Mika, la hija del temido líder de la mafia, ha vivido toda su vida bajo el yugo de su padre, quien no solo asesinó a su madre, sino que también la separó de sus hermanos para convertirla en una máquina de venganza despiadada. Su padre tiene grandes expectativas para ella: debe convertirse en la reina de la mafia y llevar su apellido a nuevas alturas, o enfrentarse a las consecuencias más terribles, que incluyen la vida de sus hermanos.
Dimitri, un joven rival que también aspira a ser rey, compite contra ella en un juego mortal donde las alianzas son efímeras y las traiciones son habituales.
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REMORDIMIENTO
JEONG
—Entonces…¿ese día ella se fue con su padre, solo para ser llevada al cuartel de entrenamiento?.
—Si…Y si crees que haber presenciado la muerte de su madre fue mucho, aun no has visto nada, la chica a la que tanto dijistes tenía una vida con lujos y llena de color, paso por todo lo que te mencionare a continuacion.—me dice con un destello de rabia y tristeza en sus ojos.
En ese momento mis vellos se erizaron y un frío recorrió todo mi cuerpo.
—Estas eran nuestras habitaciones—me dice mostrándome una imagen de sus habitaciones, que más bien parecen habitaciones para presos.
Me quedo perplejo sin poder decir ni una palabra.
—Solo salíamos cuando teníamos que rendir las pruebas, ir a combates o por cualquier otra cosa que sea para luchar o entrenar, no se permitían las relaciones, y tampoco es como si tuviéramos cabeza para eso, sin embargo…Conozco un par que les gustaba desafiar las reglas, pero su felicidad no duró mucho—sonríe levemente—Al entrar pasamos por 5 etapas, la primera era el entrenamiento para saber cómo y cuándo atacar a tu enemigo, con técnicas de combate, tu hermana entrenaba dia tras dia sin parar dentro y fuera de su habitación, y lose por la suya quedaba al frente de la mía, como ya vistes en en la imagen hay dos espacios con camas separados por barrotes…
Al verla practicar yo lo hacía también pues ya que éramos alfas teníamos que ser los mejores, eun-ji y alessander tambien entrenaban duro, sin embargo solo uno podía ser el mejor de todos, cada etapa duraba 2 años…
la segunda etapa era un poco más dura, el objetivo era hacer que olvidemos los miedos y el dolor por lo que nos encerraban en habitaciones separadas totalmente oscura con ratas que comieron de nuestra piel, y era un dolor inexplicable, fuera de la habitacion habia un sensor de conteo, un minimo ruido se escuchaba y empezaba a contar 1, 2 , 3 ,4, y si llegaba a 5 ruidos otro sensor se activavan e inmediatamente disparaban dejando tu cuerpo lleno de agujeros, asi fue como mas de 100 niños raptados, hijos de los trabajadores de nuestros padres, y huerfanos murieron.
Mi corazón empezó a acelerarse, mis manos sudaban mientras temblaban, veia todo como si yo estuviera alli, como las ratas comieron de su piel y ellos eran lo suficientemente fuertes para no producir ni un solo ruido… me pregunto ¿Como mi hermana paso por todo esto?.
—¿Quiere decir…Que si mi hermana hubiera producido 5 ruidos, ya no estaría con nosotros en este momento?.—pregunto con voz temblorosa, mientras pequeñas lagrimas corren por mis mejillas.
—Asi es, pero ¿sabes por que no los produjo?, ¿Por que a pesar de que se estaba muriendo del dolor no produjo ni un solo ruido?...Para serte sincero todas las personas incluyendo me pasaron al menos a los 3 ruidos, solo hubo una que en dos años que duro la etapa no hizo ni un solo ruido, durante 2 años pasamos encerrados en la habitación, la comida nos la pasaban por debajo de la puerta, comimos junto a las ratas sin ver la luz del sol, cuando la prueba termino nos bañamos en piscinas con aguas especiales que te curan las heridas, ente caso regeneran nuestra piel la cual estaba toda mordida por las ratas…
A tu hermana le dieron un reconocimiento por haber aguantado 2 años sin hacer ruido, despues de eso cuando volvimos a la habitacion le pregunte…“¿Como pudistes aguantar tanto?”, y su repuesta fue, “nececito ser la mejor y la mas fuerte para poder protejer a los que amo”.
Imagino que se refiere a ustedes.
—¿Quieres que siga o eso es suficiente para que puedas entender el por que no pudo llegar antes?—dice mirándome a los ojos.
