Desgraciada Vida

Luego de una semana espectacular en este hermoso lugar Aura y Izan preparaban sus maletas para regresar a casa, fueron momentos que los hicieron acercarse demasiado, descubrieron que les gustaba estar en compañía del otro y además revelaron dolorosos momentos del pasado de cada uno que han sido devastadores en su vida...

-te gusto haber venido aqui?- pregunta Izan observándola

-realmente me encantó, nunca había visitado un lugar tan mágico como este y creo que serán momentos inolvidables-

-en eso tienes toda la razón, vamos?-

-si, vamos-

se tomaron de la mano y caminaron juntos al auto directo al aeropuerto, donde los esperaba el avion que los llevaría de regreso al lugar donde desde un principio habían jurado odiarse, pero que las circunstancias los habían hecho romper ese juramento..

tras algunas horas de viaje finalmente estaban aterrizando de regreso en París, cuando llegaron a casa ya eran pasadas las 10 de la noche, aparentemente todos dormían, como par de niños se escabulleron en silencio a la cocina, estaban hambrientos después del viaje, prepararon juntos unos sandwichs y luego de lavar los trates se fundieron en un apasionado beso, podían sentir la tensión sexual que había entre ambos...

Cada vez que unían sus bocas o sentían sus tactos, se habían olvidado de todo hasta que un carraspeo los interrumpió, se separaron rápidamente para mirar tras ellos a Fausto con cara de asombro..

-que bueno que llegaron bien muchachos-

-Fausto, que bueno verlo-

-papa.. como han estado?-

-al parecer ustedes están mejor que nosotros, pero todo anda perfectamente bien-

-disculpe por lo de hace un momento, no habíamos notado que estaba usted aqui-

-pude darme cuenta, me alegra que se estén llevando mejor-

-bueno padre ehmm.. nosotros ya iremos a descansar es un poco tarde- dijo rascándose la cabeza

-que descanses Fausto- dijo Aura llena de vergüenza

luego de ese momento vergonzoso se dirigieron juntos a la que seria su habitación de esposos, apenas entraron ambos comenzaron a reír tal cual niños por lo sucedido, habían sido descubiertos...

-que vergüenza jajaja-

-bueno para nuestra defensa, estaba feliz-

-pues al parecer sus planes han dado resultado, nos estamos llevando mucho mejor-

-muchísimo diría yo- contesto Izan atrayendola

hundió su cabeza en su cuello dejando un camino de besos desde este hasta sus brazos.. Aura por su parte no pudo reprimir un gemido..

-si sigues haciendo esos sonidos no podré detenerme- dijo este aun con la cabeza en su cuello

-bueno... creo.. creo que debemos dormir mañana es la sesión de fotos y debemos llegar temprano a la empresa- contesto esta con la respiración agitada

-bien, tienes razón, vamos a dormir-

luego de que cada uno se duchara, se acurrucaron tal cual hacían todas las noches desde el día de su boda... parecía algo ilógico que hayan cambiado tanto, pero tal parece que los corazones si tienen reparación, aunque tarden pero es posible.. en la vida no se pueden evitar las desgracias, ni pasar por alto los obstáculos, pero si un alma es lo verdaderamente fuerte, puede superar hasta las llamas que consumen lo imposible, dándole paso a lo inevitable y consiguiendo así la victoria hasta lo indispensable...

eran el complemento uno del otro, solo que no querían darse cuenta.. pero las circunstancias los harían ver la realidad de una forma algo pesada...

A la mañana siguiente Aura se despertó con una gran sonrisa en su rostro, podía escuchar desde su habitación la risa de la pequeña Miranda que inundaba cada rincón de la casa, estiro su mano para no sentir a Izan a su lado lo que la hizo levantarse de la cama, luego de darse una ducha se dispuso a bajar las escaleras en busca de su esposo y de la pequeña niña que robaba su corazón siempre con sus ocurrencias y su ternura infinita.. Camino al comedor pero no estaban allí, así que decidió ir a buscar al jardín..

al llegar a este pudo ver una escena que la hizo reír descontroladamente

Izan tenía una corona de princesa, mientras Miranda colocaba algo de labial en su boca, su cara era realmente épica, aún no había notado su presencia, pero se podía notar la cara de terror que tenía, una cara de esas que piden auxilio en silencio

-jajajaja que están haciendo?- dijo está al borde del colapso, de tanto reír

-naniii, ya despertaste, estoy preparando al príncipe para ir al trabajo- contesto inocente la pequeña niña

Izan miraba a Aura con cara de que quería salir corriendo de allí, pero esta no podía parar de reír lo que también le causó gracia a este que luego de mirarla comenzó a reír descontroladamente

-no te rías- dijo el

-lo siento jajaja... pero no puedo, te ves... te ves ridículo y a la vez tierno con esa corona y los labios color carmín-

-ya veras-

este se levantó de su silla y cargo a Aura en su hombro luego la deslizó en el piso y comenzó a hacerle cosquillas.. esta reia sin parar, se estaba quedando sin aire...

-pa..ra.. Izan jajaja.. no..puedo respirar-

-Miranda cariño, no crees que la princesa Aura no puede ir así al trabajo en esas fachas?-

la niña hizo una gran O con su boca en señal de asombro

-es cierto hay que arreglarla de inmediato- dijo dando brinquitos

-que? no.. yo iba a ir a desayunar- trato de excusarse Aura

-nada de eso, ven aquí te maquillare y quedaras hermosa-

resignada se sentó y dejó que la pequeña jugará con su imaginación... Izan la observaba con una mirada tonta en su cara... en ese momento hizo su llegada Edwar, que casi le da un ataque de risa cuando los vio...

-que rayos es eso?- dijo riendo

-cállate idiota- contesto Izan

-que bueno ver que se llevan mucho mejor princesas- dijo burlándose de su amigo, quien le lanzó un zapato golpeándolo en la cabeza

-Auch, eso dolio-

-pobre Edwar.. creo que también necesitas un poco de decoro, no crees Miranda?- dijo Aura con malicia

-ustedes son macabros- contesto Edwar, tratando de escapar

-que pasa? te da miedo un poco de color? no querrás lastimar los sentimientos de la pequeña Miranda o si?- dijo Izan haciéndole señas a la niña

-chantajistas- contesto un Edwar resignado

luego de la sesión de belleza se ducharon otra vez para quitarse todo aquello y se subieron al Auto para ir a la empresa..

al llegar a esta eran el centro de atención, ya todos sabían de su reciente matrimonio y los felicitaban, mientras que otros solo miraban a Aura con disgusto...