Capitulo 16

Bastian:

Miré cuando Elena y Renata se fueron, ellas tenía la responsabilidad del reformatorio, ahora ya solo quedaba dar proceso para el Juicio de Kenji.

Lucio: Ya informé para el juicio.

Levanté mi mano viendo la hora las 11:30 am, tomé la carpeta que había dejado en el mostrador. La oficial solo nos miraba.

Oficial: Señor, sé que no debo meterme. Pero este caso tiene que ser asi ¿verdad?

Asentí con la cabeza, el capitán de la comisaria había llegado. Me extendió su mano donde estreché la de él.

Capitán: Usted dirá. ¿Qué procede?

Bastián: (garraspeo) Pre.. Preparen a Kenji para su juicio.

Capitán: ¿Hoy será?

Bastian: No queda de otra, ella es la culpable del asesinato de Tanaka.

Necesitaba que todos estuvieran presente en este momento, me apresuré a salir a la entrada, Renata necesitaba estar presente en el Juicio.

Miré por todos lados viendo que la camioneta ya no estaba.

Bastian: Avisale a todos que nos vemos en la fiscalía.

Lucio: De acuerdo.

Lucio tomó su móvil empezando a hacer las respectivas llamadas a todos los que tenían que estar presentes.

Tomé mi móvil, busqué el contacto de Renata, miraba fijamente su número, sé que para Renata esto sería muy difícil, quería cubrir todo lo necesario para demostrar una inocencia que no había.

Oprimí el botón para hacer la llamada, su móvil me empezaba a dar tono. Tragué saliva… mi corazón estaba latiendo muy fuerte, no es que nunca hubiera llevado un juicio sumario, solo que en este momento no había de otra, las condiciones se presentaban para marcar este juicio como lo habíamos determinado.

Llamada:

- ¿Qué paso?

- Nena… Amm, a las 12:00 se llevará el juicio de Kenji.

- ¿Por qué?

- Se acabó Renata, no hay nada que hacer, no hay nada que demostrar. El juicio es un hecho. Te avisaba para que estes presente. Sabes que te necesito allí.

- Claro Bastian, me necesitas para tener una abogada que sea testigo que no han sido violentados sus derechos. ¿Me equivoco?

- No, no te equivocas, pero no es como lo estas formulando.

- Te veo en la fiscalía.

Rodé los ojos al darme cuenta que Renata ya me había terminado la llamada… entré a la comisaría. Mis pasos eran lentos y cortos, como si algo me estuviera diciendo que no hiciera este juicio. Miraba alrededor viendo como los oficiales caminaban de un lado y del otro, en mi mente pasó aquella madrugada donde tuve que acudir a este lugar donde habían traído a Renata, donde en algún momento queríamos tener esperanzas de que la declararan inocente, donde en su momento escuchaba la confesión que Renata hacía con Gerard escuchando las palabras que todos queríamos escuchar siempre: “SOY INONCENTE”.

Este caso estaba muy lejos del que pudo ser parecido al de Renata, donde sin conocer la verdad, la juzgaron a un juicio sumario por orden de Manuel Rosique. Esos recuerdos los tenía muy presente en mi mente. Ahora las cosas eran muy diferentes a esa noche, aquí Kenji se ve claramente donde ella le arrebata la vida al Ministro.

Todo parecía en cámara lenta, levanté mi mirada viendo a Kenji con las esposas en sus manos y en sus pies, sus pasos pequeños y con miedo, con la mirada hacia abajo, los oficiales que se interponían en el camino, se apartaban cediendo el paso a Alexander que detrás de él venían custodiando cinco oficiales más.

Kenji solo seguía el paso de Alexander, pasó frente a mí deteniéndose.

Bastian: No la dejes sola en ningún momento.

Alexander: Lo sé.

Alexander y los demás retomaron sus pasos, miré hacia Kenji que solo observaba por todo alrededor, los demás oficiales tambien la miraban sabiendo que tan culpable era.

Lucio: Aquí tienes todo el protocolo.

Asentí con la cabeza, sostuve la carpeta de todo el expediente de Kenji. Lo abrí leyendo toda la información que tenía. Solté un gran respiro cerrando la carpeta.

Bastian: Avisale a la esposa del Ministro.

Oficial: Lo que usted ordene.

Lucio y yo caminamos hacia la salida. Todos los oficiales estaban en esperando viendo que Kenji se estaba resistiendo a subirse a la patrulla oficial que la llevaría hacia la fiscalía.

Lucio: si tan solo estuvieran Renata y Elena aquí, no solo ya la hubieran hecho subirse.

Kenji estaba con lagrimas en los ojos sosteniéndose con sus manos en la puerta, negaba con la cabeza, otro oficial la sostenía de los brazos… otro se acercó a ella sacando su macana… Me acerqué a toda prisa, solo pude observar el terror que produjo en Kenji al ver que la iban a golpear.

Sostuve con fuerza la mano del oficial.

Oficial: No se deja.

