capitulo 13- en la misma habitación

La cena continuó tranquilamente, sin mencionar las miradas de odio de Dasha hacia Zoé.

— Y dime Zoé, ¿En qué trabaja tus padres? — Pregunta con una sonrisa definitivamente, se iba a encargar de vengarse por lo de la oficina la otra vez.

— No tengo por qué responderte esta Pregunta — Mira Dasha fingiendo una sonrisa.— Lo que se dedican mis padres no es tu incumbencia

— Qué grosera ella solo estaba preguntando — Intervino Aisling. — No había necesidad de responder así, Dasha también es de la familia y muy buena amiga de mi hijo, no había porque ser tan grosera Señorita secretaria — La mujer Sonríe.

— Mi nombre es Zoé. — Deja el tenedor en el plato mirando Aisling — No la culpó, señora, entiendo que está en su etapa de envejecimiento.

— ¡Tú! — Alza la voz Furiosa.

— Basta mujer. — Interrumpe el padre de Belial — Ya deja la chica en paz.

— No la quiero dentro de mi familia — Señala Zoé molesta mientras qué Dasha sonríe satisfecha.

— Ella no estará en tu familia madre, ni menos en tu vida, sino en la mía. — Belial se levanta — creo que no somos bienvenidos aquí Zoé — Extiende su mano a Zoé, quien la toma. — Es mejor que no vayamos.

— Belial, no le hagas caso a tu madre — Christopher se levanta. — Hace mucho que no, nos visitas quédate esta noche y mañana pueden irse. Además, ya es bastante tarde.

«¿Qué?» Zoé mira Belial.

— De acuerdo padre, nos quedaremos esta noche, pero mañana temprano nos vamos. — Toma Zoé en la cintura — ¿Verdad, cariño?

— S-sí — Asiente.

¿Quedarse? Eso no estaba en sus planes.

...***...

Zoé mira la habitación, no tenía idea cuando llegó aquí, pero esos no es lo peor, sino que ¡estaba en la misma habitación que Belial!

— Porque no pediste dos habitaciones, acaso estás loco.

— Claro que no, ¿Dos habitaciones? Cuando has visto dos parejas dormir en habitaciones separadas, si pudiera dos habitaciones sospecharían en seguida.

— Ah maldita sea — Se deja caer en el sofá, si hubiera dos camas en la habitación no tendría problema, pero solo una cama. — Bien hagamos esto — Mira Belial quién cruza sus piernas apoyándose en la cama — Tú duermes en el sofá y yo en la cama.

— ¿Y eso porque? — Belial Frunce los ceños mientras qué Zoé gruñe.

— Por qué sí, tú en el sofá y yo en la cama y asunto resuelto. — Se levanta para dirigirse en la cama, no pensaba dormir en el sofá para que mañana despierte con dolor de espalda ¡Por supuesto que no!

— Al menos ten un poco de simpatía. Si duermo en ese sofá mañana voy a levantarme con dolor en todo el cuerpo porque el sofá no es suficiente grande. — Y, por otro lado, Belial tampoco pensaba dormir en el sofá.

— Debiste pensar eso antes de aceptar que nos quedaremos. — Zoé se quita los tacones para subirse en la cama empujando Belial en el suelo.

— Oye.

— En el sofá celebrito. — Esta se cubre con la sábana.

— Tú no tienes simpatía — Belial gruñe para levantarse del piso — Hacemos esto, tú duermes en un lado y yo en otro.

— ¿Cómo puedo confiar en ti?

— No seas paranoica que podría hacerte. — Se encoge de hombros — Además imagínate que por la mañana entran en la habitación y nos encuentran durmiendo en distintos lugares. ¿Eh? — Mira Zoé.

— Ssshh — Esta se sienta en la cama callando a Belial debido al ruido que acabó de escuchar.

— ¿Qué pasa? — Pregunta confundido para mira la puerta y desde abajo de la puerta pudo ver dos sombras — No es cierto.

— Nos están espiando. — Mira Belial. — Súbete, súbete — Se hace un lado de la cama mientras qué Belial se sube. — estoy segura de que es esa víbora de Dasha o como se llame también tu madre — Ambos se acuestan en la cama compartiendo las mismas sábanas.— ¿Que haces? — Pregunta cuando esté se acerca a ella tomándola en la cintura pegando sus cuerpos.

— No olvides que nos están espiando.

— Eres un, pervertid-

— Ssh — Calla Zoé con su dedo índice. — No hables tan fuerte. — saca su mano mirando la chica. — Si nos están espiando es porque sospechan de algo — Sube arriba de Zoé.

— ¿Q-que crees que estás haciendo? — Mira Belial quién se quita la camisa enviándolo fuera de la cama — ¿Oye?

— No te preocupes, solo actuaremos — Acaricia el labio inferior de Zoé, quien desvía la mirada sonrojada y extrañada por esa sensación que está sintiendo.

— Tú, no te atrevas a cruzar la línea.

— Que estás sonrojada. — Se inclina hacia Zoé con una sonrisa — Sonrojada, te ves realmente preciosa Zoé. Y sabes que es lo mejor — Se acerca los labios de la chica — Me excitas — Susurra sobre los labios de la Zoé.

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