así es, además de que usted cometió un crimen tan grave no estoy en mis horas de oficio, solo estoy ayudando a mi amigo. Dijo Fabian
- ¿eso quiere decir que no se la llevarán? Pregunto su hija menor
- no y si la señora tiene algún cargo de conciencia puede aproximarse al cuartel y confesar su crimen.
- señor policía, ahora mismo mis hijas me necesitan, cuando ellas tengan como sobrevivir, me entregaré. Dijo Melida
- ¿en serio puede ver a mi hermana?
- así es
- Cindy me duele mucho que hayas muerto, recuerdo que siempre nos protegías de nuestro padre, eres la mejor hermana mayor que pudimos tener
- Pregúntale si aún esconde caramelos debajo del colchón
Ian le hizo la pregunta y Estela lloro mucho más de lo que estaba llorando.
- si está aquí mamá, el señor dice la verdad
- si hermana, seguimos escondiendo los caramelos, a nuestra madre no le gusta que comamos dulces. Dijo la hermana menor
- dile a mi madre que escuche lo que decía cuando oraba, dile que la perdono.
Ian le dijo lo que había dicho Cindy y Melida le agarro las manos a Ian y llegó de rodilla a sus pies.
- es mi hija, señor, es mi niña. Decía Melida
- ¿mamá que es lo que decía? Pregunto Lidia
- le pedía perdón por abandonarla, por no protegerla, todos los días he sufrido por no defenderla con mis propios dientes, ¿cuánto sufriste mi amor? Soy una mala madre.
- usted no es una mala madre, no había nada que usted pudiese haber hecho
- después de que ese desgraciado muriera, debí de avisarle a la policía de su desaparición, quizás la hubiera encontrado viva.
- no mamá, no me hubieses encontrado, ni yo misma sé que hicieron con mi cuerpo, creo que morí el mismo día en que me violaron. Dijo Cindy
- dice que no la hubiese encontrado, ese mismo día murió.
- que luz tan hermosa, ¿puedo ir? Pregunto Cindy
- sí, ve a ella.
- no me pude despedir de mi amiguita, ¿podría decirle que fue una hermana para mí?, dígale que gracias por su amistad, los demás niños se la pierden.
- está bien, yo se lo digo. Dijo Ian riendo
Cindy le dio un beso a su madre y a sus hermanas y fue directo a la luz.
- ¿ya se fue verdad? Pregunto su madre tocando su mejilla
- así es.
- sentí un frío en mi mejilla. Dijo Estela
- yo también lo sentí. Dijo Lidia
- bueno nosotros nos retiramos, cuídense mucho. Dijo Ian despidiéndose
- adiós señor y muchísimas gracias que Dios se los pague. Dijo Estela.
En el camino Ian le pregunto a Fabián si no tendría problemas por ocultar el asesinato
- esto solo queda entre nosotros, sé que nadie se merece una muerte tan horrible, pero ese hombre era muy malo. Dijo Fabián
Cuando Ian llegó a la casa, Amalia corrió a recibirlo.
- Papi, ¿encontraste a la familia de Cindy?
- de eso te quería hablar, no quiero que estés invitando espíritus a casa. Dijo Ángela
- tranquila amor, la niña lo necesitaba. Dijo Ian
- papá, no me has respondido.
Ian sabía que a su hija le iba a doler la ausencia de Cindy, era la única amiga que tenía.
Se agachó para estar al mismo tamaño que su hija y le dijo
- hija, pudimos encontrar a la familia de Cindy, gracias a Dios y a ti están bien.
- que bueno papi, que bueno, ¿dónde está Cindy?. Pregunto Amalia
- Cindy se ha ido cariño, pero antes de ir a la luz me dijo que te diera las gracias por tu amistad, dijo que te quería como a una hermana.
Amalia se puso a llorar
- me quedé sin amiga papá, ahora con quién jugaré
Ian la levantó y la abrazo
- lo siento princesa, tengo fé que harás más amigas.
Amalia se durmió de tanto llorar, eran las una de la mañana y Ian estaba dando vueltas para dormir.
- ¿qué te pasa amor?, ¿porque estás tan inquieto? Pregunto Ángela
- no lo sé, siento que algo va a suceder.
Amalia estaba dormida, cuando sintió que le tocaban el cabello, abrió los ojos despacio.
- Amalia, mi niña
- abuelita, ¿qué haces aquí?
- vine a despedirme cariño
- ¿para donde vas? Pregunto Amalia
- me voy a descansar.
- ¿a descansar?
- si cariño, ya la abuelita está cansada de estar en esa celda fría, he venido a decirte adiós
- no te vayas abuelita, por favor no nos dejes.
Amalia empezó a llorar, Ian y Ángela la escucharon y fueron corriendo a su habitación
- ¿que pasa hija? Pregunto Angela abrazandola.
Ian vio a su abuela y entendió por qué Amalia lloraba.
- Abuela. Dijo Ian con una voz triste
- hijo mío, regalo de mi corazón.
- ¿qué le ha pasado? Hace unos días estaba bien. Dijo Ian
- estoy cansada, creo que mi castigo ha terminado. Dijo Paula
- abuela, ¿qué será del abuelo? Pregunto Ian
Cuando Ian termino esas palabras, apareció su abuelo.
- Amorcito, sabía que estarías aquí. Dijo Cristian
- oh Cristian, ¿tú también? Dijo Paula abrazando a su esposo
- ¿pensaste que te ibas a deshacer de mí? Ni la muerte podrá separarnos. Dijo Cristian
Amalia seguía llorando al igual Ian
- abuelo, ¿Amelith sabe que falleció? Pregunto Ian
- ¿tu abuelo también está aquí? Pregunto Angela
- abuelo, ¿también te vas? Pregunto Amalia sollozando
- si mi niña, es hora de irnos.
- ¿que le diré a Amelith abuelo? Pregunto Ian
- dile que gracias por cuidar de este viejo.
- ¿solo eso?
- dile que ustedes y mis bisnietos han Sido el mejor regalo que me dejó mi amado hijo, los quiero mucho
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Updated 168 Episodes
Comments
Rosa María Corrales Pèrez
Espero que no le pase nada a Amalia su padre presiente algo que va pasar
2024-06-17
5
Lucia Feliciano Falcao
El presentimiento de Ian si hizo realidad.😢😢😢
2024-05-17
1
Rosa Gamero
me gusta este libro
2024-05-10
0