un atentado contra su hija

Helen llegó hasta el salón de natación con Bladimir, estaba lleno de chicos, no era una buena idea, en las gradas habían muchas chicas que solo están ahí con el fin de verlos entrenar, nada más se les escuchan los gritos cuando se quitan sus camisetas.

—Puedes esperar en las gradas si quieres, iré a cambiarme, quiero tu opinión de mi entrenamiento _Dijo Bladimir, Helen asintió con la cabeza en un triste silencio, Bladimir se fue a los vestidores de chicos y ella se quedó viendo a los demás desde la distancia, estaban en su entrenamiento.

En ese momento es sorprendida a sus espaldas por Madison que le dió un gran susto, la escurridiza que la había dejado sola con ese chico, apareció.

—Te voy a matar Madison, vuelve hacer eso y puedes considerarte muerta _Amenazó Helen, Madison solo se estaba burlando, al parecer estaba de muy buen humor.

—Oye no te enojes, solo fue un susto, eres bipolar, estás bien y luego estás mal, ¿que te pasa eh? ¿ese chico te hizo algo? _inquirió Madison con la intriga, Helen no tenía el mismo semblante alegre de antes.

—No es él, la verdad Bladimir es un buen chico, pero no es mi tipo y tampoco tengo interés en él.

—¿Se te confesó?

—No, solo me invitó a tomar algo pero no era necesario que me dijera que le gusto, pude sentirlo con solo su mirada, le dejé en claro que no pienso tener una relación con nadie, solo quedamos de conocernos bien y ser amigos, hasta le di mi número, una amistad está bien para mí y el lo entendió perfectamente.

—Wao, chicos como el hay pocos eh, pobre, apenas se acercó a ti ya tiene su corazón arrugado, tal vez si tenía buenos sentimientos, pero que se puede hacer, no es obligatorio querer a alguien ¿verdad?.

—No, no es obligatorio.

—Oye Helen, ¿que es lo que te pasas exactamente?, no tiene nada que ver con ese chico, ¿entonces?.

—Es Joseph.

—Otra vez ese animal.

—Cuando estaba hablando con Bladimir una chica se acercó a él y se le sentó en las piernas, incluso lo besó en la boca, ya te puedes imaginar cómo me sentí, quería que la tierra me tragara en esos momentos.

—Y me imagino que Bladimir te salvó de ese momento desagradable.

—¿Como lo sabes?

—Es obvio, estás aquí no por tu voluntad, de seguro Bladimir te pidió que vinieras con el porque notó algo raro en ti, eres fácil de leer Helen, no sabes ocultar lo que sientes.

—Es cierto, me siento miserable ahora.

—Oye tampoco eh, no deberías sentirte así por un chico, que se muera esa basura si quiere.

—Madison no hables así...

—Lo siento Dios, no lo dije enserio, es un decir...

—Soy una tonta de verdad, debí saber que solo me miraba como uno más de sus juegos.

—Sabía que estabas haciendo cochinadas con él ese día que salimos de compras, algo me lo decía, bueno era más que evidente, pero aún así, no debe jugar con tus sentimientos de esa manera, primero te besa ¿teniendo a otra?, no sé qué clase de animales hay en este planeta, de verdad que me dan dolor de cabeza.

—Ya no quiero hablar de eso, tampoco pienso verlo ni volver a casa de Isabella hasta que ella regrese, no quiero tener ningún contacto con él.

—Así se habla, cada loro en su estaca y así es mucho mejor, deberías aceptar la invitación de ese chico, sé que no te gusta pero por lo menos te distraes y puedes ir olvidando de a poco a ese tonto, pero antes sé que llorarás mucho porque estás enamorada y no puedes olvidar a Joseph fácilmente de la noche a la mañana, si no lo has hecho desde que eras una niña, imagínate ahora que son jóvenes y tienen sus hormonas más desarrolladas, ¿no es así?.

—Madison no eres de mucha ayuda, y deja de hablar como si fueras adulta, recuerda que soy mayor que tú mocosa.

—Actúa como una entonces, solo me llevas un año tonta, no es mucha la diferencia y puedo tener más cerebro que tú.

