Estaba en la cama de Patrick, ambos había tenido intimidad y no se lo podía creer, Ellie miró su cabello oscuro y espalda ancha, era como si no existiera nada más en el mundo, él acariciaba su muslo y ella lo miraba con adoración, aún sentía vergüenza, Patrick había sido cuidadoso con ella en todo momento la había hecho sentir cómoda, incluso para ser su primera vez... Ya antes había tenido novio, se había besado con él, pero... No había sido capaz de ir más allá.
Patrick miró a Ellie con una sonrisa, acariciando suavemente su muslo
-¿En qué estás pensando?-Le preguntó, con. voz baja y suave.
Ellie lo miró con adoración , con él cerca de ella, disfrutando de la calidez de su cuerpo y la conexión que habían establecido. Patrick quería saber qué pasaba por la mente de Ellie, qué sentimientos la invadian después de ese momento de intimidad sexual, así que sigui acariciándola, sin dejar de mirarla, buscando respuestas en sus ojos.
-Es que... Pensaba en nosotros, en mí... Me da algo de vergüenza decirte. -Ellie señaló penosa.
Me río suavemente y me acerco más a ella, besando su frente.
-No hay nada de lo que debas avergonzarte conmigo, Ellie.- le digo, mi voz llena de calor y comprensión. -Estoy aquí para escuchar, para entender. ¿Qué es lo que te preocupa? -La mano de Patrick se deslizó hacia su mejilla, acariciándola suavemente.
»¿Es sobre lo que hemos compartido?" -Patrick continuó preguntando con duda en sus ojos-¿Te sientes incómoda?
La voz de Patrick no es la misma de siempre, le infunde calma, además porque no ha dejado de mirarla, como si deseara que se sintiera segura para hablar sobre sus sentimientos. Ellie pensaba contestarle cuando de repente, se escuchó un golpe en la puerta. Patrick se tensó un poco, no esperaba visitas. ¿Quién podría ser?
-¡No! Patrick no me siento incómoda, me hiciste sentir segura... Tan deseada... -La miró con sus mejillas encendidas. -Es que... Fuiste el primero... Eso... ¿Te incómoda? -Y pensaba que no había sido lo suficiente.
La expresión de Patrick se suavizó, y su corazón latió con emoción.
-Ellie…-Él susurró, con su voz llena de ternura. -No, no me incómoda. Me honra que hayas confiado en mí para compartir ese momento contigo.
La mano de él se deslizó hacia su cabello, acariciándolo suavemente.
»Me siento afortunado de haber podido ser tu primer amor. - Él habló con su mirada fija en la suya. -Y te prometo que haré todo lo posible para que siempre te sientas segura y deseada conmigo. -La boca de él se curvó en una sonrisa.-Gracias por confiar en mí, Ellie. Significa todo para mí."
Justo en ese momento, el golpe en la puerta se repitió, esta vez más insistente. Patrick frunció el ceño, no quiero interrupciones en este momento.
»Un momento, -Patrick dice, besando su frente. -Voy a ver quién es.
Él se levantó de la cama, ajustando su ropa mientras se dirigía hacia la puerta. Patrick abrió la puerta e Ivonne sonrió picarona, tenía unos jeans ajustados y una camisa de los Yankies, le mostró un pack de cerveza y papás de bolsa, movió ambas cosas y le sacó la lengua.
-Creí que podríamos jugar, ver el partido y pasar el rato.-Hablo entusiasta.
Él se sorprende al ver a Ivonne en la puerta, especialmente con esa sonrisa pícara y esa ropa ajustada. Me siento incómodo, sabiendo que Ellie está dentro, en mi cama.
-Ivonne, no es un buen momento. -Digo, intentando mantener la calma. -Estoy ocupado.-Miro hacia atrás, hacia la habitación, pensando en Ellie y en lo que estamos compartiendo.-Además, no creo que sea una buena idea. -agregó, mi voz firme pero educada. Ya sabes que estamos en diferentes lugares ahora.
Ivonne lo miró con una ceja levantada y su sonrisa se desvaneció un poco, como si la decepción la invadiera.
-¿Qué pasa, Patrick? ¿Te has vuelto celibe? -Pregunta con su voz llena de sarcasmo. -Frunzo el ceño, no quiero discutir con ella, especialmente ahora.
-Simplemente necesito tiempo para mí.- Patrick le dijo, intentando cerrar la puerta.
Pero Ivonne se apoyó en la puerta, impidiendo que la cerrara.
-¿Quién está dentro?- Preguntó molesta y su mirada era penetrante. -¿Otra chica?"
Mientras tanto en la habitación Ellie se puso una camisa de Patrick y al ver que demoraba decidió salir a buscarlo, estaba roja y sudorosa, Pero contenta, no pensó que Patrick tomara las cosas tan bien, estaba realmente enamorada. Salió para buscarlo y al no verlo lo llamó.
