Frustración

Capítulo 18

Amador estaba angustiado por su hija, todo el camino se veía reflexiva y triste sin duda el enterarse de la esposa de Emiliano había sido un golpe duro para ella, no tenía idea de como darle consuelo.

Llegaron a casa y Cemrre solo quería ir a su habitación.

—Princesa espera quiero que hablemos.—dijo Amador

—No es el momento papá, quiero estar sola.—dijo Cemrre y subió a su habitación.

Amador sabía que había sido un error dar por hecho que Emiliano aceptaría a su hija, estaba furioso con Pilar.

—Papá también me voy a dormir, mañana mi hermana estará mejor.—dijo Ivonne

—Si princesa, dame un beso.—dijo Amador

Después de despedirse de sus dos hijas se sirvió un trago y se sentó a pensar en la esposa de Emiliano. Le recordaba a alguien pero no podía encontrar a quien. Su rostro le era familiar pero no podía haberla conocido ya que se veía que venía de muy lejos, sin darse cuenta su esposa había llegado del evento.

—Cariño que hacen aquí tan temprano?, pensé que seguirían en la cena en casa de los Larios.—preguntó Graciela

—Fue todo un desastre, ven siéntate.—respondió Amador

—Que sucedió?.—preguntó Graciela

—Sucede que Emiliano llegó como fue previsto pero con su nueva esposa, imagínate el golpe tan fuerte para nuestra hija. Estoy molesto y mucho, si Pilar no le hubiera dado esperanzas a mi Cemrre no se hubiera ilusionado. Además esa muchacha me recuerda a alguien pero no encuentro a quien.—respondio Amador

—Que incómodo momento, subiré con nuestra hija para hablar con ella.—dijo Graciela

—No cariño, ella quiere estar sola.—dijo Amador

—Al parecer esa mujer si te sorprendió, estás seguro que no la conocías?.—preguntó Graciela

—No, pero ya se a quien se parece. Tiene un gran parecido con nuestra hija Mónica.—respondió Amador

—Eso es imposible.—dijo Graciela

—Es más se parece a ti cuando te conocí, solo que ella tiene el cabello demasiado largo. Si no juraría que es tu hermana o hermana de nuestra Monica.—dijo Amador

Graciela no podía creer lo que estaba escuchando. Eso era demasiada coincidencia.

—Es imposible yo no tengo más familia más que ustedes y a mi hermano Rosendo lo sabes. Además hay mucha gente parecida en el mundo.—dijo Graciela

—Tienes razón amor pero si me dejo impactado, tiene un nombre muy fuerte para ser una muchacha tan joven.—dijo Amador

—En serio hasta su nombre te cautivó. Vaya debe ser alguien fuera de lo ordinario para llamar tu atención. Cómo se llama?.—pregunto Graciela

—Se llama Victoria.—respondió Amador

Graciela sintió como la sangre se había ido a sus pies, era demasiada coincidencia.

—Sabes cuál es su apellido?—preguntó Graciela

—No no lo dijo. Estas bien? te pusiste pálida.—preguntó Amador

—Estoy bien, es que pienso en lo mal que se debe sentir nuestra querida Cemrre. Sabes iré a prepararme para dormir, vienes?—pregunto Graciela.

—Ahorita te alcanzo cariño.—respondió Amador

Graciela subió a su habitación, se metió al baño. Lloraba frente al espejo mientras recordaba la plática con Amador.

—Dios esto es imposible, no puede ser ella. No puede ser ella. Necesito averiguarlo sin que Amador se dé cuenta.—se decía Graciela así misma.

Sentía muchas emociones juntas, pero antes de adelantarse tenía que estar segura de que era la misma Victoria.

Amador subió más tarde su esposa ya estaba dormida, una vez más se había quedado con la pulsera de una de sus hijas en su mano. Se preguntaba por que era tan especial esa pulsera para su esposa. Se la quitó y la guardo en el cajón, la arropo y apago la lampara. Graciela había llorado antes de quedarse dormida nadie sabía que era lo que la atormentaba.

La mañana siguiente Graciela había pedido que prepararan el desayuno favorito para Cemrre. Siempre desayunaban juntos en familia.