—Oye se me olvidaba preguntarte algo, ¿adónde fuiste cuando me dejaste con Bladimir?, te fuiste de la nada y muy apresurada.

—Pues fui a ver a alguien a la facultad.

—¿Porqué fuiste hasta ahí? ¿y a ver a quién?

—¿Te acuerdas del chico con el que bailé en el club?, pues estamos hablando desde ese día, le di mi número y estamos en contacto, terminó siendo vecino de nuestra universidad, está en el otro edificio.

—¿Son novios?

—Aún no, solo estamos hablando, de vez en cuando voy a su facultad, no es nada serio aún.

—Pero a ti te gusta, puedo notarlo.

—Solo un poco, pero que Isabella ni mis padres se enteren, de seguro me van a dar sermones y me van a prohibir verlo.

—Por mi parte no diré nada, pero disimula un poco qué hablas con alguien, es notorio.

—Lo tendré en cuenta.

Dentro de poco salió Bladimir, solo llevaba unos shorts cortos y unos lentes para comenzar su entrenamiento, Madison se quedó boca abierta al verlo sin camisa, tenía un cuerpo muy bien trabajado, Helen también quedó sorprendida, Bladimir es alto pero aparenta ser delgado y de cuerpo frágil, sin embargo tiene una buena musculatura.

—¡Vaya chico! se ve que trabajas muy bien tu cuerpo _comentó Madison cuando Bladimir se acercó a ellas.

—Madison..se más discreta _regañó Helen.

—Oh, gracias, es que voy al gimnasio de vez en cuando y hago muchos deportes, siempre mantengo mi cuerpo ejercitado _respondió Bladimir con una amable sonrisa.

—Ya me di cuenta, ejercita también a Helen jijiji.

—Madison _repitió Helen, entendió el sarcasmo de Madison.

—Bueno chicas, nos vemos en un rato, ya es hora de empezar.

—Suerte, lo harás muy bien _animó Helen.

—Piensa en Helen y verás que harás todo bien _añadió Madison, no dejaba de molestar a Helen con su nuevo enamorado.

—Jajaja eres divertida Madison _dijo Bladimir dándoles la espalda para ir a la práctica.

—Te voy a matar Madison, dejá de molestarme con él te lo advierto _amenazó Helen cruzada de brazos.

—Hay pero que delicada, ¿tanto desprecias al pobre chico?, que tristeza que te enamores de la persona que no te quiere y dejes a un lado a la que en verdad lo hace, ese Joseph no tuvo problema en besarse con esa chica delante de ti, tienes que ser un poco egoísta Helen, primero piensa en tú felicidad y no sufras por quién no vale la pena.

—Lo sé, y no es que desprecie a Bladimir, es buen chico, amable, dulce, en tan poco tiempo me he dado cuenta de eso pero...le gusto, no me siento cómoda que quiera ser mi amigo sabiendo que yo no le correspondo igual, y sobre Joseph....ese es otro tema, de todos modos no hay nada entre nosotros así que no tengo el derecho de sentirme molesta, no sé si sabe que estoy enamorada de él.

—O más bien no sé quiere dar cuenta y se hace el tonto, aún así te dan celos que esté con otra y sufres por eso, ¿a quién le va a gustar ver a alguien que le gusta con otra persona?, debe sentirse horrible, creo que solo debes tener la amistad de siempre con él, no tener ese tipo de contacto íntimo que vaya más allá de lo personal, la distancia es mucho mejor, se le nota que no le importa tus sentimientos, tienes que olvidar ese amor que sientes así sea a la fuerza, en frente tuyo tienes una opción.

—¿Quieres que use a Bladimir?

—No es exactamente usarlo, el te pide que sean amigos sabiendo que tiene sentimientos hacia ti y no es correspondido, solo vas a tener una amistad con él, salir con Bladimir y pasar el rato juntos te puede distraer y incluso te puede ayudar a olvidar poco a poco, eso no quiere decir que estás obligada a quererlo ni que van a tener una relación, además estoy segura que Bladimir si cedería a ser usado.

