LA MESERA DEL BAR.

Después de que Soledad y Ariel hablaran y ya estando más tranquilos.

Ariel le pidió a Soledad que cerrará los ojos, mientras él aprovechó para acomodar sobre la mesa un pastel cubierto de chocolate y con fresas, le coloco una vela y la prendió.

Ahora ya puedes abrirlos le dijo efusivamente mientras comenzaba a tararear y cantar las mañanitas. Soledad abrió los ojos como dos grandes platos por la grata sorpresa que se había llevado.

Ariel le pidió que soplará la vela no sin antes pedir un deseo, Soledad sonrió pensando en que su deseo ya se había cumplido por el hecho de estar con Ariel y poder solucionar todo ese lío en el que se había metido con él.

Sin embargo, no dudo en pedir un deseo más al verse tan afortunada en ese momento y cerro fuertemente los ojos como para que el deseo no escapara y se perdiera en la nada.

Al tener sus ojos cerrados deseo estar con Ariel para toda la vida y que él sintiera unque fuera un poco de lo mucho que ella sentía por él.

Ariel al verla allí con los ojos cerrados y ver esa dulce cara no pudo resistir más y aunque se había hecho el propósito de solo verla como una amiga en lo que aclaraba sus sentimientos no lo pudo evitar y un fuerte deseo por besarla se apoderó de él y suavemente se acercó y sello sus labios con los de ella haciendo que saliera de su ensueño de pedir un deseo.

Soledad rápidamente abrió los ojos por la impresión, pero al tacto de sus labios con los de ella como por instinto los volvió a cerrar y se dejó llevar hasta el cielo con ese beso que tanto anhelaba.

Después de un momento ambos se retiraron y Ariel le dijo a Soledad que era hora de que soplará la vela o de lo contrario se terminaría en el pastel.

Soledad hizo lo que Ariel le dijo y él la retiro, para indicarle que ahora le tendría que morder a lo que soledad se negó un poco, pero ante la insistencia de Ariel termino cediendo.

Soledad le dio un pequeño mordisco al pastel y enseguida tomó el cuchillo para partirlo y tomó el plato para servir una rebanada le puso una cuchara y se lo paso a Ariel y sirvió otro para ella.

Ariel se negó a comer pastel argumentando que no le gustaban las cosas dulces, Soledad hizo un puchero y le dijo que si él no comía tampoco lo haría ella.

Soledad insistía en que comiera tan solo una cucharada, Ariel abrió la boca en señal de aceptar el pastel y como para indicarle que ella lo pusiera en su boca, Soledad tomo el pastel y le dio una pequeña porción al querer agarrar otra cucharada el plato se le resbaló cayendo sobre Ariel y marchándole la camisa.

- Lo siento, he manchado tu camisa, debí tener más cuidado, decía Soledad mientras agarraba unas servilletas para tratar de limpiarle, pero fue en vano pues termino embarcando más la camisa con el pastel.

Ariel le dijo que no pasaba nada que no se preocupara, y comenzó a desabotonar la camisa.

Soledad, aunque trataba de voltear hacia otro lado le era imposible no verlo, no podía dejar de ver ese cuerpo que parecía esculpido por un artista el cual se había esmerado para hacerlo a la perfección.

Soledad trató de disimular y se ofreció a lavarla y tomándola en las manos se retiró.

Ariel se quedó allí sentado esperando por su camisa.

- vaya esta mujer produce en mí un sin fin de sensaciones hace que mi cuerpo reacción con solo un roce de su piel.

Ariel se levantó para calmar esas ansias por Soledad después de un rato volvió Soledad con la camisa, Ariel la tomó y al ponérsela se veía tan sexy que era imposible para Soledad dejar de verlo.

Ambos morían de deseo, pero, ninguno se atrevía a dar el siguiente paso.

Ariel miró la hora y confirmo que ya era tarde así que le dijo a Soledad, que era hora de irse para la villa Smith.

