JULIA

Mientras tanto. Brian, que de repente se enfadó, salió del comedor. No le importaba por el momento. Pero la pregunta era por qué también se había enfadado. De repente, Bryan se detuvo en seco al ver a Melody. Melody, que también vio a Brian, se dirigió directamente hacia él.

"¡¡Hermano Brian...!!" Melody exclamó con alegría. Melody era una chica a la que le gustaba mucho Bryan.

Porque eran amigos desde la infancia. Pero Bryan trataba bien a Melody no porque le gustara, sino porque la consideraba como su propia hermana pequeña. Así que era su responsabilidad protegerla.

Brian, al ver que Melody se acercaba a él, sonrió de inmediato. También se había olvidado de su repentino enfado con sus amigos por haber ofendido a Julia.

"Hola, Mel... ¿De dónde vienes? ¿Por qué no estás en el comedor?". Preguntó Brian con la mayor dulzura posible.

Probablemente si alguien viera a Brian tratando a Melody con tanta dulzura, vomitaría un poco de sangre. Después de todo, Brian era conocido por ser un chico que nunca trataba a las mujeres con ternura.

"Jejeje... No pasa nada, hermano. Estaba en clase porque tenía algunos deberes del profesor. Así que salí la última... y ahora voy a la cafetería. ¿Y tú adónde vas? ¿Por qué tienes tanta prisa?". Preguntó Melody de nuevo. A Melody le gustaba mucho Brian, así que se fijaba en cada pequeño detalle.

"Oh, no es nada. Acabo de salir del baño de la cantina, y ahora voy a volver a clase. Tengo algunos asuntos que atender". Mintió Brian a Melody.

Bryan no quería que Melody, con el estado de ánimo tan alterado que tenía, lo alterara aún más. Al oír la explicación de Brian, Melody asintió con la cabeza en señal de comprensión.

"Oh, ya veo... Sí, ya me voy. Iré a la cafetería primero, hermano, porque tengo hambre". Dijo Melody tratando de ser comprensiva. Porque parecía que podía captar las emociones en la mirada de Brian. No quería arriesgarse a insistir en ir con él. Al final, para poder ganarse el corazón de Bryan por completo, Melody sólo podía ceder por ahora.

"Sí, vete ya. La campana está a punto de sonar". Dijo Brian, instando a Melody a ir a la cafetería.

Después de eso, Brian se apresuró a dejar a Melody, que seguía de pie viendo cómo se marchaba hasta que su espalda se perdió en la curva del edificio. Con un poco de frustración por no haber conseguido acercarse a Brian hoy, aunque ya había conseguido la mitad, Melody se dirigió a la cafetería del instituto.

Mientras tanto, en el balcón del instituto. Julia cerró los ojos por un momento. Quería dormir unos minutos para distraerse del hambre. Pero de repente se sorprendió por algo, la llegada de alguien al balcón de la escuela. Quién si no Brian.

Brian le había mentido a Melody y se había ido al balcón. Tampoco sabía si Julia estaría allí. Por supuesto, Julia se sorprendió al ver llegar a Brian. Su corazón se aceleró de golpe. Pero cuando Brian desvió la mirada, vio a Julia allí.

"Julia...", murmuró Brian en voz baja. Durante un instante, sus miradas se cruzaron.

Tic Tac Tic

Pero de repente, Brian recobró el sentido y apartó la mirada. En otra dirección, con las manos en las caderas.

(Oh, no, ¿por qué me he encontrado con Julia aquí? Tengo miedo de que piense mal de mí. Que piense que he venido a buscarla). Brian pensó para sí mismo. Estaba confundido.

En realidad, tenía muchas ganas de saludarla, pero era demasiado tímido. Además, sentía que algo faltaba cuando Julia ya no estaba cerca. Pero, por supuesto, era demasiado tímido.

(Brian debe de estar harto de verme. Ni siquiera me ha dirigido la palabra todavía). Julia pensó con tristeza. Era consciente de sí misma.

Sin decir una palabra, porque Julia también era consciente de que Brian no querría hablar con ella. Finalmente, optó por darse la vuelta y marcharse. Brian, que volvía a encontrar extraño el comportamiento de Julia, se quedó perplejo. Brian observó la espalda de Julia mientras se alejaba. Todavía no podía creerlo.

(¿Qué le pasa? ¿Le ha pasado algo en la cabeza? ¿O se ha golpeado con algo? Pero Julia nunca ha tenido un accidente. ¿Cómo es posible que haya cambiado de repente?). Brian pensó sin comprender.

La campana de salida del colegio por fin sonó. Julia, que ya no estaba pensando demasiado en nada, ya no tenía prisa por salir corriendo por miedo a que sus hermanos pequeños la dejaran atrás, ni por caminar junto a Brian. Ahora estaba más relajada metiendo todos sus libros en la mochila y luego se levantó de su asiento cómodamente.

Una vez delante del edificio del instituto, Julia también ignoró su entorno, salió y buscó transporte público para volver a casa. Mientras tanto, detrás de ella, Meta y Mita observaban a Julia desde la distancia.

Se preguntaban si Julia se acercaría a su coche de lujo y esperaría como de costumbre. Pero, contra todo pronóstico, Julia ignoró eso y pasó de largo por el aparcamiento.

"¿Qué le pasa a Julia? Normalmente espera cerca de nuestro coche o persigue a Brian". Meta dijo, sorprendida por el cambio de actitud de Julia.

"¿Tú también te has fijado en Julia?". Preguntó Mita.

A lo que respondió asintiendo con la cabeza. Mita suspiró. Realmente pensaban lo mismo. Mita también tenía un mal presentimiento sobre su hermana. ¿Por qué ahora?

"Bueno, vamos a casa...", dijo Meta de nuevo, arrastrando del brazo a su hermana gemela. Luego subieron al coche y abandonaron el edificio donde estudiaban.

Mientras tanto, Julia ya iba en el transporte público. Sentada, apretujada entre los demás pasajeros. También otros niños del colegio, que acababan de volver de sus respectivos colegios. Algunos niños con uniformes diferentes al de ella preguntaron a Julia, curiosos.

"Eh... ¿Hermana, tú vas al colegio internacional Tunas Harapan (nombre ficticio del colegio)?". Preguntó uno de ellos con un uniforme diferente al de ella. Julia, al oír las palabras de la niña de su edad, asintió con la cabeza.

"Sí, eso es correcto". Dijo Julia educadamente. En sus ojos no había intención de menospreciar por ser de esa escuela de élite. Bueno, sólo su escuela era de élite, pero su vida no lo era. Jajaja...

"¡¡¡Guau!!! Pero, ¿por qué vas en transporte público? ¿No se supone que todos los que van a esa escuela son ricos...?". Volvió a preguntar, mientras el resto de pasajeros escuchaban.

"Es cierto, la escuela está llena de hijos de gente rica. Pero yo no estoy incluida, voy a esa escuela porque soy afortunada. De lo contrario, ¿cómo podría permitírmelo?". Julia volvió a decir, bromeando un poco. Todos se rieron.

"Tienes razón. Sólo la matrícula ya cuesta cientos de millones. ¿Cómo se puede ir a esa escuela? Pero tienes suerte de poder ir. ¡Ánimo!". Volvieron a decir.

Julia sonrió y asintió con la cabeza. Aunque lo que decía no era cierto. Entró en esa escuela porque le rogó al Sr. Sanjaya que la matriculara allí. Porque sus notas medias en la escuela secundaria eran bajas, y seguro que no la aceptarían.

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