capítulo 5

Y aquí vamos de nuevo, otra ves este maldito dolor de cabeza, en definitiva los hombres solo saben arreglar las cosas a lo bruto y salvaje.

Mi consciencia me va llegando poco a poco, esta ves hay algo diferente, logró escuchar otra voz, es de una mujer, otra mujer, escucho que va susurrando, parecen rezar, Dios mío ahora en que cosas me están metiendo, vamos en un auto, tal ves la misma camioneta, no hay opción voy abriendo mis ojos lentamente lo bueno de esta ocasión que mis manos esta libres, hay dos hombres, uno de chofer y su copiloto

- Valla que bueno que la señora ya despertó, estamos casi llegando y ya me estaba preocupando como demonios íbamos a bajarte, porque fue una chinga subirte, y tú - volteando a ver a la otra acompañante - ya cállate, es desesperante seguir escuchado tus malditas plegarias, entiende de una buena ves, tú maldito Dios te a abandonado YA ENTIENDE!!! lo único que logras es que quiera callarte a golpes y créeme necesitas estar muy bien para aguantar lo que viene

Dimos vuelta en un callejón, no parecía una lugar de esos que se conocen de mala muerte, la verdad parecía tranquilo, hasta un poco bien cuidado lo que sí me di cuenta es se veía como la parte trasera de varios negocios y en un portón de esos tantos nos detuvimos.

- Ahora si señoras, hasta aquí llegamos, no falta decirles que hagan lo que les digamos, cualquier tonteria y estamos autorizados de todo, inclusive de pegarles un tiro - y en ese momento nos muestra el arma que ya tiene entre las manos - ahora vuelvo - dice eso dirigiéndose al otro tipo que esta de chofer y que en ningún momento a dicho algo

Al bajar se dirije al portón, toca fuertemente y de ahí salen don hombres de muy mala cara acompañados de una mujer madura, ella se ve serena y de un carácter amigable, incluso acaricia un poco la cabeza del tipo que nos llevó hasta ahí y en cuanto terminan de hablar voltea y mira con detalle la camioneta y a su señal, los hombres que están con ellas se acercan y abre la puerta para que la mujer nos examine

- Bien por lo que se ve solo son dos, nos dijeron que sería por lo menos tres las que recibiría hoy - increíblemente su voz es tan linda, calmada - pero bueno a mi no es a quien deberán dar explicaciones, en fin, a ver lindas porfavor bajen, no obligue a estos cabrones a bajarlas a la fuerza.

En se momento me quedé observando a la mujer a mi lado, será un poco más joven que yo, pero con la misma complexión, no muy altas y gorditas, y de inmediato me vino la idea de que seremos, lo más seguro, algo así como trabajadoras forzadas ( en pocas palabras unas malditas esclavas)

- Chicas las estoy esperando - Dios de veras increíble la voz de esta mujer

Cuando ambas ya estabamos abajo la mujer nos pidió la siguiéramos adentro, pasando por el portón que en mis recuerdos siempre estará gravado junto con las palabras que nos dijeron antes de llegar "necesitarán estar muy bien para aguantar lo que viene"

Nos dirigimos hacia un cuarto algo grande en donde no había nada, absolutamente nada, ni siquiera ventanas, ahí se presentó la mujer, nos dijo se llamaba Mary y ella es la organizadora del área donde estaremos.

- Miren, aquí es donde estarán, pronto vendrán más personas a hacerles compañia, díganme si necesitan ir al baño, ya que será la única oportunidad que tengan de ir y eso es un premio solo porque están ustedes dos, después será imposible

Ambas dijimos que si, así que al salir enseguida estaba un pequeño retrete, solo tapado con una cortina, sin papel y la verdad algo sucio, en fin ambas terminamos y de nuevo al cuarto donde deberemos estar

- Señora Mary, se ve usted una persona amable puede decirnos porfavor que hacemos aquí? - le preguntó con la esperanza de que quiera decirnos algo

Su expresión y mirada te decia que esto era malo, muy malo y con un gran suspiro empezó

- Miren la verdad es que tengo algo de tiempo y a mí no me gusta, o bueno no me gustaría llegar a una situación así sin saber nada... estamos en un club nocturno, llamando " Desahogo" , ya saben bebidas de todo tipo y venta de otras cosas para pasarla bien, incluído mujeres y hombres para la satisfacción de los clientes.

No, no, no , de nuevo nos miramos la una a la otra , ambas con los ojos bien abiertos, y con las ideas a mil de que mier** nos tocará pasar en ese lugar.

- Ustedes son parte de un área donde clientes " exclusivos " pagan una suma de dinero para pasar algo de tiempo en un cuarto parecido a este y saciar ese desahogo que necesitan

- Espera, espera, no crees que para eso se necesitan chicas jóvenes y lindas, chicas que estén algo capacitadas, digámoslo, para poder satisfacer a clientes tan exclusivos como mencionas - y por fin hablo la otra, con argumentos muy buenos a mi parecer

- Ufff, no, esas chicas son las encargadas de complacer sexualmente, ustedes acá, pues, complaceran ese desahogo de enojo, de molestia que tienen los clientes, por lo general buscan a alguien parecida a la esposa, a la suegra, a la colega, a esa persona que ya no soportas pero tienen que seguir soportando, me explico bien? por esa razón ustedes son perfectas, tienen ese perfil, como decirlo, ese aire ideal para desahogar frustraciones

- Madre Santa, esos clientes a los que te refieres, que tan lejos pueden llegar??

- No mucho, la verdad los precios son altos, eso significa poco tiempo dentro del cuarto, aparte que esta prohibido cualquier objeto, eso disminuye un poco la gravedad del encuentro

Disminuye la gravedad, por Dios ni siquiera debería existir algo así, ni siquiera las personas deberían considerar pagar por algo así y por supuesto nosotras no deberíamos estar aquí

Mi compañera se dejó caer de rodillas y empezó a sollozar, yo estuve a punto de hacer lo mismo pero las palabras de Mary captaron de nuevo mi atención

- Cuando sea su hora llegará alguien por ustedes, él sabrá a quien escoger, cuando todo termine las llevarán a otro cuarto, ahí las veré de nuevo yo, veré que tan mal están y si pueden volver a llevarlas con algún cliente -

No podía creerlo, mi asombro aumentó a niveles increíbles, aunque era de esperarse, sacarán provecho de todas, hasta que ya no se pueda dar más, hasta que ya no se pueda aguantar más, hasta que ya no halla aliento.

- Solo un Consejo, hagan lo que les pidan, si les dicen calladas, no hablen, si les dicen griten, háganlo con fuerza, si les piden llorar, ladrar, orinar, desnudarse, háganlo y ya, pueden ganar tiempo y no irles tan mal.

Y así como así, como si fuera lo más común para ella, salió cerrando tras ella esa puerta, que observando bien, a sido en miles de ocasiones golpeada y pateada, sintiendo la frustración de todas las mujeres que aquí han Estado.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***