¿Preocupaciones?

Pasaron las horas sin prestar atención a las clases o a los compañeros, en la salida me despedí de todos y me fui con paso lento a mi casa, llegue a ella he hice mi rutina diaria, estaba en mi cama pensando entonces escucho a alguien llamar a la puerta.

—Pasa -dije aun acostada esperando ver a mi madre entrar por la puerta.

—No puedo, esta cerrada -escuche decir a alguien y no era la voz de mi madre por lo que me senté en mi cama - ¿puedes abrirme?

—¿Quién es? -dije levantándome de la cama si no es la puerta de mi habitación debe ser el balcón.

—Soy yo, el vecino de la otra noche... -¿Qué hace este a estas horas en mi balcón? Ya casi es media noche.- ¿puedes abrirme?

—Es muy tarde... mañana te abro -dije volviendo a acostarme y cerrando mis ojos esperando que se fuera.

—Y aun así sigues despierta -escuche decir después de unos segundos- abre los ojos

—¿Cómo sabes que tengo los ojos cerrados? -pregunte sin abrirlos.

—Porque te estoy viendo -al escucharlo me levante precipitadamente.

—¿Qué haces aquí? ¿Cómo entrasteis?

—Por la ventana -con una amplia sonrisa señalaba una ventana al lado del balcón la cual estaba abierta- y estoy aquí ya que un pajarito me dijo que estabas triste.

—En primera, no sabia que pudieras hablar con los animales y en segunda, que pájaro tan comunicativo y por ultimo ¿Qué no te dije que no entrarás a mi dormitorio a las tantas de la noche y sin mi permiso? Esta ya es la segunda vez -cruce mis brazos.

—Bueno... te vez muy bien con esa ropa -¿en serio? ¿Es todo lo que tiene que decir?

—Gracias pero no cambies el tema...

—Esta bien lo siento ya me habías dicho que no lo hiciera pero estaba preocupado del porque estabas así -dijo bajando su cabeza, que tierno así parece un gatito que fue regañado.

—Esta bien, te perdono esta vez pero que no se repita una tercera... -suspire sentándome en la orilla de mi cama - y estoy así por algo que paso hace un par de días pero no se si deba contártelo...

—Por favor hazlo, nadie más lo sabrá y podre ayudarte si me lo cuentas... -¿quiere que le cuente mis cosas a un encapuchado?

—No hay nada que tu puedas hacer... pero... -pensé un par de segundos, esperaba que lo hiciera, suspire y al final decidí contárselo- bueno veras, el martes después de regresar a casa me acerque a una niña que estaba sola ¿Cómo pudieron dejarla sola? ¡La pobrecita tenia 6 años! Bueno ella me contó algunas cosas y entre estas que su padre había fallecido y por eso he estado así ya que decidí darle algunos días de luto y en verdad me entristecía esa situación... así que no te preocupes más por mi y vete -lo miré mientras abría la puerta- tengo algo de sueño y no quiero llegar mañana tarde a la escuela por quedarme dormida.

—No se que decir...

—¿Qué tal que ya te vas? -sonreí mientras mostraba la puerta- agradezco que te preocuparas por mi pero en verdad estoy cansada, aun así ya no te preocupes, hoy es el ultimo día en que estaré de luto, entonces ¿podrías dejarme descansar? -el dijo un par de palabras y se despidió seguido de hacer eso se fue no se a donde, cerré la puerta y me acosté a dormir...

Al día siguiente me levante con el sonido de la alarma, hice la rutina de todas las mañanas y comencé el camino a la escuela, hoy iba con un vestido circular color verde agua con un listón negro en la cintura, unos botines negros y una diadema negra y claro mi pulsera y collar.

Una vez en la escuela todo fue bien, lo normal que pasa siempre en la primera clase, gente llegando tarde y siendo regañada por los profesores de la clase según toque, una que otra burla por parte de Estefany y los saludos alegres de Rose seguidos de los clásicos de Julieta, pasaba la mayor parte del tiempo con ellas dos que por cierto al día siguiente de la pijamada en casa de Adrián cuando fue hora del receso Marianne y Rosalya me dijeron que a Mary le gusta Adrián, ese día yo dije en mi mente ¿y a mi qué? Solo somos amigos pero después vi que a mi me hablaba más que a ella y ahí fue donde entendí su comentario, se podría decir que estaba marcando su ¿territorio? Bueno hoy estamos a viernes mañana será el evento de mi madre después de las dos de la tarde y por la noche habrá una fiesta y mi madre me permitió invitar un par de amigos, de cinco a seis... eso me dijo ella y me entrego ese numero de invitaciones pero... ¿en cerio tengo que invitar a alguien? Bueno de todas formas les diré a ver quien quiere ir, tengo un mal presentimiento... espero que nada malo pase...

