PRIMER DIA DE TRABAJO.

La semana transcurrió rápidamente, Sonia aprovecho ese tiempo para ir y conocer un poco los alrededores, tampoco quiso adentrarse mucho, aunque sabe que sería fascinante conocer todo, pero también puede hacerlo en otro momento y tranquilamente.

Sus nervios están a flor de piel, no es la primera vez que trabaja, pero no puede evitar sentir angustia por que su vieja yo pueda salir a flote, sobre todo con aquellos que quieran molestarla, aunque eso seria en defensa propia, pero lo que menos desea en estos momentos es perder esta nueva oportunidad tan rápidamente.

Se encuentra frente al espejo, ve el mismo reflejo de lo que era antes físicamente, aunque ahora su ropa es más elegante, profesional y menos reveladora, pero internamente ha cambiado bastante, aunque sigue teniendo un fuerte temperamento ya no desea humillar a otros solo por gusto, si hay algo que le enseño la pequeña Mia es que todos somos humanos y cometemos errores, pero que debemos ver más allá de lo que nos molesta, todo tiene un motivo y una razón, y todos merecemos una nueva oportunidad.

-       Buenos días Srta. Jones, espero haya tenido un agradable descanso

-       Buenos días, Jordán, así es

-       Me alegra, porque lo que menos va a tener estos días es eso

-       ¿Por qué lo dice?

-       Ya lo vera (esto ultimo lo dice con una sonrisa mientras suben al auto)

Sonia no dice nada más y sube al auto, el recorrido es en completo silencio, a los pocos minutos se encuentran frente a un gran edificio, Jordán le ayuda a bajarse del auto y la guía hasta la entrada, al llegar a recepción los recibe una chica muy amable, esta le entrega su gafete de identificación y los documentos del contrato que dejo recursos humanos, el moreno le indica que lo siga, todos se quedan observándola, algo que la inquieta, lo que menos desea es ser el foco de atención de todos.

-       Bueno bienvenida a tu primer día de trabajo, esta será tu oficina, aquí muy poco utilizamos cubículos, además tu serás la mano derecha del presidente, por el momento trataremos de ponernos al día rápidamente con todo lo atrasado, lleva bastantes días sin asistente y la secretaria no es que ayude mucho (esto lo dice con fastidio).

-        Bien, me gustaría leer el contrato para después firmarlo

-       No hay problema (se da la vuelta para salir) ah, por cierto, allí en la laptop esta toda la información de la empresa, la agenda esta en la Tablet, pero por el momento debemos organizar todo lo que esta sobre ese escritorio (le señala una montaña de papeles que están a un lado) todo es urgente, yo llevare la agenda y todo lo demás mientras te organizas, después te presentare con él, por ahora es mejor desenredar todo esto.

-       Entiendo, no hay problema, yo me encargo (el hombre asiente y sale del lugar mientras ella deja salir un suspiro observando todo el desorden que hay en el lugar), creo que tenia razón… no descansare en un buen tiempo, pero bueno, con energía positiva.

Así, con una gran sonrisa en su rostro Sonia comienza a organizar todo el lugar, primero comienza con lo de mayor importancia y relevancia, así poco a poco se va familiarizando con todo nuevamente, lo bueno de todo esto es que es lo mismo de la empresa de Lizandro y eso le ayuda a ser un poco mas rápida, pero a pesar de trabajar diligentemente queda agotada al final del día, sobre todo al escuchar como su estomago comienza a hacer ruidos extraños y es cuando recuerda que no ha comida nada desde esta mañana, observando su almuerzo intacto a un

lado, pero su cansancio aumenta mas al ver que el desorden aun no disminuye, “vaya, creo que demorare más de lo estipulado”.

-       Srta. Jones… ¿cómo estuvo su día? (la mujer brinca por la sorpresa)

-       Dios, me asusto

-       Vaya, no pensé que fuera tan tenebroso

-       Lo siento, es que estaba observando el lugar, a pesar de haber hecho muchas cosas, todo está como si nada

-       Si… yo se lo advertí

-       Si, solo que no pensé que fuera tanto

-       No se preocupe, tómese su tiempo, la llevo

-       Bien, ya tengo mis cosas

Salen de la oficina y a lo lejos puede ver una figura de hombre la cual se le hace algo familiar, este va acompañado de una mujer con un niño, pero antes de que lleguen hasta donde están ellos, estos ingresan al ascensor.

-       Es nuestro jefe, pronto lo conocerás, es bastante serio pero buena persona

-       Bueno, por lo menos no es gruñón

-       Que jefe no lo es

-       En eso también tienes razón

-       Bien, estos días yo te llevare y te recogeré, mientras te entregan tu auto

-       ¿Me darán un auto?

-       Así es, debes estar disponible en todo momento, por eso buscábamos a una persona que no tuviera ninguna responsabilidad personal aparte de su vida privada, a veces hay que hacer viajes de improvisto y casi siempre tu eres quien debe acompañar al presidente, otras veces el se queda en casa por su familia y siempre pide uno que otro documento importante y hay que llevarlo a donde él este

-       Vaya, ahora comprendo el porqué de ese salario.

-       Así es, eso recompensa tu esfuerzo y tiempo.

-       Entiendo.

-       Bien, es hora de ir a casa.

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