La Elegida: Secretos De Una Vida Oculta.

***Narra Cleo***

Aquella mujer me miro, haciendo un escaneo de mí, me enjuicio con la mirada, me escudriño el alma, y se metió en mi cabeza nuevamente, el bosque que nos rodeaba se quedó en un silencio abrumador, y su sola presencia pesaba como si todo el mundo se posara sobre mis hombros.

—¿Cleo Hugues, que es lo que deseas? — me pregunto aquella mujer de cabellos plateados.

Pero, su pregunta me tomo por sorpresa, porque yo misma me he preguntado lo mismo, ¿Qué deseo?, no lo sé, no sé qué deseo, ¿Cuánto ha pasado desde que cumplí mis veintitrés años?, ¿dos meses?, ¿seis o acaso solo han sido semanas?, ya hasta la cuenta he perdido, y, ¿Cuántas cosas han pasado?, ya perdí a mi madre, mi padre ha regresado, mis dos amigos resultaron ser betas, Demian es un cazador, Akira resulto ser una loba de sangre pura como yo, Evans fue parte del pasado de mi madre, ni nos olvidemos que soy parte de un linaje antiguo de hombres lobos, y ¿Cuántas cosas más me faltan?

—Y lo que yo deseo ¿Qué tiene que ver contigo?, ¿Quién eres? — le exigí a la mujer.

—Yo soy el futuro y también el principio — me contesto en una risilla de satisfacción.

La presencia de esta mujer me ponía los nervios de punta, mi lobo ni siquiera intentó salir, ¿le temía? no, ¿le respetaba? tal vez; solo se mantenía nervioso, pero a raya.

—¿El futuro dices?

—Así es y también soy el principio.

—¿El principio?

—Dime Cleo ¿sabes de donde provienen los hombres lobos?

—No exactamente, solo sé que existen desde hace mucho tiempo. — le conteste.

Pero, ¿de qué va todo esto?, yo estoy preocupada por Luna, ella es mi prioridad, necesito ponerme en marcha antes que se cumpla la hora que le he dicho a los chicos.

—Por el tiempo no tienes que preocuparte Cleo, si yo quisiera te podría tener aquí años, y en el mundo real, podrían ser solo segundos o aqui podrian ser segundo y en el mundo humanos podrian ser años— se jacto orgullosa.

—¿Qué estás diciendo?

—¿No te has dado cuenta?

—¿De qué exactamente? — le pregunte dudosa.

—¿De que el tiempo en tu reloj no ha avanzado? — se río satisfecha y a mí el corazón se me detuvo un instante.

—¿Cómo es posible?

—Se llama poder Cleo, poder, yo puedo hacer mas que detener el tiempo o hacerlo avanzar mas lento, puedo crear, ¿quieres que te cuente una historia Cleo?

—No me interesa nada lo que tengas que decir

—Claro que  si lo hace Cleo, siempre y cuando quieras encontrar a tu amiga Luna, o, ¿es que no la quieres encontrar?, entonces tendras que ecuchar lo que te voy a contar — me dijo en un tono severo.

Sentí claramente, como mi cola se metió entre mis patas, ahora si tenía miedo, ella tiene a Luna y la usara para mantenerme aquí.

La escuche carcajearse, — eres muy ingenua Cleo. — dijo entre risas.

Esas fueron las mismas palabras que me dijo Evans en ese día en el que asesino a mi madre, es extraño, porque estoy escuchando a esta mujer, algo en ella me hace aferrarme a mi lugar, soy un Alfa poderosa eso lo sé, pero no soy rival para esta mujer, mi destino se marco, se me dijo que salvaria a el mundo, pero estar frente a ella me hacia dudar.

¿No soy acaso la elegida por los dioses para salvar al mundo?,

¿Pero exactamente de que lo voy a salvar? O ¿de quién?

Una idea loca paso por mi cabeza y un escalofrió me recorrió la espina dorsal, esa mujer me miraba como si supiera lo que estaba pensando,como si supiera que por dentro me estaba carcamiendo el miedo hasta los huesos, y como si supiera que ella era la causante de todo aquel sentimiento y de el temor que habia en mi.

—¿Qué quieres de mí? — pregunte ignorando sus palabras anteriores.

—Solo que me escuches Cleo, solo eso y me voy. — dijo con una sonrisa burlona en el rostro, —deja de preguntarte quien soy, creo que ya lo descubriste, eres inteligente.

—Yo no sé nada — le respondí.

—Está bien no te voy a forzar, me basta con que ahora me escuches,. — dijo y camino hacia a mí.

No evite dar un paso atrás al sentir su presencia más cerca de mí, cosa que parecía que a ella le divertía bastante tenerme en esta situación; el silencio seguía siendo abrumador y hacía que mis nervios se me pusieran al límite.

