Prohibido Amarte "El Desenlace"

Narra Sam

Salgo del estudio y voy directo a mi habitación la cual nunca fue removida debido a mi estado de casada, me siento en la cama para procesar todo lo sucedido, me pellizco una y otra vez para comprobar que no estoy dormida y que esto no es otro de mis sueños en donde él está vivo, “auch” me quejo del dolor de mi autoflagelación, pero eso no importa ya que él está con vida y esta vez no pienso renunciar a él, debo dar orden a mis ideas. Mientras sigo sumergida en mis pensamientos y la opresión de mi pecho por todos los sentimientos encontrados, escucho gritos desde abajo, salgo corriendo recordando que Liam se quedó con maría

- ¿Qué sucede? – pregunto a maría que es la primera que veo, luego observo a mama tirada en el suelo y a Alex a un costado de ella

- La señora se desmayó - explica María

- Trae algo de alcohol – le ordeno con preocupación

- Solo falta que tu padre también le suceda lo mismo cuando me vea, solo espero que ese si se muera de una maldita vez – espeta Alex con su voz cargada de odio y rencor

- ¿Qué te sucede? – le hablo furiosa, el me mira con superioridad y se aleja

- Samanta toma – dice María entregándome el alcohol mientras yo traigo una almohada para acomodar a mama en el suelo, Alex ni se inmutó ayudarme

- Señora Helen – le habla María

- Mama, mama, por favor despierta – le hablo pasándole el alcohol por su nariz y ella comienza a recuperar el conocimiento

- Sam, Sam creo que me estoy volviendo loca – dice mama con su voz enredada

- No mama, no es así – le respondo con calma para que se componga

- Hija, hija vi a Alexander, ahora veo fantasmas – dice ella sollozando con miedo, trato de ayudarla a levantar para que se siente

- María ¿Dónde está Liam? – le pregunto por mi hijo

- Está en su habitación – responde ella

- Ok, ayúdame a levantar a mama para ponerla en el sillón – le pido, ella se acerca y ambas la acomodamos

- Hija, hija tengo miedo – dice mama temblando

- Mama debes de calmarte – le hablo

- Hija ¡era el! – me dice ella con un tono de locura

- Mama realmente es el – le explico

- Pero, pero ¿Cómo? – pregunta ella

- Ni yo misma lo se mama – le confieso

- Ahora que vamos hacer, tu papa se morirá de un infarto cuando lo vea – dice mama con miedo de la reacción de papa

- Creo que es algo que debemos asimilar lo mejor posible – le calmo

Pasan algunos minutos y mama se sube para encerrarse en su habitación, voy en busca de mi hijo y lo veo dormido en su cama así que decido ir en busca de Alex, voy a su cuarto pensando que lo están organizando para él, pero mi sorpresa es ver que las empleadas están en el cuarto del abuelo

- ¿Qué hacen aquí? – pregunto

- Es nuestro nuevo dormitorio – habla Elena con superioridad

- No sé qué te has creído, pero esta no es tu casa – le hablo con ira

- No me creo, soy la esposa de Alex, por ende tengo todo el derecho de estar aquí – responde altiva

- ¿así serán las cosas? – le respondo con una evidente sonrisa de reto

- Así las pones tu – responde ella

- Está bien, me gusta el juego, vamos a ver quién gana – le reto y me volteo para salir de ahí, pero antes de salir ella me habla

- Samanta por favor, no quiero comenzar una guerra contigo, Alex y tú no están destinados a estar juntos, yo lo amo y tenemos una hija, espero que respetes eso – me dice ella en un tono pacificador, pero entiendo la doble intención

- Lo siento Elena, pero esta vez no pienso dejar las cosas así, si antes fui una tonta, quiero que te quede claro que no me quedare con los brazos cruzados, peleare por el con todo lo que tenga – le informo mi decisión

- ¡Samanta jones, estas casada! – grita ella furiosa

- ¿Y eso que? Los matrimonios se pueden disolver – le respondo al momento que me doy la vuelta para ver su cara roja y llena de ira

- tienen un hijo ¿eres capaz de causarle ese mal a tu pequeño? Realmente eres despreciable – responde ella esperando apelar a mi lado materno

- que ingenua – respondo con una sonrisa sarcástica y me voy

salgo de la habitación y voy en busca de Alex, paso por cada rincón de la casa, pero no está en ningún lado, pregunto a María si lo ha visto y ella me informa que ha salido, ahora es momento de conocer a su hija, pregunto dónde está y me informan que le han adecuado una habitación cerca de la ellos, me escabullo y la observo de lejos, es una niña hermosa, pero nada parecida a su padre, mientras que Liam tiene todo de él, su carácter, su temple, sus ojos, su rostro y hasta sus expresiones, “lo siento pequeña, creo que tendré que ser la villana esta vez, tu padre y tu madre no podrán estar juntos” le pido perdón a esta bebe en mis pensamientos, sé que no debería ser yo la que acabe con una familia, pero una vez intente hacer lo correcto y eso solo me trajo dolor y decepción, si mi felicidad esta en lo incorrecto o lo inmoral, pues mi destino esta sellado.

Salgo y voy directo a donde mi hijo, entro y veo a mama con él.

- Sam temo lo peor – me dice ella temblorosa al tiempo que abraza a su nieto

- Si lo dices por papa, creo que ambos son lo suficientemente mayorcitos como para saber solucionar sus problemas – le digo desentendida

- Pero me da pánico pensar que le pueda hacer algo a mi pequeño – dice llorando

- Hay mama no seas tan exagerada, Alex podrá ser lo que sea, pero malo no es, además él es el pad… – me callo cuando veo que la voy a embarrar

- Eso espero, tu padre adora a su nieto y no perdonara nada – dice ella

- Sera lo único que de verdad ama – digo con ironía

- No digas eso, él te ama más de lo que imaginas – me dice acariciando mi cabello

- Si tú lo dices – respondo

- Solo espero que esto no cause problemas en tu matrimonio – me dice ella

- Sobre eso… mama creo que… que estoy cuestionando mi matrimonio – respondo para ir poniéndola sobre aviso

- No me dirás que te vas a dejar envolver por ese hombre de nuevo Samanta Jones – me habla molesta

- No lo sé mama, no sé qué pasara, solo sé que las cosas ahora son diferentes, además Max y yo nunca hemos tenido un verdadero matrimonio – le explico ante su mirada juzgadora