Capítulo 10
Decisiones difíciles
Subo a mi casa. Me quito mis zapatillas en la puerta y dejo el abrigo en el perchero
Toco mi mejilla y cierro mis ojos aun sintiendo mi corazón demasiado acelerado y esto se debe a ese pequeño beso que me ha dejado Axel.
Cuanto me gustó que lo haya hecho.
Paso al baño a ducharme y luego me coloco la pijama. Mañana tengo un día de locos así que me tumbo en la cama esperando a dormirme rápido, pero el recuerdo de ese pequeño beso me impide conciliar el sueño.
《 ¿Por qué estaba ahí a esa hora? ¿De verdad estuvo esperándome todos estos días? ¡Está loco! 》
Pienso y sonrío ampliamente
Amaneció y me despierto con los primeros rayos de luz que se cuelan por mi ventana. Voy al baño a asearme y escucho que tocan mi puerta.
Envuelvo mi cuerpo en una bata de baño y salgo a la puerta de entrada
—He venido a ayudarte
—¿Tú que haces aquí? No entiendo... ¿Y tu trabajo?
—Nuestro jefe me ha dado órdenes de venir a ayudarte con tus cosas. Lo que sea que necesites es mi deber ayudarte —me dice Diana y me abraza— Me duplicó el sueldo del mes, solo por venir a auxiliarte
—La supo hacer... Justo en este momento comenzaba a entrarme un arrepentimiento
—¿De que estas hablando?
—Es difícil para mí, Diana. Tengo miedo
—Estoy notando que te ves muy nerviosa, ¿Qué sucede?
—Siento que estoy al límite. Tengo miedo de que algo pase, voy a ese lugar contando solo con Steven y si supieras, en la boda se me torció un poco, hubo un momento en que me dejó sola y le prestó toda su atención a su ex
—Tu tranquila reina, no creo que vuelva a hacerlo, ¿No le comentaste?
—No, Luego de eso no volvimos a tocar más esos temas. Pero hacer ver que tienes una relación con tu jefe y recibir dinero a cambio... Me parece bastante raro. No sé qué hacer. Este sentimiento que tengo ahora es como de arrepentimiento
Diana me abraza de nuevo, realmente esto es justo lo que necesito en este momento, es muy reconfortante su compañía y lo agradezco. Por otro lado, pienso en él, aquel encuentro con Axel me está haciendo dudar acerca de ir a este paseo. El me gusta mucho y es algo mucho más fuerte de lo que sentí en aquel beso que me dio Stev... Pero está claro que necesito de ese dinero que el me ofrece y aparte. No quisiera que ese hombre verdaderamente se salga con la suya y destruya el bufete que con tanto esfuerzo y dedicación ha mantenido mi jefe.
Termino de empacar mis cosas. Todo lo que voy a usar los últimos diez días, aunque a decir verdad, llevo todo lo mejorcito que tengo
—¿Qué estás haciendo? —interroga Diana muy confundida— ¿No te dije que nada de ropa?
—No, no me dijiste.
—Solo empaca las cosas de tu uso personal, ese hombre ha encargado algunos vestidos para ti, trajes de baño, zapatos y joyas. Tenemos que pasar a recogerlos en un rato. Ve a vestirte
—Parece que se está tomando muy en serio este asunto... Como un novio falso le doy cinco estrellas
Bromeo un poco y Didi se ríe a carcajadas
—¿En vez de eso porque no tratas de hacer que sea un novio real?
—No comiences Didi, eso no pasará. Esto es como un trabajo y seré una profesional.
Terminé de arreglarme y la camioneta que envió Stev para buscarme había llegado. En ella estaban dos enormes maletas, que el había enviado para mí.
Dejamos a Diana en su casa. Antes de bajar del vehículo me abraza una vez más
—Es hora de que hagamos frente a los acontecimientos, él necesita de tu ayuda y tú necesitas el dinero. Hazlo bien y no dudes en llamarme si algo pasa, recuerda que siempre estaré para apoyarte
—Lo sé —resopló mirando al piso y en silencio. Pensando en hablar con Steven y echar todo esto atrás—.
Justo en ese momento en el que estaba pensando renunciar a todo esto, recibo un mensaje de mi madre
>> Mari, mi niña, ¿Estás ahí?
<< Así es mami. ¿Sucede algo? Estaré ausente unos días. Justo en este momento iba a informarte sobre esto. ¿Qué tienes?
>> ¿Para dónde vas? ¿Por cuántos días te vas, mi niña? Voy retrasada con los pagos de la hipoteca, creo que voy a perder la casa. ¡No sé qué hacer!
Esta noticia me resultó impactante. No puedo creer cuan mal estamos económicamente y por tantos años ha sido mi madre quien se ha hecho cargo de todo sin decir una sola palabra. Es mucha presión para una sola persona, de no haberse quedado desempleada estoy segura de que no me hubiera hecho saber cuan mal estamos
Ella debería estar demasiado estresada en estos momentos. Mi madre debe estar entrando en pánico. Necesito hacer algo para que se tranquilice. Muero de nervios, no quiero que vaya a enfermar debido a las preocupaciones
<< Lo siento mucho mamá. ¿Por qué no me hablaste de esto antes? ¿Cómo es que pretendes soportar esta situación tu sola?