—Buenos días mamá.—dijo Cemrre

—Buenos días mi muñeca lamento lo que sucedió ayer en casa de los Larios, cómo estás?.—preguntó Graciela

—Pues una vez más me ganaron a Emiliano, no comprendo por que no puedo estar con el hombre que amo. Yo puedo hacerlo feliz, porque siempre elige a otras en lugar de mi. Que me falta para atraer su atención?—preguntaba Cemrre

—Eres perfecta hija mía solo qué hay mujeres más fáciles, pero tú mi princesa te mereces todo lo bueno de este mundo.—respondió Cemrre

—Maldita sea esa mujer, la hubieras visto es tan insignificante mamá. No entiendo como atrapo a un hombre como Emiliano, él es educado, caballeroso, un hombre maravilloso. Dudo que la señora Pilar se quede cruzada de brazos mientras esa intrusa quiere ocupar el lugar de la difunta Eloísa. Ese lugar le queda enorme, pero ya verás madre la vamos a poner en su lugar. Creo que no le enseñaron que la basura se queda en la basura.—dijo Cemrre

—Hija es mejor que dejes todo por la paz eres una mujer hermosa y puedes tener al hombre que tú quieras, eres una Gaxiola no debes rogar por amor. Además tu padre no lo permitiría.—dijo Graciela

—No te preocupes mamá, se que la señora Pilar se va a encargar de ella.—dijo Cemrre

De pronto Amador llegó al comedor.

—Buenos días mis amores, como te sientes?.—preguntó Amador a Cemrre mientras le daba un beso.

—Mejor papá ya lista para irme contigo a la empresa.—respondió Cemrre

—Excelente, y mis princesas más pequeñas?.—preguntó Amador

—Ya les mande llamar, hoy las llevaré al colegio personalmente. Después iré a ver si mi hermano regresó de Aguascalientes como me había escrito.—respondió Graciela

—Que sorpresa que mi tío Rosendo lo hayan cambiado para acá.—dijo Cemrre

—Si, desde que entró al seminario. Nos hemos visto contadas veces. Pero ahora que estará aquí espero poder convivir más con él.—dijo Graciela

—Lo que aún no entiendo es cómo terminaron separados, cómo entró a la vida religiosa dejándote sola? Espero algún día me tengas la confianza de decírmelo.—dijo Amador

—Claro que si amor, ya es tiempo.—dijo Graciela

Cemrre quería mucho a Graciela, ella había llenado su soledad cuando llegó a sus vidas. Era la única madre que conocía además de admirarla y sobre todo siempre luchar por ser como ella.

Más tarde Cemrre y Amador llegaron al corporativo, Amador tenía una reunión con Gerardo Larios sobre negocios. Cemrre fue a su oficina para trabajar en los pendientes que le había dado su padre, al entrar estaba esperándola Rodrigo.

—Que haces aquí?—preguntó Cemrre

—Aquí visitándote preguntándome cómo te encuentras? Obvio también vine a consolarte.—dijo Rodrigo

—Estoy perfectamente, la que debería estar preocupada es tu nueva cuñada.—respondió Cemrre

—No me digas que no te importa que mi hermano una vez más se caso con alguien que no eres tú, por que si es así podemos reanudar lo nuestro.—dijo Rodrigo mientras se acercaba a Cemrre

—Basta Rodrigo se que esa mujer no durará y yo buscaré a Emiliano, ya te dije que me caso con él porque me caso.—respondió Cemrre

—Mientas eso sucede deja que te consuele.—dijo Rodrigo mientras la besaba.

Cemrre no evitó corresponderle, tenían una relación enfermiza y pasional. Sin más dudas Rodrigo la hizo suya sobre el escritorio. Aunque fingía Cemrre que no, a ella le gustaba Rodrigo ya que él era ardiente.

Más populares

Comments

Mely Cordova

Mely Cordova

No que Carrem quiere mucho a Emiliano,sii fuera así no se metería. con Rodrigo,y dice que Victoria no lo merece, falsa

2025-03-03

0

Mirtha Varela

Mirtha Varela

típico hombre machista,si la mujer le pone los cuernos,pone el grito en el cielo 🤦

2024-11-28

0

Blacina Calvo Fernández

Blacina Calvo Fernández

Que mal que Rodrigo no respete a su esposa.

2024-09-15

2

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play