—Pero no me sentiría bien, no se lo merece, no puedo solo pensar en mí, acepto su amistad no porque quiera olvidarme de Joseph, Bladimir no tiene que ver con eso, solo voy a ser su amiga, y sobre Joseph... será mejor mantener la distancia, creo es mejor así.

—Es tu desición amiga, suerte con eso.

*********

*En la cabaña*

Isabella se despertó por la luz segadora del sol que entraba por el ventanal, se incorporó en la cama y miró a su lado, nuca está Mason cuando ella despierta.

Se puso de pie y fue al baño, decidió meterse a la tina y quedarse un rato pensando, ya eran tres días en los cuales estaba con Mason, no sabe como un aparente secuestro de parte de él terminó siendo algo por gusto, además que era mafioso y también tiene conexión con su familia, eran cosas que no sabía, de todas formas ella ha tenido contacto con personas de ese núcleo, incluso sus padres también, jamás llegó a imaginar que sus familias eran cercanas.

Después de unos minutos Isabella salió del baño envuelta en una toalla, esta vez no mojó su cabello, cuando salió se dió de cara con Dereck el cual estaba sentado en la cama esperándola, ella no pudo evitar sorprenderse, si Mason lo ve ahí de seguro se iba a molestar.

—¿Que haces aquí?, sal ahora mismo _ordenó Isabella mientras sostenía la toalla que cubría su cuerpo.

—Oye, te ves sexy en toalla, para ser una muñeca estás bien formada, ¿que te parece si jugamos algo? _Propuso con una sonrisa maliciosa.

—No me interesa jugar nada contigo, sal ahora mismo de aquí, necesito cambiarme.

—Si quieres te ayudo, no será problema para mí, puedo contemplar mucho mejor la vista.

—Eres un descarado sinvergüenza.

—Lo sé, dime algo que no sepa muñeca _Dereck se levantó de la cama y dirigió sus pasos hacia Isabella mientras la miraba de pies a cabeza, no solo Mason la deseaba si no que el también, era imposible que un hombre se resista a sus encantos y belleza, puede parecer fría por fuera pero eso llama más la atención.

—¿Que pretendes?, no te acerques más..._Isabella retrocedía en cada paso que Dereck daba, pero su cuerpo quedó pegado con la pared, ya no tenía como esquivarlo.

—Sabes...si no fueras de mi hermano, te aseguro que hubieras sido mía, eres hermosa, seduces a los hombres sin tener que hacer nada Isabella, es el mayor de tus encantos _Dijo mientras se acercaba, logró quedar frente a ella, esta vez su sonrisa desapareció y solo detallaba su rostro minuciosamente, no pudo evitar tocar su mejilla y acariciarla.

—Deja de hacer eso sí quieres permanecer ileso, a tu hermano no le va gustar encontrarte aquí así que ahora sal de la habitación.

—Mi hermano no está muñeca, además no te estoy haciendo nada malo, con decirte cosas lindas no estoy cometiendo un pecado.

—¿Que quieres entonces?

—Solo venía a decirte algo, es importante que lo sepas, Mason me envió hacer unas investigaciones sobre la persona que te hizo el atentado.

—¿Que? ¿hallaron algo?

—Te suena el nombre de ¿Layla?

—¿Layla?, si, ella era una de mis mejores amigas.

—Pues ahora eres una de sus peores enemigas porque ella fue la que envió a esos hombres para que acabaran con tu vida.

—No me sorprende que haya sido ella, es una loca celosa...

—Que mal que sea por un hombre...

—Oye, deja de investigar mi vida privada.

—No fui yo, no me culpes, eso tienes que reclamarlo al demente de mi hermano no a mí.

—Como sea, ¿donde está él?, necesito hablarle sobre ese asunto.

—Salió para atender unos negocios, vendrá dentro de poco, primero baja a desayunar, no quiero que me culpe si no te alimentas bien.

—¿Puedes salir ahora?

—Está bien, ya dije lo que tenía que decir, te espero abajo, el desayuno ya está listo.

—Bien.

********

*En otro lugar*

Franco hizo llegar a muchos de sus hombres al lugar donde estaba Róger el mismo día en que le hizo la llamada, dispusieron de una buena cantidad de dinero para trasladarse a otra ciudad y que Antonella fuera atendida en el mejor hospital, ya estaba mejor desde que despertó del coma pero Róger quería estar seguro, sus identidades por el momento seguían ocultas hasta que llegue el tiempo oportuno de volver.