Pasaron las clases antes del receso un poco más rápido de lo que esperaba, salí del salón después de guardar mis cosas y poner más a mano los sobres con las invitaciones, primero lógico fui con Rose y Julieta, antes de que llegara a con ellas ya me estaban saludando en cuanto me vieron...

—Chicas tengo algo que decirles -dije seria

—¿Qué es? -pregunto Rose mientras Julieta solo escuchaba.

—Tienen que ir a una fiesta -las observe un poco más y al ver que no entendían saque dos sobres- tómenlas por favor, pueden llevar un acompañante, por favor mi madre se los ha mandado... -bueno no fue en especifico a ellas pero quiero que asistan y ¡ellas son mis mejores amigas! Lo pensaron un poco y se vieron entre si.

—Pero no tenemos ropa para este tipo de evento... -dijo Julieta

—¡No se preocupen por eso si gustan saliendo vamos a comprar vestidos para ambas! -se volvieron a mirar- por favor vallan...

—¡Esta bien! ¡Iremos!.-dijeron ambas- ¿Quién mas ira?

—No lo se, tengo que ver si Rosalya o alguno de ellos quiere ir... a todavía no se... -nos quedamos viendo a la nada, ¿Por qué? Ni yo lo se- cierto ¿tienen a alguien con quien ir o irán solas?

—No lo se... -menciono Rose pensativa- ¿puedo decirte más tarde?

—Claro, no te apresures, si no solo dices en la entrada que es tu acompañante, no olviden la invitación -dije mirándola fijamente- ¿y tu Julieta?

—Veré si mi hermano quiere acompañarme sino sola.

—¿Tienes un hermano? ¡Debes llevarlo! Quiero conocer a sus familiares.

Y así después de hablar un poco más decidimos la hora y el lugar donde nos encontraríamos para ir de compras, al terminar me despedí y busque a los demás los cuales no estaban juntos las chicas y los chicos por alguna razón, en fin primero iré con Rosa y Mary.

—Hola chicas.

—Hola Nahiara -dijeron juntas.

—Chicas ¿quisieran ir a la fiesta por la firma de libros mañana?

—Lo siento no puedo -dijo Marianne- mañana cuidare a Mónica por la noche.

—Y yo a mis hermanas -agrego Rosa- es el aniversario de bodas de mis padres y debo cuidarlas, será para la otra.

—Esta bien no se preocupen será en otra ocasión -dije sin más ¿Qué mas les podría decir?- bueno me tengo que ir... adiós.

Nos despedimos y me fui, con los chicos una vez que llegue los salude a ambos y ellos correspondieron al saludo.

—¿Interrumpo algo? -dije algo sonriente- si interrumpo puedo volver lue...

—No, no interrumpes nada -me interrumpió Adrián, bueno ¿Qué se le puede hacer?

—Excelente entonces iré al grano, mañana habrá una fiesta por la firma de libros de mi madre ¿quieren ir? -dije sacando las invitaciones y poniéndolas frente a ellos después los mire a ambos- pueden llevar a un acompañante con ustedes o no... por favor tómenlas no puedo regresar con todas las invitaciones... y no me tengan con las manos estiradas, se me cansaran -al decir lo ultimo las tomaron.

—¿Quien más ira? -pregunto Adrián.

—Pues asta ahora Rose y Julieta, Rosalya y Marianne no pueden ir... bueno ya tienen las invitaciones ahí va la hora o lo que necesiten saber si ocupan algo pueden llamarme, no se pueden regresar y me tengo que ir ¡adiós! -salí corriendo a buscar a Damián ¿Por qué no se la di cuando estábamos en nuestros lugares? En fin ahora tengo que encontrarlo.