Bastian: NO SE TE VUELVA OCURRIR HACER ESO.

Todos se sorprendieron al ver mi reacción, esto es lo que por mucho tiempo siempre he estado en contra, de golpear a las personas, más tratándose de una menor.

Alexander quitaba sus deditos de la puerta con mucho cuidado, ella estaba lastimada de su mano al perder dos de sus dedos.

Alexander, la removió entrando a la patrulla, entró con ella en la parte trasera. Otro oficial rodeaba la patrulla para conducir.

Lucio: Voy con ustedes.

Se apartó de mi lado rodeando la patrulla, miró al oficial donde se apartó cediendo el lugar a Lucio para ser quien condujera a la fiscalía.

Miré al oficial, negué con la cabeza, extendí mi mano, él solo me miraba sin entender. Todos miraban este momento donde les daría una lección a cada uno aunque solo miraran.

Bastian: TU ARMA Y TU PLACA.

Oficial: Señor… usted no puede hacer esto.

Bastian: TENGO TODA LA UTORIDAD DE HACERLO, SI NO ESTAS EN CONOCIMIENTO QUE TENGO, PONTE A LEERLOS Y CONOCER UN POCO MÁS SOBRE MI. TU AAAARMAAA Y TU MALDITA PLACAAAA.

El oficial empezó a sacar su arma la puso encima de mi mano entregando su placa. Miré a todos que no apartaban la mirada.

Bastian: SE SUPONE QUE CADA OFICIAL ESTA PARA PROTEGER A LOS CIUDADANOS, SEAN INOCENTES O CULPABLES, TIENEN DERECHOS. SE MERECEN EL MISMO RESPETO QUE CUALQUIER PERSONA. ESTE OFICIAL IBA A GOLPEAR A UNA MENOR… NO CREO QUE NINGUNO DE NOSOTROS ESTUVIERA FELIZ POR SUBIRSE A UN AUTO OFICIAL DONDE IREMOS DIRECTO HACIA LA PRISIÓN… ¿ACASO BRINCARIAMOS DE FELICIDAD?

Empezaban a negar con la cabeza, muchos bajaban la mirada, otros me sostenían la mirada.

Bastian: Esto va a cambiar, este maldito sistema va cambiar, para ustedes tener un arma y una placa en sinónimo de poder. PERO NO SON NADIE PARA INCULCAR MIEDO.

Capitán: Señor Bastian… Me disculpo con mis oficiales.

Miré al capitán de la comandancia, me acerqué hacia él entregando la placa y el arma del oficial.

Bastian: Queda suspendido por 15 días sin goce de sueldo este oficial. Voy a requerir la copia del expediente de todos los oficiales que estén bajo su cargo. Lo quiero para hoy mismo.

Me di la media vuelta caminando hacia la camioneta de Lucio. Abrí la puerta subiéndome en ella. Solté un gran respiro. Miré hacia el frente… ¿Qué estaba haciendo? Todo este caso me tenía demasiado estresado. Negué con la cabeza encendiendo la camioneta. Aceleré saliendo del lugar directo hacia la fiscalía.

Esto era muy diferente a los demás casos que hemos tenido. No por que no pudiéramos hacer nada por Kenji, sino de ver que una pequeña no hacía nada para querer su libertad.

Miré la patrulla donde estaba ella viniendo, podía ver que estaba batallando Alexander contra ella. Sonreí al darme cuenta que ella solo es una niña, como de la edad de mi hija Gianna. Con Alexander a su lado tengo la seguridad que nada le pasaría, él era demasiado capaz de tratar a las menores con respeto, con empatía cosa que a muchos les faltaba, sabía ganarse la confianza de las pequeñas.

La patrulla empezaba a entrar al estacionamiento de la fiscalía, estaba repleto de muchos reporteros, los alumnos del instituto estaban todos en grupos con pancartas. Me aparqué viendo que no dejaban entrar a la patrulla donde estaban ellos. Empezaban a golpear las ventanas a puño cerrado, otros daban manotazos a los cristales.

- PENA DE MUERTE.

- QUE ACABEN CON ELLA.

- ES CULPABLE.

- NO LA DEJEN LIBRE.

- ASESINA… ASESINAA.

No podía creer lo que estaba presenciando, sus mismos compañeros gritaban todas esas cosas, los profesores estaban a un lado de los estudiantes entregándoles más pancartas, arrojaban huevos sobre la patrulla.

Tomé mi móvil, no la iban a dejar salir del lugar.

Llamada:

- ¿Dónde estas?

- Estoy dentro de la fiscalía, pero es tremendo caos afuera, nos cerraron el paso, a los oficiales los agradecía,

- PIDE REFUERZOS, NO VAN A DEJAR BAJAR A KENJI, ESTAN TODOS GRITANDO COSAS HORRIBLES

- Ahora mando los refuerzos.

Terminé la llamada, necesitaba estar junto a ella, pero no iban a dar paso…

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Kenji

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