Antes de irse, donaron una suma considerable de dinero a la aldea que se encargó de ayudarlos el día del accidente, si no hubiera sido por esa buena gente ellos estarían muertos, no solo ayudaron a la aldea si no que a las personas que los acogieron y al hospital donde Antonella estuvo internada por mucho tiempo, estaban muy agradecidos por toda su ayuda durante tanto tiempo.

Se trasladaron a otra ciudad y se instalaron en un hotel, no se podían arriesgar de ser reconocidos, los hombres de Franco se encargaron de la seguridad de Róger y Antonella, también estaban investigando quién era la persona o las personas detrás de ese accidente aéreo.

—Señor.

—¿Que noticias hay?

—Es sobre su hija Isabella...

—¿Que pasa con mi hija?, habla.

—Al parecer hace días atrás le hicieron una atentado, su hija se encontraba con sus dos amigas Helen y Madison, por suerte no lograron su objetivo, alguien más intervino y las salvó.

—¿Que dices? ¿quién se atrevió atentar contra la vida de mi hija?

—No lo sabemos aún, pero según dicen, ella estaba desaparecida después de eso, la persona que la salvó la tiene secuestrada, sin embargo ella hizo una llamada a su tía informando que está bien y en buenas manos.

—Necesito que investigues más a fondo sobre la persona que intentó hacerle daño, puede estar involucrada con nuestro accidente.

—Hay algo más señor...

—Dime.

—La persona que salvó a su hija y que aún la tiene es el hijo mayor de Franco Petrovich, Mason.

—¿Que?

—Eso fue lo que informaron nuestros espías señor.

—Ahora mismo lo voy averiguar.

Róger tomó su teléfono para hacer una llamada a Franco, tenía que darle una explicación de él porqué su hijo tiene en sus manos a Isabella, y cómo supo del atentado, habían muchos cabos sueltos en esos momentos y tenía que armar todas las piezas.

📱¿Bueno?

📱Franco soy yo Róger.

📱Oh Róger, ¿que pasa?, no me digas que pasó algo.

📱Nada de eso, solo quiero que me digas o me expliques el porqué Mason tiene a mi hija y como supo del atentado, acabo de ser informado de lo que pasó.

📱Oh, eso..

📱¿Lo sabes?

📱Si, me enteré de eso hace poco.

📱¿Entonces?

📱Para serte sincero Róger, no sabía sobre eso desde un principio, mis hombres me informaron que Mason ha estado siguiendo a tu hija desde hace tiempo y por eso supo del atentado, fue a su rescate en cuánto fue informado, ella tuvo una herida de bala en su pierna y mi hijo la está cuidando por el momento, no tienes porqué preocuparte, el la está cuidando muy bien.

📱Entonces porqué hablan de un supuesto secuestro.

📱A ese punto voy, Mason está enamorado de Isabella y no la quiso dejar ir, por el momento la sigue teniendo en sus manos, ya ha hablé con él sobre eso, al parecer llegaron a un acuerdo de que cuando se recupere volverá, de todos modos lo resolveré personalmente, Mason es muy testarudo.

📱No te preocupes, confío en ti, en tus manos estará más segura, solo mantenme informado, por el momento no debe saber que estamos vivos, y sobre tu hijo enamorado, lo hablaremos personalmente.

📱 Jajaja, sigues siendo igual de sobreprotector que siempre Róger, no has cambiado en nada, no te preocupes hombre, tu hija es lista y es díficil de dominar, sabrá si lo acepta o no, ya sabes, son jóvenes.

📱Lo sé, solo que para mí sigue siendo mi pequeña.

📱Te entiendo Róger, así me siento con mis dos hijas, pero Mason sabrá cuidarla, si no lo hace, yo mismo me encargaré de él no te preocupes.

📱Te agradezco, ahora tengo que dejarte, espero respuestas tuyas pronto.

📱Estoy trabajando en eso, pronto volverás a cobrar cuentas, tenlo por seguro.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***