-¿Patrick? -Lo buscó con la mirada.
Patrick estaba en la puerta, tratando de deshacerse de Ivonne, cuando escuchó la voz de Ellie. Se sentía culpable y nervioso, no quería que Ellie viera a Ivonne en su casa después de tener sexo.
-Ellie.-Patrick habla en voz alta girando hacia ella, intentando sonreír. -Estoy aquí. -La mirada de Patrick se cruzó con la de Ivonne, advirtiéndole que se fuera. -Lo siento, Ivonne- dice, firme. -No es un buen momento.
Ivonne me lanzó una mirada irritada, pero finalmente se dio la vuelta y se fue, murmurando algo entre dientes. Él soltó el aire y se acercó a Ellie, que estaba radiante en su camisa, y además tenía el cabello despeinado con su rostro sonrojado.
-Lo siento. -Digo, besando su frente. -No esperaba visita. -La mirada se fijó en la camisa que ella lleva puesta, sonriendo. -Te queda bien. -Le dijo acariciando su cabello.
Ellie sonrió ante él cumplido no obstante miró la puerta pensativa y luego lo miró a él, sus ojos cándidos lo escaneaba no entendía porque de repente había cerrado la puerta como si escondiera algo.
-Lo siento no quería espantar a tu visita. -Ellie lo miró a los ojos nerviosa.
Patrick se siente incómodo bajo la mirada inquisitiva de Ellie. Quiere tranquilizarla, hacerle saber que no hay nada que ocultar, aunque se sentía que si.
-Ellie, no hay nada que disculpar.- Expresó tomándole la mano. -No era nadie importante. Solo una... amiga del trabajo. -Patrick le tomó la mano a Ellie, intentando transmitir sinceridad.-No tienes que preocuparte.- agregó, con voz suave. -Estoy contigo, solo contigo. -Mi mano se desliza hacia su cintura, atrayéndola hacia mí.
Ellie apretó sus labios, no entendía porque de repente sentía una opresión en su pecho, como si no esperara esa declaración, como si quisiera justificarse.
»¿Qué pasa? -Preguntó Patrick notando su nerviosismo y su repentino mutismo. -¿Te sientes incómoda?.
La mirada de Patrick escaneó el rostro de ella, buscando entender sus pensamientos. Deseaba hacerle saber que estaba allí para ella, que no había nadie más. ¿Cómo podía convencerla de que todo está bien?
Ellie asintió, al parecer solo una compañera de trabajo había llegado y ella pensaba de más, es que a veces se sentía insegura porque había escuchado sobre la ex de Patrick por Sofi, no mucho solo que trabajan juntos y se habían llevado muy bien, era una chica abierta, con gustos muy similares a los de él, atlética... Mientras ella era una chica más bien femenina, sus gustos eran diferentes, no tenían que ver con fútbol o videojuegos... No, a ella le gustaba el ballet, la música clásica, la poesía, los recitales...
-Te creo Patrick, sé que no me engañarias.
Patrick se siente aliviado al ver que Ellie le cree. Su confianza en mí significa todo.
-Gracias, Ellie- Digo, besando su frente. -Significa mucho que confíes en mí.
Era agradable saber que Ellie no solamente tenía belleza exterior, sino que además de manera interna, pensó que se formaría una pelea interminable, en cambio la sonrisa cándida de Ellie le daba paz. La mano de Patrick se deslizó hacia su cabello, acariciándolo suavemente, era rubio, suave y olía a manzanilla
Ellie asintió y él miró sus ojos azules y vivaces sus labios sensuales.
-Ven aquí- Dijo con su voz baja y sensual.
Patrick la tomó por la cintura y la atrajo hacia él, besándola apasionadamente. Ella se derritió en sus brazos, respondiendo a su beso con igual pasión, sus bocas chocaron con fuerza y deseo, Patrick la cargó en brazos y la llevó de vuelta a la cama, depositándola suavemente sobre el colchón. El se acuesto al lado de ella, mirándola con deseo y adoración.
-Quiero volver a tenerte en mis brazos. -Dijo con deseo.
-Yo también te deseo Patrick.
Y sin decir más, se sumergieron en un beso apasionado, perdiéndose en la intimidad del momento, jamás se había sentido de esa manera, Patrick la miraba con adoración y tocaba su cuerpo con experticia. Después de un día lleno de pasión e intimidad, Ellie y Patrick finalmente salieron de la cama, sonriendo muy relajados.
-Estoy muerta de hambre- Dijo Ellie, riendo.Patrick la tomó de la mano.
-Vamos a comer algo entonces.
Salieron de la habitación y se dirigieron a la cocina. Patrick preparó unos sandwiches y Ellie se sentó en la barra, observándolo.
-Me encanta verte así. -Dijo Ellie, sonriendo.-Relajado y feliz.