Busque a Damián y cuando lo encontré le dije lo que debía decirle y este mocoso se quería negar, después de mil y una veces que insistí acepto pero ¿y por que yo estoy insistiendo tanto? Esta no soy yo, ya ni me reconozco, los amigos me hacen mal, bueno después de hacer unas cuantas cosas tocaron la campana y entramos a clases, pasaron las horas como si de una tortuga se tratara y cuando por fin se terminaron estas estaba hecha polvo, cuando salí me fui directo a la casa para cambiarme la ropa y después de comer y hablar con mi madre tome mi tarjeta de crédito, dinero en efectivo, llaves, celular y salí a el lugar donde nos encontraríamos.

Paso la tarde y nosotras llevábamos las compras, yo no compre mucho solo un conjunto y unos chocolates pero ellas llevaban bolsas en las dos manos y yo en cada mano llevaba cosas de ambas, aunque no querían dejarme pagar al principio de algún modo conseguí comprarle todo lo que quise, claro que respetando sus gustos y así, las quería acompañar pero no me dejaban al final de insistir pude convencer a Rose de ir en taxi y como Julieta no quería ir en taxi no tuvo más opción que dejarme acompañarla, en camino a su casa íbamos hablando de cualquier cosa y el camino se hizo corto, ya eran las nueve, llevábamos cinco horas de compras, llegamos a su casa, era una medianamente grande, más grande que la mía...

—Bien ya estas aquí, sana y salva -dije entregándole sus bolsas- ¡nos vemos mañana!

Nos despedimos y me fui a la casa cuando llegue cene, he hice la rutina de cada noche, me fui a dormir después de hablar un poco con el vecino misterioso no tan misterioso, ¿Qué pasaría si supiera que yo ya se quien es bajo esa capucha? ¿Y si supiera lo que soy? No quiero ni imaginarlo, aun así ¿pero que no solo somos amigos? Que mas da un amigo más o un amigo menos, siempre podre seguir con mi vida, o eso creo...

Al día siguiente me levante temprano e hice mi rutina de la mañana y arregle un poco mi cuarto, después de un largo rato termine de hacer el aseo de la habitación y me duche, no faltaba mucho para ir con mi madre a su evento por lo que comencé a vestirme, en poco tiempo salimos rumbo a donde se realizaría el evento el cual empezaría a las dos de la tarde...

Paso el evento después de unas cuantas horas las cuales me parecían siglos, en este evento me encontré con algunos de mis compañeros, en especial vi a Rose y Julieta las cuales después de que fuera su turno fueron a donde me encontraba, Julieta me dijo que su hermano si la iba a acompañar pero Rose iría sola ya que su madre no podía ir con ella, al parecer él era dos años mayor que ella pero de vez en cuando iba a nuestra escuela a ayudar con el club de música.

Ahora son las seis, estamos en casa después de ayudar a recoger las cosas del evento y comer algo de camino acá, la fiesta o baile como quieran llamarle seria a las ocho en punto y nosotras debíamos estar ahí un poco antes, después de entrar a la casa subí a mi habitación y me metí al baño dándome una ducha rápida, al salir me puse solo una toalla, mientras tanto secaba y cepillaba mi cabello, cuando este estaba seco me puse el vestido que llevaría, me peine y maquille, no dure mucho o eso creo ahora eran las 7:40 ya debíamos irnos...

—Nahiara estaba a punto de llamarte, -dijo al verme- vamos el taxi nos espera.

Asentí y subimos, una vez en el taxi me dijo lo hermosa que me veía, ¿en serio? Eres mi madre para ti siempre soy hermosa, veamos que me dicen las chicas, es verdad deberé saludar a los invitados junto a mi madre, espero y no sean muchos si no moriré de aburrimiento, por suerte mis amigos asistirán. Cuando llegamos al salón donde este seria entramos, ¿Cómo seria que le pidieran la invitación a la anfitriona? No me lo imaginó...

Son las 8:05 ya estaban llegando los invitados, a cada invitado que llegaba ambas íbamos y los saludamos, hubo muchos halagos para ambas, después de algunos minutos vi entrar por la puerta a las chicas entonces mi madre y yo fuimos a recibirlas, una vez que las saludamos y a un chico que venia con ellas mi madre me dejo quedarme con ellas y se fue a seguir saludando a las personas mas importantes.

—¡Chicas por fin llegaron! -dije y abrace a ambas- ¡se ven hermosas!

—Hola -dijeron ambas y me agradecieron- tu también te vez hermosa ¿verdad Julieta? -esta solo se limito a asentir.

—¡Gracias! Bien ¿quieren algo para beber? O... -me interrumpió Rose.

