Capítulo 8

Bastian:

Renata se quedó aparragada en la puerta, Kenji sacudía las cadenas, ella empezó acercarse. La niña tuvo la atención hacia Renata.

Elena: Reni, si la hará hablar.

Bastian: no lo dudo, ha sido la única que desde que entró la miró.

Le di un sorbo a mi café, sabía Renata como me gustaba el café tanto que me había pedido hasta con la medida exacta de crema. Negué con la cabeza, lo que hace para que le conceda lo que ella quiere, y claro que se lo concederé.

Renata: Hola. Soy Abogada, me llamo Renata Nunier y mi especialidad es en derecho Penal para la protección de los menores, tú eres una menor de edad. ¿Entiendes lo que te digo?

Los ojos de Kenji empezaron a llenarse de lagrimas. Le entregué a Elena el café… Renata había hecho algo para tener la atención de Kenji y más que había movido algo de Kenji.

Elena: ¿Me lo tomo?

La miré sonriendo. Ella lo dejó cerca de una de las masetas que estaban a un lado.

Bastian: Renata la hará hablar, anoten cualquier cosa, sea lo que sea que diga.

Todos sacaron sus lapiceros y sus libretas para anotar, Elena solo estaba atenta a lo que fuera a decir o hacer Renata.

Kenji negó con la cabeza. Renata intentó tocarla, pero ella solo removió su cuerpo evitando que la tocara.

Renata: Kenji ¿Cierto?

Kenji empezó a jalar las cadenas de las esposas, estaba empezando a ser demasiado brusca con sus movimientos.

Renata: Tranquila. Te vamos ayudar… Pero necesito que te calmes y nos digas que es lo que realmente pasó.

Kenji: AAAAAAAAHHHHHHHH….

Renata se llevó sus dedos a sus oídos al escuchar su tremendo grito que todos la mirábamos sin saber por que estaba reaccionando de esa manera.

Renata: Kenji… Basta, debes calmarte te vas a lastimar.

Kenji se levantó empujando con fuerza la mesa, golpeó a Renata donde ella se apresuró a levantarse… Estaba tan furioso al ver que reaccionara de esa manera.

Bastian: YA ESTUVO BUENO.

Me aparté de ellos abriendo la puerta, entré cerrando con gran fuerza la puerta..

PUM!!!!!!

Renata me miró corriendo desesperada y asustada hacia mi.

Renata: Tranquilo Bastian.

Bastian: VAS HABLAR A LAS BUENAS O LAS MALAS ¿ENTIENDES?

Renata: Bastaaaaaa…. No le hables así.

Miraba a Kenji que quería liberarse de las esposas, sus muñecas estaban demasiadas rojas por el esfuerzo que estaba haciendo mientras se seguía lastimando.

Renata se apresuró corriendo hacia Kenji, intentó tomarla de las manos, pero estaba removiéndose con mucha brusquedad, sonreí captando lo culpable que era.

La puerta se abrió mirando a Angel…

Ángel: NECESITAMOS CEDARLA…

Me apresuré a sostener la cadena, sus muñecas ya estaban empezando a sangrar…

Bastian: TIENES QUE TRANQUILIZARTE…

Renata: Kenjiii, por favor tranquilízate…

Un paramédico entró mostrando la aguja hacia Kenji, ella negó con la cabeza, jalando más las cadenas, solo miré cuando las cadenas se liberaron, corrió desesperada hacia mi arrojándose encima…. Los dos nos caímos al suelo, ella empezaba a golpearme con las cadenas.

Renata: No… Kenji no lo golpees.

Bastian: BASTA KENJI…

Sentía los golpes que ella me estaba dando con las esposas, sentí como me había lastimado en algún lado de mi cara por la sangre que ya miraba en las esposas.

Lucio y Angel la sostuvieron de los brazos… Gerard empujó el cuerpo de Kenji… Mi respiración estaba demasiado acelerada… Me quedé sentado en el piso donde Renata estaba mirando la herida, no aparté mi mirada de esa niña… se sentó en el piso apresurándose a llegar al rincón.

Elena: ¿Pero que cosa?

Bastian: PONGANLE EL MALDITO SEDANTE…

Pasé mi dedo gordo por la comisura de mi labio, miré hacia mi dedo viendo que tenía sangre, la mirada mientras negaba con la cabeza. Renata mantenía la mirada.

Kenji: aaaaahhh… mmmmmm…

Sus lagrimas se deslizaban por sus mejillas. El paramédico estaba mirándonos.

Bastian: QUE PONGAS LA INYECCIÓN.

Ella se golpeaba con sus manos en su cabeza, se cubrió con sus manos.

Renata: ¿Estas bien?

Asentí con la cabeza, Lucio sostuvo el brazo de la niña pero ella se removía, Gerard puso su rodilla en sobre su cuerpo evitando que se siga moviendo. El paramédico la había inyectado. Todos se fueron apartando de ella. Sus manos cayeron al piso pero aun seguía con los ojos abiertos, los empezaba a cerrar poco a poco.

Renata: No entiendo que sucedió. Estaba tranquila.

Bastian: Allí tienes a la niña que pensaban que era inocente.

Negué con la cabeza saliendo del cuarto. Angel, Gerard y Lucio me siguieron. Elena y Renata se quedaron dentro del cuarto esperando que el medicamento le hiciera efecto.