Soledad sentía una calidez recorrer su cuerpo al escuchar a Ariel, pero al momento todo desapareció.

Ariel le dijo que siguiera siendo su esposa ante la sociedad, que él le ayudaría a poner en su lugar a su padrastro y a Camila y que, por otro lado, podía seguir conservando su trabajo en la empresa.

Que David ya le había informado del excelente trabajo que había realizado en el tiempo que él estuvo fuera.

Soledad le agradeció y acepto aunque su corazón se llenó de nostalgia al saber, que Ariel solo quería ayudarla y quizás por lástima y que no albergaba ni un otro sentimiento hacia ella.

Soledad disimuló su tristeza, y ambos recogieron todo para después irse, antes de salir Ariel tomó un sobre y se lo entregó a Soledad.

Ella lo tomó y al verlo se dio cuenta de que era el título de las joyas a nombre de ella, al igual que sus papeles de identidad.

Soledad se sorprendió y a la vez se puso muy contenta pues ahora si podía confirmar que legalmente ella era Soledad Báez.

Y como muestra de agradecimiento sé sin pensarlo se acercó a él para abrazarlo y agradecerle ese gentil gesto hacia ella.

Ariel la abrazo sintiendo con ese abrazo que todo su cuerpo se estremecía. Y por un momento cruzaron miradas perdiéndose en esos ojos negros. Al darse cuenta de lo cerca que estaban Ariel la soltó delicadamente.

Y se encaminó hacia la puerta.

En el camino no cruzaron palabra.

SEMANAS DESPUÉS.

En la empresa todo marchaba bien. Soledad poco a poco lograba meterse más en el mundo empresarial y tenía muy buen criterio para los negocios.

Ariel le explicaba detenidamente cada proceso a seguir y ella captaba con gran habilidad, Soledad tenía muy buena relación con David cosa que no le agradaba mucho a Ariel pues aunque no quería reconocerlo moría de celos cada que los veía platicar y reír amenamente.

Aunque soledad trataba de ganarse el cariño de Ariel, le era muy difícil por su cambio de actitud hacia ella, en algunas ocasiones era muy amable y le creaba falsas ilusiones, pero otras tantas era algo frío y cortante.

Soledad le pidió que durmieron en recámaras separadas no soportaba la idea de estar viendo cada noche como llegaba ebrio y solo imaginando que venía de estar con alguien más mientras que ella era solo un mueble más en esa recámara.

Ariel accedió pues para él también era una tortura desearla y no poderle hacer el amor porque cada que trataba de acariciarla y estar con ella terminaba recordando a la chica del bar.

Los días pasaban con normalidad y solo por las mañana y en la oficina está seca de Ariel al salir ella tenía que volver sola a casa o algunas veces la llevaba David.

ARIEL

Siento que estoy perdiendo la cordura, por una parte, Soledad es todo lo que un hombre podría desear y guapa inteligente y tiene un cuerpo, ¡wooou!, pero no sé que me pasa no puedo hay algo en ella que me atrae, pero también hace que la rechace no puedo con esto.

Cada que la veo cerca de David me pongo de mal humor no soporto vela feliz con él, la forma en que interactúan me pone mal hace que muera de coraje.

Y creo que David lo sabe por qué muchas veces noto como busca la manera de acercarse a Soledad con cualquier pretexto.

Y barias veces me ha insinuado que de no ponerle atención la perderé.

Y sé que tienen razón, pero no puedo con todo esto.

Cada que estoy con soledad el tiempo pasa volando, aunque de primero se ponía un poco reacia a que la acompañará al orfanato, logre que me permitiera ir con ella, me llena de alegría verla tan feliz rodeada de todos esos niños que la quieren mucho.

Ella me presento como su jefe y su amigo, aunque la madre Ángela es una mujer muy inteligente y rápidamente se dio cuenta de que había algo más de tras de todo esto.

Y a pesar de su amabilidad fue muy seria al decirme que no la fuera a lastimar que Soledad era como si fuera su propia hija.