No pude decir una palabra más después de que ella se acercara hacia a mí, me quede perpleja, inmóvil, los pensamientos se me bloquearon y no fui capaz de ordenarle a mi cuerpo que se moviera, o que dijera algo, solo la miraba, y esa mirada en los ojos me decían algo que yo no quería aceptar, me negaba hacerlo, porque no podía ser verdad.

—¿Por qué no dejas de pensar tanto Cleo?, pronto tendrás tu respuesta, te lo he dicho solo escúchame y ya está — me dijo, cosa que me dejo un poco desconcertada, es como si ella escuchara todo lo que digo en mi cabeza.

—Está bien, te escuchare, no es como que tenga otra opción o ¿sí? — le dije sarcástica.

—No — respondió un poco molesta.

Ahora me daba cuenta a esta mujer no le gustaba que otra que no fuera ella hiciera las bromas, es mejor que no la siguiera molestando.

—Bien Cleo como te decía, vamos hablar del pasado, pero mucho más allá del pasado,cuando todo comenzo, cuando tu no existias, ni lo hombres lobos, ni los humanos, ni ninguna criatura de todo este maldito planeta — dijo, yo solo me limito a escucharla, — antes cuando este planeta no era nada y solo estaba el basto lienzo de un planeta hinospito; en el reino de los inmortales nacieron doce dioses, ya sé, no me mires asi, sé que ustedes los humanos, bueno los humanos solo creen que existe un dios que creo los cielos y la tierra, pero no es esa la verdad, la verdad es que son doce, doce dioses que mantienen al universo en perfecto equilibrio, bueno lo intentan, el caso es que son doce, esta Erhan que controla el amor; Milhan, es el encargado de la naturaleza; Orlhin, el cuida la tierra; Serhan, el a controla el agua; Shelhim, el engreído que controla la belleza; Tiryan, el dios del trueno; Khemh, controla los vientos; Lushihk, diosa de la luz; Nakhin, Dios del fuego; Melkhan, dios de la humanidad; Okrhin, dios de los animales y no menos importante el mejor dios de todos Lykhan, diosa del caos, esos son los doce dioses que rigen el universo, que crean y destruyen planetas enteros, y esos mismos fueron los responsables de crear a el planeta TR2-024, ósea a lo que ustedes le llaman planeta tierra.

—¿Pero ¿cómo es que tú sabes todo eso?, es información no la he encontrado en ninguna de los libros de mi manada, además ¿Qué tiene que ver todo eso conmigo? — dije un poco fastidiada, cierto que cada palabra se me hacia una locura, pero ya no podía discernir entre la realidad y la ficción.

—No te adelantes aun pequeña loba, déjame continuar — me miro severa.

Asentí en aprobación de que seguía teniendo mi atención.

—Bien, te decía que ellos son los que rigen al basto universo, entonces antes que decidieran crear al planeta tierra, los hermanos inmortales, pero les llamaremos los primeros ¿ok? — solo asentí y ella me miro satisfecha de tener toda mi atención — los primeros estaban aburridos, por lo que decidieron salir a visitar a sus otras creaciones, y vieron que todo estaba en perfecta armonía, querían más, amaban crear planetas, sociedades y ver lo que los humanos son capaces de hacer mientras evolucionan, entonces se encontraron con una pequeña bola de materia, gas y otras sustancias y decidieron embellecerla,  Orlhin se aseguró de que la tierra fuera fructífera para que la naturaleza que plantaba Milhan sobreviviera, Shelhin se encargaba de darle belleza, asi cada uno hizo  uso de sus talentos, pero a Lykhan nunca la dejaban tocar nada, ¿sabes por qué? — me miro esperando que le respondiera pero creo que no tenía la respuesta o al menos no debía de decirla.

—Porque la diosa del caos, lo que toca los destruye, lo hace feo y lo hecha a perder, porque eso era lo que era, caos, solo caos, Lykhan no entendía por qué nunca le daban la oportunidad de que ella creara algo por su cuenta, el que fuera la diosa del caos no quería decir que no tuviera el talento de crear cosas hermosas, entonces se decidió que en este planeta ella crearía algo que mereciera la aprobación de sus hermanos, de demostrar que no solo podría crear caos, también podría hacer belleza, hermosura y perfección.

Espero que los primeros crearan y diseñaran a la tierra a su gusto y a su imagen, cuando Melkhan se concentró en diseñar a la humanidad, Lykhan no quito los ojos de su hermano y se concentró en ver como se cercioraba de poner el más mínimos detalle, Shelhin le agrego belleza y el humano fue perfecto, entro en acción Erhan y le dio la capacidad de amar, pero el equilibrio se trata de poner todo por igual, asi que como la diosa del caos, Lykhan tenía que equilibrar ese amor con la capacidad de odiar.