Me dirigí hacia la enfermería todos me miraban sorprendidos ante lo que hizo esa niña. Abrí la puerta donde estaba la enfermera.

Enfermera: Señor.

Bastian: Necesito que revises la herida de mi ceja.

Enfermera: Claro señor.

Lucio reposó su cuerpo en el marco de la puerta mientras los demás estaban parados esperando a que dijera algo.

Angel: No lo quiero decir, pero que manera de darte una paliza una niña de 13 años.

Bastian: No me digas. Tiene una fuerza brutal.

Lucio: Una niña te acaba de ganar.

Bastian: ¿Qué esperaban que me ponga a golpearla? Estaba mi mujer allí, que si no la tuviera en frente claro que le hubiera dado unas buenas para hacerla reaccionar.

Levanté mi mirada hacia la enfermera que ella solo me miraba sin poder creer lo que había dicho, la chica estaba demasiado seria al escuchar mis palabras.

Bastian: Claro que no lo haría.

Enfermera: Lo sé. Usted sería incapaz de dañar a una pequeña.

Bastian: Quiero todo lo que se pueda investigar de ella, no se les pase nada, padres, familiares, hermanos, amistades lo que fuera. El por qué estaba en esa escuela, quien se la pagaba. Todo… hay que ver de que otra manera conseguir las cámaras de los demás salones, de todas partes de ese instituto.

Gerard: No entiendo, Renata ya se la tenía en la bolsa.

Bastian: Claro en pocas palabras le pedía a Renata que la liberara. Consigue una psiquiatra y una psicóloga.

Angel: que mejor Psicóloga que mi esposa bella, hermosa… (mordiendo su labio inferior)

Bastian: Es cierto. Siena es Psicóloga. Ella con su carisma, en un abrir y cerrar de ojos tendremos lo que estamos esperando tener de esa niña.

Miré a la enfermera que solo miraba a Lucio sonriéndole.

Bastian: Todos son casados…

LA enfermera bajó la mirada sonriendo negó con la cabeza cuando percibí el aroma de Renata. Tomé la mano de la enfermera mirando hacia la entrada. Ella apartó sus manos cuando Renata se acercó hacia mi.

Renata: ¿Le dará puntos?

Enfermera: Solo 2, le abrió demasiado la ceja.

Ella me miró sonriendo. Los demás empezaron a salir…

Bastian: Hagan lo que les dije.

Ella miraba hacia la entrada viendo que salían.

Renata: ¿Qué harán?

Bastian: Investigar. Hablaré con Siena.

Renata: ¿De que? ¿Ella que tiene que ver en esto?

Bastian: necesitamos una psiquiatra y una psicóloga.

Ella se puso encima de mi llevando sus manos hacia su rostro, la miraba demasiada preocupada. Solté un gran respiro mirando a la enfermera.

Bastian: ¿Qué te sucede?

Renata: Estamos en un punto ciego. No logro ver más allá de ella.

Bastian: Ya te dije. Es culpable, los videos no fallan.

Renata: ¿Y si fallan? Que tal y estamos mirando las cosas por donde no es.

Levanté mi mirada hacia la enfermera. Ella apartó sus manos alejándose un poco. Me senté girando hacia Renata.

Bastian: Te dije que te daría tres días para demostrarme lo que quieras a su favor. Cualquier cosa. Aun así sabes que tu lugar en el equipo de defensa está disponible para ti.

Ella negó con la cabeza. Conocía a Renata y no estaría tranquila hasta que ese gusanito le diera paz, pero con Kenji no se iba poder demostrar lo contrario. Así que lo que fuera hacer prácticamente le quedaba dos días.

Renata: La juzgarás como adulta entonces.

Bastian: Sabes que es lo correcto. Una vez que se presente todo, entonces que el abogado que quiere puede solicitar la apelación. Dudo que alguien desee enfrentarse contra nosotros.

Ella me miró sonriendo. Se puso de pie acercándose hacia mí la miré fijamente. Juntó sus labios a los míos. Se apartó sonriendo en forma de burla..

Bastian: Ayyy… Me duele mucho.

Ella sonrió negando con la cabeza.

Renata: Agradece que no te haya dejado feo por que ya no me ibas a gustar más. Te veo luego. Iré a ver a la otra chica al hospital.

Bastian: ¿Cómo?

Renata: Me dijiste que me diste 3 días. Quiero abarcar todo.

Bastian: ¿con quien irás?

Renata: Le diré a Olivia y Elena.

Asentí con la cabeza, ella necesitaba tener un oficial en representación de la comisaría. Salió haciendo seña a la enfermera que la estaba vigilando. Me recosté nuevamente haciendo seña a la enfermera. Necesitaba terminar aquí, teníamos mucho por hacer y Kenji para nada nos lo estaba facilitando.

Enfermera: ¿Señor, cree que la chica sea culpable?

Cerré los ojos negando con la cabeza.

Bastian: No puedo hablar de ese caso. Lo que sí. Es que como siempre voy a llegar al tras fondo de todo esto.

Apreté mis ojos con fuerza cuando sentí que me empezaba a poner algo en la ceja. Siendo una enfermera, esperaba que no me dejara una cicatriz que me hiciera recordar este pésimo momento.

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