro pasado, ya entiérralo y olvídalo, amo a mi mujer y jamás la cambiaré por nada en el mundo

__ Acepto

Cerem estrechó su mano.

__ Bueno por ahora, dime en que más te ayudó, estás demacrado y ojeroso.

__ O sea que fuiste tú quien ordenó todo esto y terminó mi presentación

__ Por supuesto, ¿o tú que suponías que fue el hada de los dientes?, por cierto ¿y tu secretaria?

__ Está de licencia médica por veintiún días y Recursos humanos aún no consigue su reemplazo.

__ Ok ¿y tu gato o mejor dicho tu perro?

__ ¿Te refieres a mi hermano Fred?

__ Bueno si, perdón a ese mismo,

__ Está de vacaciones por mes y medio, así que por eso es que tengo mucho trabajo.

__ Ok, si me lo permites te ayudaré, por lo menos mientras consigues la secretaria.

__ No, Fabiola tranquila, yo puedo resolverlo todo, pero te lo agradezco e incluso hoy como ya terminaste mis pendientes aprovecharé de irme a casa más temprano y sorprender a mis mujeres.

__ Ok, pero tienes mi celular, cualquier cosa me puedes llamar.

__ Seguro, ahora vamos

Los dos salieron juntos de la oficina y Cerem al ver la hora eran casi las seis de la tarde, se fue directo a su casa para llegar a cenar con sus mujeres

Fedra y Adalet estaban por comenzar a cenar, cuando escucharon la puerta

__ Papiiii _ gritó la niña y corrió hacia él, Cerem la cargo y entró con ella al comedor, por su parte Fedra ni se movió, siguió cenando como si nada hubiese ocurrido.

Cerem sintió un vacío en su corazón, pero entendía que las últimas noches, él con tanto trabajo, no había cenado con ellas había cenado en su despacho o en su oficina.

Él sentó a la niña de regreso en su silla y se asombró al ver en su puesto un gran oso de peluche que tenía un traje con corbata y unos documentos al frente y una nota que decía “no molesten, tengo mucho trabajo”.

Ahí Cerem entendió que estaba perdiendo tiempo valioso con su familia, se acercó a Fedra y besó su frente antes de se tarde a su lado, él no tomó su lugar, no quería importunar al oso ocupado que estaba ahí.

Fedra ordenó que le sirvieran la cena y de postre comieron unos pasteles de fresa que Cerem pasó comprando, luego los tres se acostaron a ver una película, pero Fedra seguía sería, después que la niña se acostó, ellos fueron a su habitación, ella se cambió y se acostó.

Cerem solo la veía, ella estaba tan hermosa ya casi tenía los seis meses y su barriga estaba más grande

Cerem fue directo a la ducha, se dio un baño rápido y salió con el paño en la cintura, se paró frente a Fedra y dejó caer el paño.

Fedra tragó grueso y se sentó en la cama, lo atrajo hacia ella,

__¿puedo?,

Cerem se sorprendió de que ella pudiera permiso

__ Claro, nada me encantaría más

__ ¿Pero es seguro para mí hacerlo?.

Cerem entendió perfectamente lo que ella quiso decir.

Él se agachó frente a ella y le besó los labios,

Te amo Fedra y te juro que jamás te engañaría, tú eres mi vida, eres mi luz y te amo,

Fedra sonrió, ella lo vio directamente a los ojos y sintió que era sincero, ella decidió creerle y lo besó, Cerem se estremeció, a los pocos minutos él se alejó de ella y comenzó a besarla y poco a poco le quitó su pijama y se subió sobre ella

__ Por Dios Fedra, hace solo una semana que no lo hacemos y estás tan deliciosa que me enloqueces _ dijo Cerem entre jadeos.

__ Te extrañaba mucho, te amo _ respondió ella y continuaron amándose, luego de llegar juntos al clímax, se quedaron dormidos profundamente y desnudos.

Al día siguiente, Cerem se levantó muy temprano, tocó los pechos de su mujer y acarició su centro, ella estaba dormida, pero Cerem la tenía abrazada por la espalda y su hombría rozaba con su espalda, así que solo la acomodó un pecho y le hizo el amor.

Fedra abrió los ojos, sorprendida al sentir la invasión íntima de su marido.

__ Buenos días, preciosa _ dijo Cerem jadeantes

__ Humnn, son loos me-ejore-es, _ dijo Fedra acomodándose para darle un mejor acceso a su marido, juntos llegaron al clímax y Cerem la llevó hasta la ducha y ahí volvieron a hacerlo.

Luego bajaron juntos a desayunar, fueron a llevar a la niña en el colegio y Cerem dejó a Fedra en la Dulcería, vio su reloj y tenía el tiempo justo para llegar a la junta, pero había mucho tráfico y de repente sonó su celular

__ Buenos días Cerem, ¿Dónde estás? Ya los japoneses están aquí, me traje a la secretaria de vicepresidencia para que suplantar a la tuya por lo menos durante la junta.

__ Ok, gracias Fabiola, estoy trancado en el tráfico, si puedes dale una pequeña introducción del proyecto, es lo mismo de la presentación, yo llegaré en unos cinco minutos

__ Ok, hablamos aquí _ Fabiola entró a la Sala de juntas y hablo en un perfecto japonés

...(Traducción)...

__ Buenos días, señores disculpen la demora, mi nombre es Fabiola Genovés, y soy la socia del señor Asaf.

__ Pensé que nos atendería el personalmente _ dijo una hermosa mujer japonesa de unos cuarenta años, que estaba sentada en frente de Fabiola, la mirada de la mujer era acusatoria, detallando a Fabiola de los pies a la cabeza

__ Si, él llegara en unos minutos, solo …

Pero la mujer la interrumpió

__ Entonces lo esperaremos no necesitamos entretenimiento, oh sí, si es tan amable tráiganos un té, _ dijo la mujer con un tono de arrogancia, mientras sacaba una revista de su portafolio y se puso a leerla en frente de todos

Fabiola, apretó el puño al notar que la revista de la mujer estaba al revés lo que indicaba que solo la estaba humillando.