Mi corazón se desmoronó por completo, todo este tiempo la juzgue mal, la odie, le grite, e incluso le dije que no merecía nuestro perdón cuando ella era la sufría, siento un gran remordimiento por haberla tratado mal, una culpa inmensa me invadía.
—Es suficiente…nuestro dolor no era nada comparado con el de mi hermana, necesito pedirle perdón aunque eso no significa que mi remordimiento se irá—digo con la mirada abajo.
—Claro, pero no puedes decirle aunque ya lo sabes todo, tienes que esperar a que esté lista para decirles.
—Está bien.
Salimos del lugar y nos dirigimos al auto, subimos y en todo el camino solo pude llorar por el gran remordimiento que sentía, mientras Dmitri solo palmeaba mi espalda.
Después de unos minutos una mansión se alza majestuosamente en medio de un extenso jardín, rodeada de altos árboles y flores vibrantes. Su fachada de piedra blanca brilla bajo el sol, con grandes ventanales que reflejan el paisaje circundante. Un elegante camino de grava conduce a la imponente entrada, flanqueada por estatuas clásicas. El tejado de pizarra oscura se recorta contra el cielo azul, mientras que un amplio balcón invita a disfrutar de las vistas panorámicas. Todo en esta mansión irradia lujo y sofisticación, prometiendo un mundo de confort y estilo en su interior.
—Esta es la mansión que el padre de mika le regaló para que viva con ustedes, sal del auto—me dice con una expresión fría.
—Tu no vienes?—digo mientras salgo del auto.
—No, tengo que ir a un lugar primero.
—Ok entonces…Adiós.—digo al que él responde con un “ujummm”.
Camino hasta la entrada y la enorme puerta se abre y te recibe un gran vestíbulo iluminado por un impresionante candelabro de cristal que cuelga del techo altísimo. Las paredes están decoradas con elegantes molduras y retratos enmarcados que cuentan historias de generaciones pasadas. El suelo de mármol pulido refleja la luz y lleva a una escalera de caracol, cuyas barandillas de hierro forjado se elevan hacia el segundo piso.
A la derecha, se encuentra un amplio salón, con sofás de terciopelo y una chimenea majestuosa que invita al calor y la conversación. A la izquierda, una biblioteca repleta de estanterías de madera oscura alberga volúmenes antiguos y cómodos sillones para perderse en la lectura.
Al fondo, se abre un comedor formal con una larga mesa de madera noble, rodeada de sillas tapizadas. Las ventanas ofrecen vistas al jardín, dejando entrar la luz natural y el suave murmullo del exterior. Cada rincón de la mansión irradia elegancia y confort, creando un ambiente acogedor y sofisticado a la vez.
MI hermana mika baja por las escaleras con una sonrisa y al verla recuerdo todo lo que acabo de ver, mis ojos se cristalizan y no puedo evitar llorar con fuerza, ella se acerca a mí con una expresión de angustia.
—Jeong, ¿Que ha pasado?, ¿Por qué lloras?, dime ¿Dimitri te ha hecho algo?.—me dice mientras me abraza con fuerza, un abrazo que no merezco por todo lo que le dije e hice pasar.
—Debió haber sido muy duro para ti—digo con voz entrecortada por el llanto.
—¿De qué estás hablando?.
—Dmitri me lo contó todo.
—¿Qué fue lo que te dijo?—me dice rompiendo el abrazo y mirándome con ojos de angustia y miedo.
—Lo mucho que trabjastes para conseguir todo esto sin ayuda de tu padre, que no dormías en las noches por estar trabajando solo para nosotros y por nosotros—digo volviendo a abrazarla.
—Ahh, no te preocupes realmente no fue nada, ya todo pasó y ahora solo quiero que vivamos felices por mucho tiempo—dice palmeandome la espalda.
—No debí tratarte como lo hice, ¿me puedes perdonar?—estaba metiéndole y me dolia mas no poder decirle, que lloraba por su dolor y por todo lo que pasó en ese maldito lugar.
—Por supuesto, ¿tú sabes que los amo mucho a los 3 verdad?, no podría vivir sin ustedes.
—Y nosotros a ti también te amamos mucho.
—¿Qué es esto?, ¿ya se dejó de portarse como un niño?—dice yeon mientras baja las escaleras con min-ji.
—Ahora si vamos a ser los mismos de antes, ¡abrazo familiar!—dice min-ji mientras corre a nosotros con yeon.
Nos dimos un buen abrazo, que realmente necesitaba para que la culpa y el remordimiento que sentía pudiera irse.