Prisionera De Mis Elecciones

De pie junto al gran ventanal de la mansión Salvatore, Luana Ríos disfrutó de la vista del hermoso jardín, al mismo tiempo que acariciaba su enorme barriga, tiene 39 semanas de embarazo y este acercamiento al nacimiento del bebé hace que Luana se sienta aún más feliz. Más asustada del futuro, cerró los ojos y no pudo evitar recordar el pasado y lo mucho que le duele.

*...*

Sumergida en una melancolía asfixiante, Luana hizo un viaje al pasado, deteniéndose exactamente el día en que su matrimonio de 3 años fue destruido por una llamada equivocada. Ese día, Marco contestó el teléfono y escuchó claramente a otro hombre llamando a su esposa amor y hablando de lo mucho que disfrutaba tener sexo con ella, claro que eso enojó muchísimo a Marco, peleó con Luana e incluso la atacó físicamente, desperdiciando cualquier posibilidad de reconciliación.

Ese día, Luana se había demorado más en el trabajo, pues estaba cubriendo el turno de su amiga Laura, pero ¿quién hubiera pensado que este hecho aislado le daría algo de veracidad a las palabras de aquel extraño hombre? Luana siempre amó mucho a su esposo, pero también amaba su profesión de enfermera, pero eso nunca fue aceptado por Marco, él era muy rico, entonces ella también lo era, ¿no? Sin embargo, Luana pensó de otra manera.

Debido a este gran malentendido, Marco pidió el divorcio, sin siquiera darle oportunidad a Luana de explicarle que solo fue un gran error, por el supuesto adulterio, Luana dejó este matrimonio sin nada, ni siquiera la esperanza sobrevivió, después de todo, Marco. Él fue el amor de su vida, su compañero y gran amigo, sin embargo descubrió que ese hombre amoroso, solidario y comprensivo solo existía en sus sueños.

A Luana la echaron del apartamento, sin amabilidad, como si 3 años de convivencia no significaran nada, le dolió tanto que por un momento Luana pensó que no podría soportarlo, ella no tiene familia, así que no pudo. No puedo darme el lujo de llorar, porque no habría nadie allí para secarle las lágrimas y decirle palabras de apoyo, está sola entre la multitud.

Todo el proceso de divorcio tomó solo 3 días, fue humillante, ya que Marco publicó en las redes sociales hablando de su desgracia, así que una vez más Luana tuvo que ser fuerte, en tres días se terminó lo que se construyó en 3 años, parecía una broma. y realmente fue difícil de asimilar, pero Luana necesitaba seguir adelante y así lo hizo.

Tratando de seguir adelante, Luana alquiló un pequeño apartamento, incluso intentó mantener su trabajo como enfermera, pero terminó siendo despedida sin motivo aparente, por lo que consiguió un trabajo en un pequeño bar en las afueras de la ciudad, el sueldo era bajo, pero le ayudó mucho y por eso tuvo que aceptar ese salario miserable, de hecho pensó que merecía un nuevo comienzo y tal vez un final feliz, pero parece que no nació para ser feliz.

Ya había pasado un mes, todo estaba encajando, el corazón de Luana ya no dolía tanto como antes, definitivamente lo superará, de vez en cuando recibía una llamada de Laura, pero siempre encontraba excusas para alejarse. su amiga, ¿Será que inconscientemente estaba culpando a Laura por su desgracia?

Luego de ser despedida sin motivo aparente, Luana consiguió un trabajo en un pequeño bar en las afueras de la ciudad, todo iba bien, pero al intentar salvar la vida de un cliente, Luana cayó en una trampa, y al darse cuenta, Estaba siendo arrestada por tráfico de drogas, de drogas, mucha droga, suficiente para que Luana no volviera a salir de prisión.

Como Luana no tenía dinero para contratar un abogado, llamaron a un defensor público, pero ¿quién sabía que en secreto haría una propuesta tan loca? Luana aún recuerda cada palabra dicha por aquel hombre de cabello gris: “Un amigo mío tiene una oferta para ti, da a luz a su hijo y gana tu libertad, te caerán al menos 10 años de prisión, piensa, esta es tu oportunidad”. recordar eso hace que Luana se sienta inútil, aceptó, era lo mismo que cambiar 6 por media docena, ella quedó atrapada, no detrás de grandes rejas, sino rehén de sus propias decisiones.

—No voy a lograrlo—murmuró para sí misma mientras analizaba su propia situación, es desesperada.

Luana tiene 25 años y luego de afrontar uno de los momentos más difíciles de su vida, aceptó una propuesta un poco diferente, accedió a dar a luz un bebé a un hombre desconocido, pero no lo pensó mucho, ya que la Se acerca el día del parto, su hijo, ¿lo logrará?

Mientras estaba entretenida, Luana se sobresaltó por los frenéticos golpes en la puerta.

—¡Puedes pasar!-dijo Luana mientras se apresuraba a secar las lágrimas que insistían en caer.

En ese momento entró una mujer de aproximadamente 40 años con una amplia sonrisa y dijo:

—Buenos días señora Luana, vine a decirle que el señor Bryan está abajo.

