El Amor Verdadero

A la mañana siguiente cuando Anastasia despertó eran ya las 7 de la mañana por lo que pensó que su marido ya debe estar desayunando, pero a ella se le ocurre algo que seguramente sacara de nuevo de quicio a su marido.

Después de asearse Ana se dirigió hacia el comedor, y efectivamente su marido estaba ya sentado en la cabecera de la mesa esperando el desayuno.

Justo cuando ella llegó Leticia venía con el desayuno del señor.

_ Buenos días, Señora, ¿quiere que le sirva el desayuno? _ pregunto amablemente la señora.

_ Buenos días, Si Leti, pero quiero desayunar en el jardín, puedes servirme hay por favor_ contesto muy amable la joven mirando la reacción de su esposo que al escuchar, lo que la joven dijo levantó la cabeza mirándola con el ceño fruncido.

Anastasia sonrió ante la reacción de su esposo, ella sabía perfectamente que eso no le gustaría para nada pero eso no le importo.

_ Si señora, ya enseguida _respondió Leticia sonriéndo también, sabía que a su patrón para nada le agradaba la idea de su esposa, pues el señor estaba acostumbrado a tener el control de todo y que un día para otro una hermosa pelirroja con rizos tomará el control de su casa y ella estaba segura que muy pronto de todo el también.

_ y usted señor Santoro si quiere desayunar con su esposa va a tener que trasladarse al jardín tambien_ le hablo la joven a su esposo en un todo un poco sarcástico.

El hombre no emitió ningún sonido lo único que hizo fue agarrar la servilleta y luego tirarlo fuertemente sobre la mesa para luego levantarse de la silla y abandonar el comedor.

Mientras que su joven esposa se encogió de hombros y con una triunfadora sonrisa abandono el comedor para dirigirse hacia el jardín.

Anastasia estaba en el hermoso jardín que tenia la casa disfrutando del sol y del canto de los pajaritos, sin darse cuenta ella, desde la ventana de una de las tantas habitaciones de la gran casa un hombre apuesto vestido como todo un vaquero la observaba muy atentamente.

El viento soplaba lentamente haciendo que los hermoso rizos rojizos que portaba la hermosa mujer que hace más de 2 semanas se había convertido en su esposa se movieran lentamente haciéndola ver más hermosa.

Aunque el intentará de todas las formas, alejar esos pensamientos, le eran imposibles, a cada rato se le aparecía el hermoso rostro de su joven esposa.

Mientras pensaba en todo lo que había pasado estas últimas semanas sonrió arrogante.

"pensaste que ganaste chiquilla, pues te equivocaste claro que iré a tomar el desayuno con tigo"

Después de esperar un rato Leticia apareció con el desayuno de la joven y también con el de su esposo.

_ El vendrá a desayunar aqui?_ pregunto Ana mirando fijamente a la señora.

_ Si señora _ fue lo único que respondió la empleada para luego quedarse mirando a la mujer que tenía en frente de ella.

_ Que pasa,, Leticia _ pregunto la joven al ver que la señora se le quedó mirando sentía como que ella le quería decir algo.

La señora miró un par de veces hacia atrás y luego dirigió su mirada hacia la joven nuevamente.

_ Yo sé que, no debo meterme en lo que no me importa, pero te juro que lo que te voy a pedir es muy necesario_ la joven miró atentamente a la señora mientras tomaba cocido con chica era su desayuno preferido no importaba si hacía calor frío o llovía.

_ Para nosotras las chicas que trabajamos aquí adentro no es un problema pero, para los trabajadores que son de acá si es un gran problema _Siguio hablando la señora, pero Anastasia no entendía bien lo que Leticia trataba de decirle.

_ Estoy hablando de que Antonio le prohíbe a los empleados hablar en guaraní, no es porque no le guste el idioma sino porque yo creo que sigue enojado con Paraguay_ dijo Leticia volviendo a mirar hacia atrás, para verificar que su patrón no haya venido todavía.

La joven empezó a reír en carcajadas como que enojado con Paraguay.

_ Leti, como que enojado con Paraguay, porque alguien se enojaría con un país_ dijo la joven con un poco de dificultad, ya que seguía riéndose.

_ Yo digo que si, mi niño quedó así luego de lo que pasó con su primera esposa y también su hijo_ dijo la señora limpiando algunas lágrimas que se escapaban de sus ojos, recordar por todo lo que había pasado su patrón que era como un hijo para ella le hacía quebrarse.

_ Lo siento Leti no quise ser grosera_ se disculpó la joven al ver la reacción de la señora tras recordar lo que pasó años atrás.

_ No se preocupe señora como iba usted a saberlo, solo espero que pueda hacer algo con los empleados_ dijo la señora limpiando las lágrimas, ya que vio que su patrón estaba acercándose.

_ Te prometo que haré algo al respecto_ dijo la joven acariciando levemente la mano de la señora que luego de que su patrón vino se retiró del lugar.

El desayuno de los esposos transcurrió en silencio ninguno de los dos dijo nada hasta que Antonio terminó y se marchó hacia los establos en donde estaban los demás trabajadores.

Anastasia también decidió ir y escuchar lo que realmente pasaba hay, cuando estaba a punto de llegar al lugar donde se encontraba su marido, lo escucho discutiendo con alguien o más bien le estaba gritando a alguien.

_ Como que no estas, llevando a cabo tu curso de idiomas, tienes que seguir haciendo el curso, no quiero escuchar a ninguno de ustedes hablar en ese maldito idioma acaso les cuesta entender eso_ grito furioso el hombre.

_ Ya basta porque les estás hablando así a tus empleados, que te pasa_ dijo Ana metiéndose en medio de su esposo.

_ Tu que haces aquí no te metas, que esto a ti no te incumbe, en lo único en donde puedes opinar es sobre las chicas que trabajan en la casa, nada mas_ dijo el hombre tratando de llevar a su esposa del lugar.

_ Claro que me voy a meter, como se te ocurre prohibirles hablar en su idioma en su propio pais_ dijo la joven haciendo un esfuerzo para zafarse del agarre de su marido.

_ Por favor señores, vuelvan todos a sus labores, déjenme hablar con el señor_ hablo muy amable la joven refiriéndose a los empleados que estaban reunidos, rápidamente todos asintieron y se retiraron del lugar.

Antonio no podía creer que su esposa fuera capaz de enfrentarse a él y más en frente de sus empleados.

_ Mira chiquilla, te estás pasando de la raya, como pudiste venir aquí a enfrentarme y más en frente de mis empleados, que respeto me van a dar asi_ dijo el hombre tratando de sonar tranquilo aunque por dentro quería estrangular a la pequeña figura que tenía frente a él.

_ Bueno si en eso reconozco que me pase un poco, no debí hablarte así en frente de los empleados, pero tú tuviste la culpa_ dijo la joven armando un puchero, su carita era lo más hermoso que el hombre haya visto desde hace mucho, uso todo su esfuerzo para no reírse de la joven que tenía sus cejas arrugadas como si estuviera calculando si su acción estuvo bien o mal.

_ Que yo tuve la culpa son mis empleados y tú no vas a meterte en eso_ dijo el hombre volviéndose serio nuevamente no podía permitir que en tan poco tiempo la chiquilla calara hasta lo más profundo de él.

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Hola les habla la autora de la historia

Sé que no he podido actualizar muy de seguido, pido disculpas por eso. Pero procuraré hacerlo más seguido.

Solo les pido que sigan apoyándome con sus me gustas

Y pueden dejarme sus comentarios

Gracias Vivi 😘