- Mas que sorpresa -

Después de Niqui llegará a su departamento se lleva una encantadora y maravillosa sorpresa al ver a su prometido pues ya hace seis meses no se veían pues Alessandro decía que el trabajo está sobrepasandolo y según el tenía que dejar todo listo para hacer un hombre totalmente disponible para su luna de miel.

Niqui estaba que no cabía de la dicha ella sentía que la espera la mataba para ver a su prometido pues cada que ella alistaba viaje para ciudad YEL el se le presentaba un viaje de negocios, la verdad agradecía tener a su chocolatico con ella y más por lo considerado que era porque apresar de que la boda se acercaba el se había tomado el tiempo de estar un día con ella.

- Chocolatico me encanta verte amor mío.

- Para que veas, moría de ganas de verte , besarte, abrazarte y consentirte, no podía esperar hasta el fin de semana me era imposible no ver a mi bella prometida.

- Te extrañe mucho amor, las video llamadas ya no eran suficientes, amo tenerte a mi lado.

Después de desayunar y hablar mucho entre besos y caricias, se dedicaron a darse amor, pues era una abstinencia de meses tenian que aprovechar y quitarse las ganas y el deseo que cada uno sentía por el otro, pues desde que ellos habían empezado a tener relaciones íntimas eras muy activos y nunca habían estado tanto tiempo alejados.

Alessandro se dedicó a brindarle el mejor placer a la bella Niqui y ella estaba más que dispuesta a dejarse amar.

por otro lado la cita de Anastasia y Gregorio había sido una llena de excelente comida, buena música pero lo más importante llena de mucha pasión y quién podría jugarlos Anastasia era una chica que hace años estaba sola y su intimidad con el sexo opuesto era nula, su último ex novio era todo un fracaso en la cama, el típico egoísta del que primero tiene que tener placer el y si queda después tu y que creen Anastasia Casi nunca obtenía lo que quería. A demás desde hace años le hecho el ojo al papá de su amiga y estaba más que contenta que se le hubiera echo el milagrito.

Por parte de Gregorio estaba más que claro que está chica le robaba el aliento y no pensaba desaprovechar la oportunidad para deslumbrarla, por qué el podía tener 41 años y estar sin pareja estable desde hace rato pero si algo sabía este hombre era conquistar a una mujer y porsupuesto que daría lo mejor. así que reservo la suite presidencial de su hotel y le dió la mejor de las noches a la Mujer que aparte de su hija anhelaba protejer.

El día para esas parejas fue más que corto pues mientras unos futuros esposos se dedicaban a recuperar esos seis meses perdidos, esa terrible ausencia que sufrieron por la falta del otro. sus ardientes deseos no les dio ni tiempo de comer, ellos no tenían tiempo para eso, estaban tan perdidos en el deseo de estar cuerpo a cuerpo que solo tenían cabeza en ese momento para ellos no más.

Mientras que Gregorio si había mandado a traer 8 platos diferentes para su sexi Anastasia dado que el no sabía que le gustaba había pedido de todo un poco pues era consentirla ya que era consiente que se había pasado un poco con su chica. y era más que obvio que tenía que recuperar fuerzas.

- No sabía que te gustaba preciosa y me tomé el atrevimiento de pedir de todo un poco.

- Eres un hombre muy considerado y voy a probar todo lo que trajiste, ya que no me gusta desperdiciar.

- Excelente respuesta, espero que todo lo que hay en esta habitación te guste.

- Claro que todo me gusta, pero me facina más el anfitrión de este habitación.

se dedicaron a degustar todos los platos y los postres que un exagerado Gregorio pidió.

Anastasia se auto felicitaba pues se dió la oportunidad de conocer más a fondo al padre de su amiga y lo que esté hombre le había hecho vivir la noche anterior y lo que le mostraba de el la tenía alucinando, ni en sus mejores sueños hubiese imaginado una cita así, no tenía palabras, se sentía como dentro de un sueño y definitivamente era uno de los mejores.

Esas dos parejas se dedicaron a ser feliz un día sin preocuparse de nada, solo querían vivir el ahora ya mañana pensarían en lo demás. querían terminar muy bien sus encuentros, cada una muy a su estilo quería darle esa chispa.

Unos querian iniciar con un extraordinario comienzo y otros darle un lujurioso continuará, eras dos parejas tan diferentes, pero al final solo importaba el sentir de cada uno de ellos. así sin más pasaron la tarde entregándose al amor, al deseo y sobre todo a las promesas del mañana.