Embarazada De Mi Ex Jefe

Los días pasaron la convivencia se a vueltas más llevadera,el día de la fiesta de la empresa llego y presentaré a Valentina cómo mi mujer, siento que me estoy enamorando de ella, es una chica dulce y atenta a un que también hay momentos que me hace enojar pero eso me gusta,así que me e propuesto enamorarla,quiero que sea mia para siempre solo es cuestión de tiempo.

Ahora nos estamos arreglando para la fiesta de la empresa y asistirá muchas personas importantes sin duda será el evento del año.Ya estábamos listos y al ver a mi hermosa mujer suspiré.

-Dios que hermosa está mujer me vuelve loco- susurré para mí mismo.

-Te sucede algo Alejandro,es que el vestido no me queda bien- lo mira y sonrió al ver como me mira.

Voy a hacer que te enamores demi lo quiero todo o nada, no aceptaré menos mi querido Alejandro.

-No es eso Valentina, te queda hermoso, yo ya estoy listo nos vamos o llegaremos tardé - extendí mi mano y ella la tomo, salimos y nos encontramos con la abuela nos despedimos.

Está noche debo de tener cuidado,mi compañera está muy hermosa y tendrá todas las miradas puestas en ella y más de uno se le va a lanzar.

Al llegar el chófer nos abre la puerta y salimos del coche al entrar todos se voltean a vernos.

-Señor y señora García una foto para el periódico porfavor-dice el periodista.

Alejandro me tomo de la cintura hizo un movimiento rápido y me besó, dejando a todos los presentes con la boca abierta.El periodista caca la todo y se va.

Entramos y veo a mis antiguos compañeros y amigos.

-Hola señor García es un gusto verlo- dice un señor al acercarnos el.

-Lo mismo digo, ella es mi esposa Valentina, amor él es señor Días es un socio de la empresa

-El gusto es mío señor Días, amor mientras hablar de negocios puedo acercarme a mi amigo- le sonríe, el sabe que solo era una actuación frente a los invitados.

-Claro que puedes amor solo recuerda que un unos será discurso y después vamos a bailar -ella asiente y se va, pero yo lo le quitó los ojo de encina, a un que todos saben que es mi pareja no es bueno bajar la guardia.

Valentina camino hasta donde están sus amigos y los saluda.

-Hola, parece que te estás divirtiendo e amiga

-Si es que Alejandro no quería venir solo y me insisto en que lo acompañará, ya sabes todo un posesivo y marcando territorio

-Nos dimos cuenta con el tremendo beso que te dió nos llenó de envidia-ríe.

-Pero con envidia la buena verdad Laura-ella asiente y toma de su copa- a un que no para todas, Jénifer lleva mucho tiempo detrás de él-la miramos esta roja del enojo que tiene, reímos parecía una hoya a punto de explotar.

Veo a la chica moverse de manera seductora hacia Alejandro, el la salud con un beso en la , mejilla ella se incluye en la conversación y mueve su cabello para dejar más al descubierto su scote.

-Si me disculpan chica hay una zorra que hay que poner en su lugar-me termino mi bocadillo y me acerco a ellos, aclaro mi garganta- disculpen lamento interrumpir, pero necesito a mi esposo quiero bailar con él antes del discurso- pongo mi mano en su pecho marcando territorio.

-claro no hay problema-dicen al mismo tiempo y nos alejamos.

-Que pasa amor pace que tiene competencia- dice divertido por lo de hace un momento.

-No bueno si o estás tratando de confundirme verdad- nos dijimos a la zona donde estaban bailando y nos dejamos llevar por el ritmo de la música.

-No tienes porqué yo solo tengo ojos para ti y ella solo tiene un capricho conmigo nada más.

-Le gustas y te estaba coqueteando,tú deber es apartarla de tu lado y a un así la dejaste para que yo los vea verdad.

-Y que si lo estoy,creo que como la madre de tu hijo me merezco un poco de respeto no crees.

La música se detuvo y el micrófono sonó, esa era la señal de Alejandro para dar su discurso, el tomo mi mano y subimos al escenario.

-Queridos invitados en primer lugar les quiero dar las gracias por estar aquí y hacerse está noche una de las más importantes de la empresa por los logros obtenidos, pero sobre todo a mi esposa Valentina por ser mi pilar y la madre de mi hijo que crece en sí vientre, ellos son mis más grandes tesoros,TE AMOR VALENTINA eres maravillosa.n

Por un momento pensé que esas palabras eran reales y que él realmente me ama, mis ojos se llenaron de lágrimas por la emoción, pero después me recordé a mi misma que solo era actuación y que fingía délante de los demás y fue hay cuando la verdad me golpea en la cara como una bomba, ME ENAMORE DE ALEJANDRO, seque mis lágrimas y tomé la decisión de disfrutar al máximo cada momento. Cuando el discurso termino todo aplaudimos y el toma mi mano y nos perdimos entre los invitados llegando a la salida, subí al coche con su ayuda.

-que tal estuvo, te gustó mi discurso.

-Si estuvo muy bien a todos nos encantó- trato de sonreír.

Después de eso ninguno de los dos volvió a hablar, me quité los tacones, ya que me dolían los pies y al llegar a casa Alejandro me llevo en brazos hasta la habitación, cuando se intentó alejar lo sujete de la corbata y lo peque a mí besándolo, quería sentir su cuerpo junto a mío, lo necesito y es lo que e querido desde que volví a dormir en su cama.

- Alejandro quiero que me hagas tuya te necesito está noche- lo beso y desabrochó su camisa, él no se apartó en ningún momento al contrario me corresponde y comenzó a bajar las mangas de mi vestido, cada prenda de ambos termino en el suelo sin dejar de besarnos y tocarnos, solo queríamos eso sentirnos el uno al otro y dejarnos llevar por el placer, me levanto en sus brazos y me acomodo sobre, la cama para después besa mi cuello y después mis pechos jugando con cada uno de ellos, su virilidad se rosa con mi intimidad haciendo fricción y provocando gemidos entremos dos, sus besos fueron bajando hasta mi intimidad y cuando la besó una corriente eléctrica recorre mi cuerpo, no me estaba comiendo me estaba devorando y cuando su respiración la sentí en mi cara supe que el momento lego, entró despacio con temor e hacerle daño al bebé, pero le dije que no le pasaría nada, eso le dio confianza y se comenzó a mover despacio y después rápido, en la habitación solo se escuchan nuestros gemidos y el choque de nuestros cuerpos al llegar al climas se dejó caer a mi lado, pero no se apartó sino que me pego a el abrazándome dejo caer mi cabeza en su pecho y cerré mis ojos hasta el día siguiente.