Lilian amó con sinceridad al emperador Dmitri y él también dijo amarla, por eso a ella no le importo ser solo una concubina, pero después de que este se casara con su prometida, comenzó a ignorarla, el emperador se dejó manipular por la madre emperatriz al punto de condenar a la familia de Lillian e incluso ella fue ejecutada de manera injusta, pero para sorpresa de Lillian, ella regresó a su pasado, cuando apenas era una niña y ahora, tenía la oportunidad de cambiar su cruel destino y el de su familia.
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Capitulo 23
Narra Jacob
Cuando nos alejamos de los demás ella me miró y eso provocó que quisiera darle un beso, pero me contuve y miré en otra dirección
Lillian: ¿Y bien para que quiere hablar conmigo?
Jacob: Quería hablar con usted para decirle que le informe al emperador que quiero que usted entre a la guardia de cazadores y dijo estar de acuerdo pero antes de dar su aprobación el duque Vengerov tiene que dar la suya
Ella al escuchar eso salto de alegría y luego me dio un abrazo el cual me hizo sonrojar, ella al notar lo que había hecho se separó de mi enseguida y luego me dio la espalda pude ver que tenía el rostro sonrojado por el color de sus orejas
Lillian: Gracias por ayudarme pero ahora me toca a mí convencer a mi padre
Jacob: Se que logrará obtener lo que quiera y tenga en claro que yo estaré para usted como un amigo
Ella volteo y me miró a la cara seriamente luego de cinco minutos relajo su rostro
Lillian: Pensé que al llegar aquí nadie me aceptaría pero me equivoque
Jacob: Una cosa antes de que volvamos, por favor trate de estar lo más lejos posible de Agatha Lester ella puede llegar a ser una pesadilla cuando se lo propone
Lillian: ¿Porque habla de ella como si la conociera muy bien?
Jacob: Por que ella fue una de esas personas que me hizo daño
Lillian: Comprendo entonces me alejaré de ella, pero antes quisiera saber que fue lo que le pasó a usted en su primera vida
Jacob: Le dije que lo contaría cuando estuviera listo Lefe
Lillian: Puez yo le conté mi pasado a usted merezco que me cuente el suyo
Ella me miró con cara de perrito regañado y eso me causo risa
Jacob: Usted nunca acepta un no por respuesta ¿cierto?
Lillian: No, ahora por favor dime
Jacob: Está bien se lo contaré pero no ahora por qué usted tiene que regresar a la fiesta de té
Ella ante mi respuesta soltó un suspiro de resignación y luego volteo hacia donde estaban los demás
Lillian: Está bien regresaré y espero que me pueda contar su historia
Yo asentí antes lo que ella dijo y luego volvimos a la mesa, Alexander nos miró y luego siguió mirando como un idiota a Francis hasta que lady Lillian lo interrumpió
Lillian: Hermano ya es hora de retirarnos
Charlie: Fue un placer conocerla alteza
Francis: El placer fue todo mío, sin duda son hermosas como las describió mi querido hermano
Lillian: Espero poder llevarnos bien alteza
Francis: Siendo hermanas del general Blair, claro que podremos ser amigas
Vi que lady Lillian le sonrió Alexander y este solo negó con la cabeza, después de que ellas se despidieran Cédric y las chicas presente salieron del lugar
Después de que ellas se fueron vi que Francis me miraba con una sonrisa en sus labios
Jacob: ¿Por qué me miras así?
Francis: Cuando estemos a solas te lo diré
Yo mire a Cédric y este solo se encogió de hombros
Jacob: Yo mejor me voy nos vemos después
Le di un beso en la mejilla a Francis y a Cédric le toque el hombro, luego salí de ahí y cuando estaba en la entrada del palacio vi a lady Lillian hablando con Naigel Lefebvre el hijo del duque Xuan
El imbécil tenía una estúpida sonrisa mientras que lady Lillian tenía el ceño fruncido al parecer no le había caído bien, cuando estaba por acercarme a ellos pero Alexander se me adelantó agarro a Lady Lillian por la mano y se la llevó de ahí
Cuando vi que el carruaje de Alexander se marchó yo seguí con mi camino hasta mi caballo pero su molesta voz me interrumpió
Naigel: Pero mire a quien tenemos aquí
Jacob: ¿Que es lo quieres ahora?
Naigel: De ti nada pero de esa linda chica que se acaba de ir si, se que ya la conoces y también se que te interesa
Escuchar lo que me dijo me dio tanta rabia que me regrese y le di un puñetazo en la cara haciéndolo caer, él se pasó la mano por la boca y se vio la sangre que salía de su labio
Jacob: Si te acercas a ella no respondo por lo que haga, y que no se olvide que soy el duque de Cádiz
Sin más que decir camine hasta mi caballo y lo monte cuando estaba por marcharme el me grito algo
Naigel: Tus estúpidas amenazas no me afectan
A mi tampoco me importaban lo que decía el así que no le preste atención