Él no estaba seguro si debía comentar con alguien acerca de lo que había escuchado y menos con Rivas una persona que acababa de conocer estando en esa mansión ya no sabía quién era quien.
-Bueno, ya no tenemos nada más que hacer aquí te llevaré hasta tu casa, y debes estar atento a mi llamado para que firmes algunos documentos y de esa manera ya puedas tener acceso a lo que tu padre ha dejado para ti-
Dijo el abogado.
Pero la verdad es que Maikol sentía que al recibir ese dinero corría peligro ya que según lo que él había escuchado la familia de su padre lo había asesinado solo para obtener su herencia mucho antes. Así que si se atrevieron hacerlo mucho más rápido sería con él.
-Si claro-
Contesto con una pequeña sonrisa, tratando de disimular todo el terror que sentía.
Maikol y Rivas salieron de la mansión, y subieron a su auto.
"Que bueno que nadie se haya dado cuenta de que estuve ahí durante esa conversación de seguro hubiera sido algo muy comprometedor"
Iba por todo el camino en silencio, aún pensando sobre aquello que no salía de su mente era sumamente terrible para él, no entendía hasta donde era capaz de llegar la maldad todo por dinero.
Él que siempre había llevado una vida de sencillez y sin lujos y aún siendo así jamás había pasado por su mente hacerle daño a alguien mucho menos a un familiar.
Llego a casa.
-Muchas gracias por traerme-
Estrecho su mano con el abogado y bajo del auto.
Abrió la puerta de su casa y entro, ahí estaba su abuela sentada en su mesedora esperando.
-¡Ay hijito! que bueno que has llegado me tenías preocupada ya mira la hora ¿cómo te ha ido?-
-Bien abuela, ese abogado si tenía razón mi padre si era un hombre adinerado que falleció hace unos días y me ha dejado el 60% de sus bienes, conocí a su familia, tengo dos hermanos-
"Falleció hace unos días o al menos eso es lo que piensan todos"
Paso por su mente aquel pensamiento.
Pero delante de su abuela él no podía fingir que algo le pasaba, ella lo conocía perfectamente así que no demoro en darse cuenta de que algo le estaba sucediendo.
-Entiendo que debas sentirte mal porque te engañamos, quizás estés algo enojado. Pero te conozco bien y a ti te sucede algo más, sabes que puedes contarme lo que sea-
Maikol sabía que su abuela tenía razón si había alguien en la vida en quien él pudiera confiar era en ella, no estaba muy seguro de contarle pero aún así lo hizo.
-Tienes razón abuela, hay algo que está atormentando mi cabeza cuando hice aquella llamada para avisarte que llegaría algo tarde. Escuché algo que no debía mi padre no murió fue asesinado por su propia familia -
-¿Qué? ¿Estás seguro de lo que me estás diciendo? eso es terrible Maikol debemos contarle a las autoridades. Ahora entiendes la razón por la cual tu madre y yo decidimos mantenerte alejado de todas esas personas -
Al escuchar esto la señora Elizabeth se alteró mucho, al igual que Maikol había entrado en pánico cuando se enteró.
-No abuela de ninguna manera no vuelvas a repetir eso. Eso no va a suceder recuerda que son personas con mucho dinero muy poderosas y lo menos que quiero es tener problema con alguno de ellos. Lo mejor será que nadie sepa de esto -
Elizabeth sabía que su nieto tenía razón y tampoco quería ponerlo en peligro.
-¿Que harás entonces hijo? ¿Aceptarás la herencia?-
-Aun no lo sé, estoy bastante dudoso por la situación. Se que si lo hago nuestras vidas podrían mejorar mucho tendríamos más estabilidad económica, pero se que al hacerlo también tendría muchos problemas con esas personas que son capaces de todo-
"Y eso que aún no le he dicho que no solo escuché que asesinaron a mi padre, sino que también no dudarían en hacerlo conmigo pero no quiero preocuparla"
Pensó Maikol, estaba tan cansado y con tantas cosas en mente que solo quería ir a descansar había Sido un día muy largo había salido muy temprano por la mañana. Así que se despidió de su abuela y subió a su habitación.
Se quitó la ropa y se coloco algo cómodo, se metió a la cama. Aunque estaba tan cansado no lograba conciliar el sueño habían muchas preguntas en su mente.
"¿Qué debo hacer?"
"Me hubiera gustado tanto no haber escuchado aquello"
No sabía que era lo correcto su aceptar la última voluntad de su padre o seguir viviendo de la manera en la que siempre lo había hecho tan tranquilo. En medio de tantos pensamientos quedó dormido.
A la mañana siguiente, Maikol despertó pues alguien había tocado a la puerta de su casa varias veces, se coloco de pies y se dió cuenta de que su abuela no estaba. Supuso que estaría en el mercado haciendo compras.
Abrió la puerta y no miro a nadie, cuando iba a cerrar dejo ir su mirada al suelo allí había un sobre.
¿Que será esto?
Se preguntaba, se agachó tomándolo en sus manos a un lado del sobre decía.
(Para Maikol)
Esto le pareció bastante extraño.
¿Para mi?
¿Quien me puede estar enviando cartas?
Cerró la puerta y entro a casa, aún sin salir del asombro rompió aquel sobre tomando la carta que había allí dentro la cual decía.
~Por tu propio bien, lo mejor será que no se te ocurra aceptar ni un solo peso de la herencia. O sufrirás las consecuencias~
¿Qué?
¿Será esto posible?
Era una carta de amenaza para él, a Maikol no le cabía la menor duda de que había Sido enviada por la familia de su padre.
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