Que ella era una buena chica y no merecía sufrir más, que ya había sufrido bastante.

Yo le aseguré que cuidaría de ella.

La madre se quedó más tranquila.

Cada que vengo con Soledad les traemos juguetes y ropa verla tan feliz con todo lo que les trae a los niños me hace muy feliz a mí también nunca pensé que se podía encontrar la felicidad en cosas tan simples como ver reír un niño.

- Soledad debemos irnos ahora o se hará tarde para la reunión con los ejecutivos. Recuerda que serrar este negocio es de suma importancia para la empresa.

Soledad asintió y se despidió de todos, para después retirarse de ese lugar. No sin antes agradecerle una vez más a Ariel por todo lo que ayudaba a los pequeños huérfanos del orfanato.

Ariel como de costumbre le dio un pequeño apretón en la mejilla y le dijo que siempre podía contar con él para lo que fuera.

En el auto mientras conducían Ariel, de vez en cuando miraba a Soledad no entendía por qué, pero deseaba hacerla feliz.

En la reunión con los ejecutivos, las cosas estaban un poco tensas estaban un tanto reacios a serrar los negocios, pero en ese momento Soledad con su encantador carisma que la caracterizaba decido que era momento de intervenir en los acuerdos, logrando que se serrara la negociación.

Todos quedaron conformes y con un apretón de manos serraron los negocios para dar paso a que los abogados procedieron a hacer el papeleo.

Después de ese agitado día, Ariel invito a Soledad a cenar ambos se dirigieron al mejor restaurante de la ciudad.

Como Soledad no acostumbraba a ir a restaurantes tan finos no tenía idea de que pedir, Ariel al notar su nerviosismo se ofreció a pedir por ella, Soledad acepto encantada.

El mesero se retiró y en seguida volvía con los exquisitos platillos, Ariel le hizo una seña para que se retirara y poder estar a solas con Soledad.

Él tomó los cubiertos y tomó una porción de uno de los platillos que había pedido y le dio a Soledad en la boca, ella se quedó perpleja ante la forma de actuar de Ariel. Y no pudo evitar ponerse roja como un tomate.

Ariel reía al verla así, - no pasa nada si te doy de comer en la boca ante la sociedad somos pareja, no te preocupes por lo que las personas piensen solo disfruta de la exquisita comida.

Le decía mientras se deleitaba viendo así roja y apenada.

Ambos disfrutaron la comida y volvieron a la villa, al llegar Ariel le pidió a Soledad que lo acompañará al su despacho, Soledad intrigada lo siguió sin pronunciar palabra.

Ya estando dentro Ariel le indico que se sentará, para Soledad era confuso, pero solo se sentó y observaba a Ariel como tratando de leerle la mente para entender que pasaba.

Sin embargo, él se mostraba sereno sin dejar que soledad pudiera anticipar nada.

Ariel tomó una carpeta de su escritorio y la puso frente a Soledad al igual que tomó una pluma y se la entregó.

Soledad se quedó helada al ver que los documento que tenía frente a ella era el acta de divorcio, savia que esa farsa de matrimonio era lo único que los unía y ahora ya ni eso.

Estaba perdida en sus pensamientos, cuando escucho a Ariel decirle que la firmara que era mejor terminar con ese matrimonio.

Ya que legalmente ella no era Camila. Soledad tomó la pluma y sin decir más nada lo firmo. Y apenas término salió de allí, porque si duraba un segundo más en ese lugar terminaría llorando frente a él y era algo que no quería que pasara.

Ariel solo frunció el ceño y no entendía la reacción de Soledad pues para él era mejor el divorcio así Soledad ya no podría ser amenazada más por su padrastro.

Ella sería libre de hacer con su vida lo que quisiera.

Apenas tubo él sus manos el acta de divorcio Ariel hizo una llamada y ordenó que siguieran con los trámites de los documentos que quería que estuvieran listos cuanto antes.