Nostalgia?

A la mañana siguiente María fue hacia la oficina no sin antes buscar el desayuno de su jefe, al llegar el no se encuentra María miró hacia el escritorio de Patrick por largo rato sentía nostalgia, aunque ella no conocía la razón su corazón si lo sabía, se fue a su oficina a realizar los pendientes que tenía, cuando recibió un mensaje de Julián.

Espero te guste lo que te deje en la recepción, todos los días recibirás un obsequio de mi parte.

Maria se olvidó por completo de Patrick y salió casi corriendo de la oficina, bajo hasta la recepción y con una sonrisa le pregunto a la recepcionista quien sacó un arreglo de una cesta con un peluche y gran variedad de chocolate.

-Se nota que te quiere mucho.

Si, eso creo - dijo María con una sonrisa.

-Si recibes regalos todos los días es evidente que te quiere.

-Lo sé, gracias - María tomó el arreglo y volvió a la oficina dónde sacó la nota que tenía, era otro de sus halagos, ella sonrió y se sonrojo le gustaba mucho Julián cada detalle, cada halago, cada palabra era algo que le encantaba.

Después de salir de la oficina volvió a su departamento, para ella el día fue tranquilo sin Patrick aunque lo extrañaba era más relajante cuando no estaba, mientras tanto el seguía en su yate en alta mar, su mente estaba un poco más calmada, volvería pero se mantendría alejado de María, no quería incomodarla así que decidió no volver a molestarla con que se encargará de los asuntos que debía era suficiente.

El día siguiente María volvió a la oficina, buscó nuevamente el desayuno del jefe aunque este una vez más no estaba, lo extrañaba pero no podía llamarlo para preguntarle solo tenía que atender su agenda y recibir los reportes que enviaban, mantener todo como debería.

El regalo de Julián una vez más llegó y como siempre María bajaba emocionada a buscarlo y aquella sonrisa no se podía borrar en el resto del día.

Patrick en el yate ya estaba dando aviso a los tripulantes que era hora de volver, ya llevaba muchos días fuera, aunque tenía quienes se encargarán de todo el debía hacerse cargo de algunas cosas personalmente, tomó su teléfono y llamó a Larry.

-Jefe.

-Necesito que hables con el abogado y la fiscalía, que apresuren el caso de María.

-Señor, hay dos casos, uno contra Franklin por lo dicho por María y otro por la agresión de María.

-Que resuelvan eso, pero María no puede quedar culpable.

-Entiendo eso haré.

Patrick sabe que es poco el tiempo que podrá tener a María a su lado por lo que debe arreglar su situación, antes de dejarla ir.

Maria sale de la empresa y Julián la espera, no acordaron que saldrían por lo cual fue extraño.

-Hola.

-Hola hermosa, quieres pasear conmigo.

-Es que traje mi auto y no puedo dejarlo, ¿como vendría mañana? - dijo mientras señalaba al estacionamiento.

-Yo te traigo, pero hoy la hermosa señorita me acompañará - María asintió, el abrió la puerta del copiloto y ella entró en el auto, el comenzó a manejar.

-¿A dónde vamos?

-Es sorpresa - el se detuvo le vendo los ojos - no puedes ver - y el auto comenzó a moverse nuevamente, después de un buen rato de camino el auto se detuvo, Julián ayudo a bajar a María y la llevo de la mano, apenas se bajo sintió el aroma del mar, y cuando sus pies calzados tocaron la arena lo confirmó estaban en la playa.

-¿Qué hacemos en la playa?

-Es sorpresa ya estamos por llegar - se detuvieron y María sintió que Julián se puso detrás de ella, soltando la venda - ya puedes abrir los ojos.

Cuando María los abrió su corazón latió con fuerza, había una pequeña mesa con dos sillas, alrededor tenía muchas velas puestas sobre la arena y otra muy grande en medio de la mesa, cuando él la llevó hacia la mesa notó que aquellas velas formaban un corazón.

-Es realmente hermoso.

-Al igual que tú, fuiste mi inspiración.

-Gracias, me encantó.

-Y aún no a terminado - aplaudió y llegaron algunos meseros con varios platillos que sirvieron en la mesa - vamos - señaló las sillas, le agarró la mano y la ayudó a sentarse, la velada fue amena para ambos, María se sentía la mujer más feliz del mundo consiguió al mejor hombre.

Después de la cena y de pasar un rato sentados hablando mientras miraban el mar, después de tantos momentos de risa y sentirse dichosos por el momento, se dispusieron a volver

En su camino de regreso hablaron de diversos temas cuando llegaron María se estaba despidiendo pero el beso que se dieron provocó que sus cuerpo se encendieran, ella terminó por invitarlo a su departamento.

Guardaron el auto y subieron al departamento de María, al entrar le ofreció una bebida, él aceptó mientras la esperaba en el sofá.

Ella llegó con la bebida pero no era lo que Julián quería, puso el vaso en la mesa a un lado y agarró a María de la cintura sentandola a su lado para adueñarse de sus labios, ese beso se volvió apasionado en cuestión de segundos, sus ropas terminaron en el suelo mientras dos cuerpos se entregaban completamente.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***