—Primero ¡hay que presentarte al hermano de Julieta! -grito la pequeña y miro a Julieta y después a un chico alto tras ella.

—El es mi hermano mayor, se llama Luciano -dijo señalando al chico tras ella.

—Es un gusto conocerte Luciano yo soy Nahiara Soler -le ofrecí mi mano.

—El gusto es mío -dijo tomándola.

Después de hablar un poco más vi a los chicos entrar por la puerta, me despedí para ir con ellos y los salude, no hablamos mucho pues Adrián andaba con su padre y Ernesto... no tengo idea quizás ¿una prima? ¿Amiga? Yo que se. Ya pasaba de las 9:30 yo estaba hablando con las chicas y Luciano, mientras lo hacia pude ver a Estefany andar por ahí ¿en serio ella estaba aquí? Es lo que me faltaba, espero que no pase nada malo...

En fin en la fiesta a cada uno de ellos los invitaron a bailar y todos aceptaron, yo deambule un rato, estaba en la ventana mirando al cielo cuando sentí una mano tocar mi hombro, volteo y era Adrián...

—¿Qué haces aquí sola?

—Veo el cielo ¿y tu?

—Mi padre por fin me dejo solo y quería saber si... ¿aceptarías bailar conmigo?

—Claro.

Al decir eso fuimos al dentro del salón y comenzamos a bailar, ese chico amable, educado, pero a la vez coqueto que a todas las chicas les gustaba, estaba bailando conmigo, ¿Qué pasara si me vieran sus fans? ¿Qué dirá Estefany que esta por ahí con su padre? Solo espero y no haga un teatrito, seguí observándolo mientras seguíamos con nuestro vals, y sin darme cuenta observaba cada detalle de él, sus ojos verdes cautivan, sus cabellos rubios cual oro que brillaban bajo las luces del salón y junto a los grandes ventanales que daban paso a la luz de la luna, es guapo no lo negare, pero lo que siento por él es solo amistad ¿no? Es más, se que a Marianne le gusta aunque no me agrada que me prohibiera el que estuviera junto a él, aun así sigue siendo mi amiga, no se por que se preocupa de una siempre amistad, o para mi eso es, este sentimiento cuando lo observo me es extraño pero no creo que me guste, la amistad también es extraña para mi puede y solo sea eso no hay de que preocuparse.

Termino el vals, entonces fuimos a tomar algo, platicamos un poco y en eso su padre lo llamo, nos despedimos y se fue, cuando él se fue Luciano llego a mi lado y me pidió bailar una pieza con él, era la ultima de la noche según yo se, pues ya pasaba de media noche, bailamos y hablamos en el acto, escuchando la música, cuando esta se termino ambos fuimos a donde las chicas y nos despedimos no había muchas personas ya, y ellos ya se iban a ir, les quería pedir un taxi pero ellos ya lo habían hecho y pasarían a dejar a Rose a su casa primero y después se irían a la suya, me despedí de los tres con un beso en la mejilla y regrese al salón, mi madre me esperaba ya era hora de irnos, llegamos a la casa y nos cambiamos la ropa, casi no hablamos porque estábamos cansadas, me quite el vestido de fiesta y me puse otra ropa, me desmaquille y solté el pelo entonces me acosté a dormir.

Al día siguiente me desperté tarde, todo el día me la pase haciendo cualquier cosa, escuchar música, ver vídeos por internet, revisar mi correo, hacer tarea, y demás. En la noche vi una película con mi madre, hable con mi vecino no tan vecino y mi madre, El vecino venia a visitarme mínimo dos veces a la semana, no me molestaba, pues así aprendía más de este lado de él, así pasaron las semanas ese día estábamos a sábado 30 de noviembre no llevamos mucho tiempo aquí pero aun así nos adaptamos rápido pues pareciera que hubiéramos vivido aquí desde siempre...

Así pasaron los días, con supuesta normalidad, hoy es domingo 22 por la noche estoy a punto de ir a dormir, cierto se me olvidaba, el día martes de la semana pasada fue 17 de diciembre y para mi suerte también empezó la luna llena! Y se acaba asta el 24, también mañana no tendremos clases asta en enero, pero aun así ¡tengo una salida con mis amigos! Y como siempre no me pude negar. Pues el 24 tendremos una cena de víspera y mañana por la tarde iremos a ver una película todos juntos, por suerte hoy compre los regalos para todos.

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