—Buenos días Ana, ya te dije que no me llamaras señora.

"Noah no se preocupa por mí, no estoy aquí para quedarme, voy a dejar a mi hijo y con él mi corazón y mis ganas de vivir, así que realmente no soy nadie aquí" - completó mentalmente mientras lo intentaba. para mantener la calma.

Ana estaba un poco avergonzada, pero no dijo nada y pronto ambos fueron a la sala, donde encontraron a Bryan sonriendo con una hermosa sonrisa.

—Buenos días cuñada, dijo Bryan y luego abrazó a Luana.

Por supuesto que eso enojó un poco a Luana, ¿cómo podía ser la esposa de un hombre al que nunca había visto el rostro? Un sexo a oscuras, una llamada mensual, solo para hablar del niño y nada más, por lo que que Bryan la llamara cuñada también fue gracioso, incluso parece una broma.

—Buenos días, respondió Luana para luego alejar a Bryan de ella y luego sentarse.

Bryan también se sentó y dijo:

—Traigo novedades, pero seguro que no te gustarán, lo siento.

—¿Hubo algún problema con tus padres?-preguntó Luana, con una expresión de preocupación en su rostro.

Resulta que los padres de Bryan y Noah están de viaje, Jackson Salvatore está enfermo y buscan tratamiento, por lo que Luana solo podía pensar lo peor.

Bryan sonrió y dijo:

—Eres raro, a veces pienso que no te gusto, nos vemos todas las semanas, y mis padres solo te llaman de vez en cuando, te caen muy bien, te lastimé ahora – dijo con ganas de tocar el corazón de Luana, pero la joven hizo caso omiso a esas palabras, por lo que Bryan volvió a hablar:

—No importa eso, bueno, mis padres llamaron y dijeron que regresarían a casa, papá ya está curado y ahora solo quiere disfrutar de su familia y por eso Noah, Anny y yo también regresamos a casa, hoy "incluso traje a mi cosas", dijo Bryan, casi haciendo llorar a Luana de desesperación.

Desde el día que cerró el trato con el abogado de Noah ha vivido sola en esta mansión, solo Bryan la visitó, por lo que será difícil querer mostrarle al mundo una relación que nunca existió.

—Entonces tenemos que encontrar una manera de engañar a tus padres, porque ciertamente no podré demostrarles un amor que nunca antes había sentido", dijo refiriéndose a que tendrá que fingir una relación con Noah.

Resulta que Noah les dijo a sus padres que estaba en una relación seria con Luana, ella apareció embarazada y desde entonces viven juntos, pero eso nunca sucedió y como son muy inteligentes, Emily y Jackson definitivamente se enterarán rápidamente. ¿ellos?

—Bueno, creo que va a ser difícil, pero va a funcionar, además pronto vas a romper y vas a renunciar al niño, dijo Bryan espontáneamente sin darse cuenta de lo mucho que le dolía a Luana.

—Cierto, tu hermano podría venir un poco antes, tenemos que ensayar, al fin y al cabo nunca lo he visto y esto hay que hacerlo antes, no quiero pasar ninguna vergüenza – dijo Luana y luego fingió mirar el momento en que, en realidad, sólo quería ocultar su dolor.

—Yo también pensé en eso, pero Noah está muy ocupado en la empresa y solo podrá venir por la noche.

—¡Oh noticias!-se burló Luana al recordar las veces que estuvo enferma, o incluso emocional por el embarazo y solo necesitaba alguien con quien desahogarse, pero Noah nunca quiso conocer a la mujer que estaba gestando a su hijo, eso es ridículo, pero sucedió. y dejó marcas en el corazón de Luana.

Antes de que Bryan pudiera dar su opinión sobre el asunto, una voz espesa e imponente resonó en la gran sala.

—¿Por qué siento que hay un poco de burla en tus palabras? ¿Les debo explicaciones sobre a qué me dedico?- dijo Noah con una voz llena de enojo que Luana y Bryan no sabían de dónde venía.

Con la cabeza gacha, Luana sintió un escalofrío recorrer su espalda, sintió tanto miedo que de repente vio su cuerpo temblar, miró hacia la puerta principal y al encontrarse con aquel hermoso hombre se rió amargamente y lo miró por unos cuantos segundos, tratando de entender cómo un chico tan guapo como ese podía ser tan grosero, ¡oh desperdicio!

—Buenos días a ti también, hermanito, dijo Bryan y luego fue a darle un abrazo a su hermano, jugueteando con su celular, ignorando por completo la llegada de Noah.

Acostumbrado a ser adulado por mujeres en todas partes, Noah le indicó a Bryan que saliera de la habitación y así lo hizo, dándose cuenta de que Luana también iba a hacer lo mismo, pero Noah de repente dijo:

—No te atrevas a dejarme solo, después de todo, no tienes nada que hacer”, dijo sonriendo.

—¿Por qué siento que hay un poco de burla en tus palabras? ¿Te debo explicaciones sobre a qué me dedico?- dijo Luana, repitiendo las palabras de Noah y haciendo que su sonrisa simplemente desapareciera.

Luana Ríos, 25 años.

Noah Salvatore, 27 años