Patrick se acercó a ella y la besó en la frente, pero no le dijo nada, a veces era tan misterioso, lo vio sentarse y mostrarle un sándwich algo quemado, pero no le importó, finalmente él tuvoq consideración de hacer algo por ella.
-Pensé que solo sabías hacer Fetuccini. -Ellie tomó el sándwich y Patrick se acercó a ella dándole un beso en su mejilla.
-Ahora te burlas de mi.
-Es que los hotcakes de esta mañana estaban deliciosos.
-Pequeña Ellie, solo leí la receta, no es nada del otro mundo. -Ellie se ruborizó y asintió.
-Tienes razón, no todo el mundo es tan malo en la cocina como yo.-Patrick le dió un beso en la nariz.
-Eres buena en otras cosas.
Ellie asintió y él se sentó a comer con ella y por unos minutos disfrutaron del silencio y la compañía del otro. Ellie lo miró pensativa, deseaba saber más cosas sobre él, pensaba que lo conocía del todo, así que rompió el silencio:
-Me gustaría saber más sobre ti- Le dijo mientras miraba el sándwich.- ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? -Patrick la miró y mastico pensativo.
-Me gusta correr, leer y pasar tiempo al aire libre, Y a ti, ¿qué te gusta hacer?
La conversación entre ellos fluye fácilmente, y Ellie se siente cada vez más cómoda y conectada con Patrick.
-No imaginé que te gustara leer. -Ellie lo miró asombrada-Creí que eras más de acción y bueno con la cantidad de consolas de vídeojuegos que tienes en tu sala.-Patrick se ríe y sacude la cabeza.
-Sí, me gusta la acción y los videojuegos, no puedo negarlo", dice sonriendo. Pero también me gusta relajarme con un buen libro. Me ayuda a despejar la mente y a reflexionar".
Se inclina hacia adelante, con una mirada intensa.
»Además, después de todo lo que he visto en mi trabajo, necesito algo que me permita desconectar y escapar de la realidad. -Le Explicó.
Su expresión por un instante se volvió más seria, pero luego se relajó mostrando su sonrisa de nuevo.
»No soy solo un tipo de acción, Ellie. Tengo muchas facetas. -Le dijo guiñando un ojo.
Ellie se rió sintiéndose intrigada por esta nueva faceta de Patrick.
-¿Qué tipo de libros te gustan?- Preguntó Ellie curiosa.
Patrick se recuesta en la silla, pensativo.
-Me gustan los libros de historia, biografías y algunos clásicos de la literatura. -Expresó con esa dentadura perfecta, notando que se le formaban pequeños hoyuelos- Y a tí ¿qué te gusta leer?"
Ellie se sonrojó, se sintió tonta por juzgarlo, apenas lo conocía y era verdad, la vida militar era desgastante lo sabia por sus padres, así que era obvio que él buscará salir de ese mundo.
-Me gusta leer partituras, sobre todo, aprenderlas de memoria y luego practicarlas.-Ellie le dijo con una sonrisa tímida.
Patrick se sorprendió y se sintió fascinado por la respuesta de Ellie.
-Partituras. -repitió, sonriendo.-Se me olvidaba que estudias música. -Su mirada se iluminó con interés y curiosidad. -Me encanta- Patrick dijo pensativo.- Nunca he conocido a alguien que lea partituras y las aprenda de memoria. Tocas el piano ¿Cierto? -Ellie asintió y él se inclinó hacia adelante, acercándose más a Ellie -Quiero escucharte tocar. Le expresó pícaro.
Ellie se siente aliviada de que Patrick no la juzgue y se siente cómoda compartiendo su pasión por la música.
-Si, responde, sonriendo. "Toco el piano. Me gusta tocar Chopin y Debussy. -Hizo una pausa--De hecho quería pedirte el favor si podría traer un piano de cola para practicar... -Lo miró apenada.
Patrick se rió y sacudio la cabeza, sonriendo.
-Un piano de cola- repitió. -No esperaba eso, pero me encanta -Alejó el plato vacío y se acercó a Ellie, tomándola de la mano. -Claro que sí, puedes traer un piano de cola -Hizo una pausa-Me gustaría escucharte tocar en mi casa.
Su mirada se volvió seria por un momento, Ellie era dulce y algo sensible deseaba mostrarle que era bienvenida en su casa.
-De hecho, me gustaría que te sientas en casa. -Acarició su barbilla -Trae lo que necesites, incluyendo el piano.
Ellie se sientio aliviada y agradecida por la respuesta de Patrick, a veces le daba vergüenza sobre todo después de lo ocurrido entre ellos.
-Gracias.- mostró una sonrisa genuina.- Significa mucho para mí.
Patrick la atrajo hacia él y la besó suavemente.
-Quiero que seas feliz aquí.- dijo. -Y si un piano de cola es lo que te hace feliz, entonces a mí también.
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