>> Estoy en las últimas, mi niña, siento que no puedo más. Estas preocupaciones me están consumiendo
<< ¿Cuántos días hay de plazo para pagar?
>> Cinco días. ¿A dónde iré con tus hermanas? He pensado en vender algunas cosas de la casa, pero eso llevará más tiempo.
<< No vas a vender nada, te lo prohíbo ¿Eh? Sácate eso de la cabeza. Hablaré con mi jefe, el podrá ayudarme. Lo resolveremos juntas, ¿Sí? Ya no llores
>> Gracias mi pequeña. Muero de vergüenza contigo. No quiero que te sigas sacrificando por nosotras. Pero te prometo que te ayudaré a pagarle a tu jefe. Parece que me van a dar un empleo en otra escuela. Pero debo esperar al menos dos semanas para que la coordinadora me entregue el cargo, sabes como es esto.
<< ¡Perfecto! Estaremos bien. Ya verás. Nos mantendremos en contacto mami.
>> Gracias mi niña, te quiero tanto
<< Yo también te quiero mami.
...
Suspiro profundamente, esta realidad me da una fuerte patada en el hígado.
Desperdiciar la oportunidad de ganar ese dinero que me ofreció Steven es una locura. Pero ahora mismo debo decirle que necesito un adelanto para pagar esa hipoteca
Llegamos a casa de Steven. Resulta que es un lugar bastante lujoso y muy lindo. En una zona residencial muy acomodada
Él me hace pasar y me dice que me ponga cómoda mientras termina de prepararse para salir.
Yo lo saludo y le extiendo la mano para entregarle el documento que redacté junto a Diana la noche anterior
—Vaya, eso fue bastante rápido —sonríe—. Leeré solo las cláusulas, debido a que tengo prisa, confío en ti. Pensé que no te decidirías ahora misma
—Debo decir que otros han tomado la decisión por mí. Así que aquí estamos
—¿A que te refieres con eso? Mari, te ves triste. ¿Quieres hablar de lo que te sucede? —Se acerca a mí y acaricia mis mejillas—
—Tan solo son pequeños problemas económicos. Aunque no tan pequeños a decir verdad. Es mi madre
—¿Quieres hablarme al respecto?
—Mi madre acaba de decirme que va retrasada con los pagos de la hipoteca. Sé que esto no es parte del trato, Stev... Pero quería pedirte de favor que me hicieras un adelanto de este pago. Me comprometo a dar lo mejor de mí para que esto funcione
—Es una pena, de verdad siento mucho lo de tu madre. Pero cuenta con eso. Te echaré una mano. ¿Ella está al límite?
—Así es. Tiene hasta el fin de mes para pagarlo
—Lo comprendo, Mari. No crecí siendo rico. Mis padres tenían dos empleos cada uno para poder sustentar nuestras necesidades. Hasta que mi madre murió cuando yo tenía dieciséis. Desde ahí tuve que trabajar en un empleo de medio tiempo, para ayudar a papá con los gastos
—¡Oh Dios! Siempre he pensado que eras un niño rico de cuna, la verdad. Creo que te juzgué mal.
—Pues nada de eso, yo también ejercí mis estudios gracias a las becas. Y aquí estoy. Por eso siempre te he dicho que no te rindas. Veo en ti a una igual. Serás grande en un par de años. Ya verás
Al escuchar todas esas palabras me quedo muy impactada. Jamás podría imaginar que este hombre viniera de una familia tan humilde. Es por eso que a pesar de todo el dinero que tiene, siempre suele ser sencillo
—Si todo marcha bien en este viaje, te prometo que voy a asegurarme de que tu familia conserve su casa
—Gracias Stev... Eres muy amable
De pronto, la gratitud se apodera de mi. Me acerco demasiado a él y rodeo su cuello con mis brazos. Él duda por un momento, pero de igual manera envuelve mi cuerpo entre sus brazos y esta situación se hace mucho más incómoda cuando al separarnos quedamos demasiado cerca el uno del otro
—Lo siento Stev... Fue un impulso —le digo nerviosa— No quería invadir tu espacio, estaba siendo agradecida
—Comprendo perfectamente, no fue una molestia, Mary.
Me temo que ya no podremos llamarnos por nuestros nombres. Será raro. ¿Alguna idea?
—¿De que estás hablando? No entiendo
—Cariño, amor, mi cielo... Me refiero a esas cosas.
—Bien. Como nos sintamos más cómodos en el momento, ¿De acuerdo? —le digo y el sonríe—
—Entonces te diré "mi princesa"
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 67 Episodes
Comments
Lorena Tello
No confío en la madre. Mmm. Rara
2024-09-12
0
Zuleyma Ruiz
Hay algo aquí que no me da confianza
2024-04-17
2
Zuleyma Ruiz
porque ya tenemos a Axel, ese va a ser su novio real
2024-04-17
0