Todo lo malo que existe en el planeta es por causa de Lykhan, ella es la que se encarga de los desastres, de los asesinatos, de los sentimientos de odio, envidia, egoísmo, traición, todo, todo lo malo proviene de ella, eso no la hacía precisamente feliz, aun asi tienen que cumplir con su rol en el equilibrio universal.

La humanidad en el planeta tierra era perfecta y todo estaba yendo conforme los primeros querían que fueran, al igual que los otros mundos, este estaba llevando la perfección perfectamente, y eso tenía satisfechos a los demás, pero no a Lykhan, ella quería darles algo interesantes que ver a sus hermanos, asi que se recluyo en su palacio por años y perfecciono un hechizo para poder vincular todos los talentos, asi que ella se dedicó a crear a un humano perfecto, aun mas perfecto que el de Melkhan, con belleza, fuerza, amor, odio, pero también con la capacidad de cambiar a su voluntad.

De ahí nacieron los hombres lobos, o como bien yo los llame Lykan, les di todo el poder de dominar el mundo, pero nada duro cuando mis hermanos se dieron cuenta de mi creación, los Lykan tenían el libre albedrio, no era necesario que algún dios los rigiera, los cree con la capacidad de crear sus propios estándares, como los humanos lo hacen, solo que aquí se rige por el poder y la fuerza, ellos mismos con el paso de los años los nombraron como a los más fuertes Alfas, a los siguientes Omegas y los Betas, cada categoría es fuerte solo que unos nacieron para ser lideres y los otros para servir a este líder.

Mas sin embargo a mis hermanos no les gusto que empezaran a crear caos, al ser hijos del solo el caos, era su naturaleza crearlos, tenían la necesidad de crear caos en el planeta tierra, ya que se querían adueñar del mundo humano, exactamente, querían que los humanos fueran como ellos, y desarrollaron la capacidad de cambiar la naturaleza de los humanos, eso les enojo a mis hermanos y me retaron, me enjuiciaron por las abominaciones que yo había creado, pero creo que ustedes son los seres más perfectos que existen, son casi inmortales, y sanan de cualquier mal, además son capaces de cambiar la naturaleza de otros humanos, si te encuentras un humano moribundo, ¿no usarías tu capacidad para darle una nueva oportunidad?

Mis hermanos no lo querían ver de esa manera, por más que yo se los intente decir, ellos no querían entenderlo. Pero el maldito equilibrio; decía— todo mal, necesita un bien.

Me expulsaron del reino inmortal, mis hermanos me echaron, después de eso crearon a una raza de humanos capaces de convivir y cuidar a los Lykan, con el cual venia la obligación de hacerlos resguardarse en las sombras, mis perfectos hijos vivirían escondidos de la sociedad y del mundo, que desperdicio de hermoso y perfecto talento, pero yo soy el caos, y me habían expulsado, no se los iba a dejar fácil, ¿cierto?

Mi hijo mayor el primero de los Lykan, creo el caos y reto a los guardianes de mis hermanos, cosa que llevo a una gran guerra y muchos humanos, muchos guardianes y muchos de mis hijos murieron, no me juzgues con la mirada Cleo, no es lo que quería, ustedes son mi creación, son como mis hijos, verlos morir me hiere, pero no estoy dispuesta a dejarlos ganar nunca, estoy dispuesta a darle este mundo austedes, solo a ustedes.

—¿Me estás diciendo que tú eres la inmortal del caos, la diosa Lykhan?, ¿es broma cierto? — le pregunte sorprendida, no voy a negar que es una interesante historia, pero el universo tiene a un solo dios.

—No, no es ninguna broma;  todo es verdad yo soy Lykhan, la primera Lykan, diosa inmortal del caos, una imortal — afirmo.

Se acerco a mí con esas ropas negras y esos cabellos blancos, me miro con esos ojos grises que te penetraban el alma y me volvió afirmar que ella era persona de la historia, la que queria desatar un caos que arazaria con toda la vida de el planeta.

—Pero… ¿Qué es esto? — tartamude cuando muchas imágenes empezaron a surgir en mi cabeza.

—Esta es la verdad Cleo — dijo

Tan pronto como termino de hablar se fue.

Me quede con mil preguntas sin responder, ¿Cuál es mi propósito?, ¿si ella nos creó, porque quieren que salve al mundo?, ¿de quién lo voy a salvar?, me tumbe de rodillas en aquel lugar con la mirada fija al cielo, no sé cuánto tiempo había estado dentro de esa realidad, pero en lo real solo habían pasado segundos.

Y ya no era necesarios buscar más a Luna, al final me había dado mi respuesta.